MIERCOLES 23 DE AGOSTO DE 2000

Ť El autor de El anticristo eligió pensar en lugar de vivir: José María Pérez Gay


El gran poder de convocatoria de la filosofía colmó Bellas Artes

Ť El investigador austriaco Herbert Frey dicta la serie de conferencias Nietzsche: Eros y Occidente

bellasartes Mónica Mateos Ť El filósofo "de la crisis de la cultura occidental", el hombre que llamó a su pensamiento "dinamita" en estado puro, el último metafísico, el gran provocador, Friedrich Nietzsche, fue la figura central que, para sorpresa de muchos, convocó a mil 900 personas la noche del lunes en la sesión inaugural, con la participación del filósofo José María Pérez Gay, del ciclo de conferencias que impartirá en el Palacio de Bellas Artes el investigador austriaco Herbert Frey.

La sala Manuel M. Ponce, con aforo para 300 personas, desde las 7:30 de la tarde se vio colmada por admiradores de las ideas del autor de Así habló Zaratustra. A cien años de su muerte, la pasión por el filósofo alemán que decretó la muerte de Dios confirma lo que escribió en sus poemas: "Yo sí sé de dónde vengo, satisfecho como la flama, ardo y me consumo. Luz que transforma todo lo que toco, carbón todo lo que dejo, flama soy seguramente".

El director del Instituto Nacional de Bellas Artes, Gerardo Estrada, "gratamente sorprendido" por el gran poder de convocatoria de la filosofía, dispuso abrir el teatro principal del palacio. "Su presencia -dijo ante la multitud de jóvenes- habla muy bien de la vida académica de México".

Herbert Frey explicó que en la Alemania de la posguerra el pensamiento de Nietzsche fue largamente difamado y que fue en Francia donde sus ideas se vieron libres de "esa leyenda de filósofo nazi". En el país galo se dio el auge de la filosofía de quien, en 1968 "jugó un papel mucho más importante en el movimiento estudiantil".

Considerado un filósofo poeta, "desde hace unas pocas décadas, el último provocador devino en el clásico al que agradecen su nombre revistas, sociedades, instituciones de investigación, etcétera. Nietzsche el intempestivo se convirtió en el filósofo de la crisis de la cultura occidental, sin cuyos planteamientos sería impensable la reflexión filosófica de nuestro siglo", dijo Frey.

Agregó que el pensador alemán "profetizó, parado al borde del precipicio, la fatalidad de su pensamiento para Europa en su autobiografía Ecce homo: 'Sé cuál es mi suerte. Un día mi nombre estará unido a algo gigantesco, al recuerdo de una crisis como jamás ha habido en la Tierra, el más profundo enfrentamiento de conciencia de un juicio definitivo mediante un conjuro contra todo lo que hasta ese momento se había creído, exigido y santificado. Yo no soy hombre. Soy dinamita'".

Frey detalló los caminos editoriales y analíticos de la filosofía de Nietzsche, desde los años sesenta hasta la aparición entre 1991 y 1994 de una extensa biografía de la infancia y la juventud del pensador germano, así como su obra póstuma donde se revela "más sutil y se hacen visibles los hilos conductores de su pensamiento".

Nietzsche, prosiguió el académico, "deseaba hacer de su filosofía algo útil a la vida, a la vez que brindar al arte del buen vivir las enseñanzas de la antigüedad, teniendo siempre presente la trágica condición de toda existencia, la que nunca quiso negar: 'Siempre concebí mis escritos con cuerpo y alma. No sé lo que son los problemas puramente espirituales'".

En el último capítulo de Ecce homo el autor se definió así: "Con todo, no tengo nada de fundador de una religión. Las religiones son cosa de la chusma, yo necesito lavarme las manos después de haberme relacionado con una persona religiosa. No quiero creyentes, pienso que soy demasiado malo para creer en mí mismo. Nunca le hablo a las masas, tengo un miedo terrible de que algún día me canonicen. No quiero ser santo. Prefiero que me consideren un bufón".

En este momento, el teatro de Bellas Artes irrumpió en aplausos atronadores.

Más: "Mi verdad es terrible, porque hasta el presente a la mentira se le ha venido dando el nombre de verdad, inversión de todos los valores. Contradigo como nunca antes se ha contradicho y pese a ello soy lo contrario a un espíritu negativo. A pesar de todo soy también necesariamente el hombre de la fatalidad, pues cuando la verdad presente batalla a la mentira de milenios se producirán temblores, un espasmo de terremotos como nunca se había imaginado.

"La idea de política quedará totalmente absorbida por una guerra de espíritus. Todas las formaciones de la antigua sociedad saltarán por los aires porque todas se basan en la mentira, habrá guerras como nunca las hubo en la tierra. Sólo a partir de mí aparecerá en el mundo la gran política: Ecce homo".

Maestro en el arte de bajar la temperatura de las ideas mediante la ironía: Pérez Gay

El director del Canal 22 de televisión, José María Pérez Gay, en sus comentarios a la conferencia de Frey, explicó que Nietzsche no ha sido traducido bien al español. Los únicos trabajos que valen la pena son los que realizó Andrés Sánchez Pascual, cuatro o cinco libros que fueron editados por Alianza, la cual suspendió las publicaciones. Es decir, si se toman como referencia los 16 volúmenes de la obra del filósofo alemán traducido por especialistas italianos, en español no conocemos ni la mitad de su pensamiento, "y ni uno solo de los ocho libros póstumos".

Pérez Gay, filósofo y gran analista de la obra de Nietzsche, consideró que el pensamiento fue para el autor de El anticristo no sólo una pasión o un interés, sino una necesidad vital en sentido profundo. Eligió pensar en lugar de vivir, incluso, en alguna carta a un amigo escribió que lamentaba "haber pensado y nunca vivido", pero en seguida justificaba que se dedicó a "pensar para salvar la vida".

Citó pasajes de la vida amorosa del autor alemán y concluyó: "Nietzsche fue un maestro en el arte de bajar la temperatura de las ideas con la ayuda de la ironía, a la que convirtió en su albacea, sobre todo cuando las ideas eran demasiado radicales. Siempre exigió exactitud de sus lectores".

Con su obra, a cien años de su muerte, "el cielo se deleita, el mundo se ha transfigurado".

(El ciclo de conferencias Nietzsche: Eros y occidente. La crítica nietzscheana de la visión del mundo occidental continuará hoy y mañana las 20 horas en el Palacio de Bellas Artes.)