MIERCOLES 23 DE AGOSTO DE 2000

Ť Las acusaciones al Senado buscan desestabilizar, dice


Si se comprueban sobornos, me retiro de la política, dice Alfonsín

Ť El presidente argentino refrendó la confianza en sus funcionarios

Stella Calloni, corresponsal, Buenos Aires, 22 de agosto Ť El ex presidente argentino Raúl Alfonsín advirtió hoy que podría retirarse de la política si se comprueba que senadores de la oposición justicialista fueron sobornados para apoyar la polémica ley de Reforma Laboral, el pasado 26 de abril, lo que degeneró en protestas sociales. Aunque calificó de falsa la acusación -que parte de una carta anónima- dijo que se ha causado daño al país porque "todo el mundo está sospechando y no solamente del Senado".

Alfonsín opinó que hay que observar estas acusaciones en el contexto de una serie de acciones desestabilizadoras, como las recientes declaraciones del ex presidente Carlos Menem proponiendo la dolarización, o las de militares que han hablado de "anarquía" en el país.

Este miércoles el gobierno del presidente Fernando de la Rúa presentará una denuncia formal ante la justicia Federal para que se investiguen los supuestos casos de soborno. Ayer, el vicepresidente Carlos Alvarez habló de una operación Manos Limpias al estilo italiano en Argentina.

Alvarez, máximo dirigente del centroizquierdista Frente País Solidario (Frepaso) que integra la Alianza gobernante, incluso considera un desafuero colectivo de los senadores para que la justicia pueda investigar sin limitaciones. Alvarez ha tomado posiciones firmes en cuanto a la corrupción denunciando en su momento la existencia de listas de personas que recibían salarios sin trabajar en el Congreso.

En el Partido Justicialista el senador Antonio Cafiero amenazó con abandonar la bancada de su bloque debido a que sus colegas no lo apoyaron cuando reclamó una investigación para esclarecer las acusaciones de soborno que pesan contra ellos.

La mayoría mira hacia el despacho del cuestionado jefe de los Servicios de Inteligencia del Estado, el empresario Fernando de Santibáñez, y también se considera sospechoso el ex ministro del Interior del pasado gobierno de Alfonsín, Enrique Coti Nosiglia y senadores del justicialismo y de la Unión Cívica Radical, de Alfonsín.

Tanto Alfonsín como Alvarez han advertido sobre la gravedad del momento creado a partir de un mensaje enviado vía Internet desde un portal público bajo el título: "Sobornos, la trama secreta".

Hasta ahora no hay pruebas de esto y voceros oficialistas señalan que esto sucede en momentos en que la justicia seguía diversos procesos que involucran a altos funcionarios de la pasada administración, incluidos varios ex ministros, y que parecían acercarse lentamente a las puertas del ex presidente Menem.

Alvarez señaló a La Jornada que "todo es grave. Si esto no es cierto, hay que ver quién esta detrás de esta acción de guerra sucia. Si es verdad, hay que poner en claro todas las responsabilidades, sean de quien sean". Acusó al senador justicialista, Jorge Yoma de tratar a de involucrar en el escándalo a De la Rúa. "Me parece bajo, mezquino y una acción manipuladora de lamentables juegos políticos, cuando estamos investigando una denuncia anónima.

En tanto, De la Rúa refrendó su confianza en sus funcionarios y los exhortó a presentarse voluntariamente a declarar lo que sepan del caso a la Oficina Anticorrupción.

El sindicalista Hugo Moyano, secretario de la Confederación General del Trabajo (CGT disidente) pedirá a la justicia que anule la ley de Reforma Laboral si se comprueba que hubo soborno. Moyano denunció que en abril pasado y en una conversación informal le comentó al ministro del Trabajo, Alberto Flamari, que los justicialistas no votarían por la Reforma Laboral a lo que el funcionario habría respondido: "para eso tenemos la Banelco" (Tarjeta bancaria).

Este martes se instaló una Comisión en el Congreso que estudiará el tema de la deuda externa, luego que el juez Jorge Ballesteros determinó que una parte de ésta fue adquirida durante la pasada dictadura militar, como resultado de ilegalidades diversas. De hecho la ley de Reforma Laboral, que incluyó rebajas en los salarios, está también bajo la mira de la justicia, pues varios magistrados opinan que es ilegal en varios puntos.