* Reaparece Pinochet para limpiar su imagen 

En libertad bajo fianza, el líder de la caravana de la muerte

* De nada sirve pedir perdón, afirma la defensa del ex dictador

Enrique Gutiérrez, corresponsal, y agencias, Santiago, 23 de agosto * El ex dictador chileno Augusto Pinochet hizo este miércoles su anunciada reaparición pública para "limpiar su imagen" de cara al proceso que deberá enfrentar por los crímenes de la caravana de la muerte, al tiempo que el ex general Sergio Arellano Stark era liberado bajo fianza.

Pinochet hizo una muda aparición pública de unos 80 minutos, por primera vez desde su desafuero del 8 de agosto y ante unos 200 seguidores de derecha y ex militares, para inaugurar un mural dentro de la fundación que lleva su nombre dedicado a los militares que murieron en las tareas represivas entre 1973 y 1988.

En un afán por hacerle recuperar su "protagonismo político", el ex senador vitalicio inauguró una placa con nombres de 500 civiles y uniformados, entre los que se contaban los cinco escoltas que murieron en el frustrado atentado en su contra del 7 de septiembre de 1986 por parte del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, brazo militar del Partido Comunista de Chile.

El flamante coordinador entre la defensa y el aparato progandístico que ahora se pone en marcha es el ex vicecomandante en jefe del ejército Guillermo Garín, quien señaló que "de nada sirve" pedir perdón por hechos dolorosos ocurridos en el pasado, porque pronto aparecerán nuevos temas que harán "resurgir los odios".

Otro ex vicecomandante en jefe, Rafael Villarroel, señaló que el gobierno del presidente Ricardo Lagos "ha hecho esfuerzos" para lograr la reconciliación en el país, pero discrepó que se deje a los tribunales la solución de un tema que "es netamente político", como el caso Pinochet, y acotó que para avanzar en la reconciliación es necesaria "una solución política".

El ex presidente, y también senador vitalicio, Eduardo Frei llamó a la derecha a ser "consecuente" y ratificar el discurso que tenía mientras Pinochet estaba detenido en Londres, cuando los voceros conservadores exigían que éste enfrentara los tribunales de justicia chilenos, y que esa fue siempre su línea como mandatario.

El Partido Demócrata Cristiano, por su parte, calificó el acto de Pinochet de hoy como "propagandístico" y encaminado a "pinochetizar" el tema, por lo que es "un insulto a la inteligencia".

A todo esto, el propio hijo del ex dictador, Marco Antonio Pinochet, admitió que se trataba de una campaña de comunicación para presionar una "salida política".

Mientras, la quinta sala de la Corte de Apelaciones de Santiago concedió hoy la libertad provisional y previo pago de una fianza de unos 4 mil dólares al ex general Sergio Arellano Stark, quien estaba bajo arresto domicilario desde hace 14 meses y aparece como el principal líder de la caravana de la muerte.

El fallo por dos votos contra uno se se produjo al considerar los jueces que Arellano Stark, cuyo caso permitió el desafuero de Pinochet, presenta antecedentes de salud que le son adversos, sobre todo una fuerte depresión. Y la defensa del ex militar aludió al principio de inocencia que la corte consignó expresamente en el fallo.

El dictamen fue rechazado de inmediato por los abogados querellantes, quienes anunciaron que apelarán ante la Corte Suprema de Justicia.

El jurista Hugo Gutiérrez lo calificó de "lamentable" por tratarse de "uno de los más grandes criminales en la historia", y confió en que al continuar el proceso vuelva a estar bajo arresto.