DOMINGO 20 DE AGOSTO DE 2000
Ť Carlos Montemayor Ť
La mentira del sector energía
El pasado 15 de agosto, Vicente Fox afirmó, después de recibir un "amplio y preciso" informe del actual secretario de Energía, que hay señales de limitaciones en las áreas de energía eléctrica y de petroquímica que pueden convertirse en verdaderos cuellos de botella y que, por tanto, deberían preverse con tiempo las inversiones necesarias y los cambios que requiere el sector energético para que no se estrangule el crecimiento del país.
Pero seguramente en ese amplio y preciso informe no se le aclaró a Vicente Fox que en agosto de 1995, durante la ceremonia conmemorativa del quincuagésimo octavo aniversario de la Comisión Federal de Electricidad, el presidente Ernesto Zedillo había asegurado que estaba garantizada la demanda de electricidad por los siguientes 10 años, es decir, al menos hasta el 2005, y que por fin sería posible electrificar prácticamente la totalidad del territorio nacional. El presidente fue muy explícito al afirmar que para cumplir con ese meta había cuatro proyectos en construcción, uno a punto de ser comenzado, cuatro más serían licitados en lo que restaba del año y nueve proyectos más para ser concursados entre 1996 y 1998. Los proyectos de transmisión prioritarios estaban organizados en 19 paquetes de obras, de los cuales cinco ya se habían licitado, dos estaban en proceso de convocatoria, 10 programados para convocatoria y dos en el proceso de ingeniería preliminar.
Es posible que tampoco se le haya informado a Vicente Fox que en la Prospectiva del sector eléctrico 1997-2006 se especificó la necesidad de incorporar al sistema eléctrico 13 mil 189.2 megavatios de capacidad de generación en los siguientes 10 años, pero que de ellos, 3 mil 260.7 megavatios correspondían ya a capacidad comprometida, es decir, a proyectos en construcción, licitación o ya contratados, y 9 mil 928.5 megavatios a la capacidad adicional.
Seguramente tampoco se le hizo saber que en diciembre de 1998, el anterior director de la Comisión Federal de Electricidad declaró que la capacidad comprometida se estimaba ya para ese momento en 7 mil 600 megavatios y que los restantes 5 mil 589 megavatios se resolverían con nueve convocatorias que la comisión emitiría en el año de 1999; por tanto, quedaba así "garantizado el abasto oportuno y eficiente de electricidad para los mexicanos hasta el año 2006".
No se le explicó que muy poco después de esas afirmaciones de diciembre de 1998 el presidente Zedillo y su nuevo secretario de Energía emitieron declaraciones totalmente opuestas. Alguien mintió en el gabinete del presidente Zedillo. Si los anteriores secretarios de Energía nos hicieron creer en vano a los ciudadanos que México tenía asegurado el crecimiento del sector eléctrico durante 10 años, Ƒno debería el presidente Ernesto Zedillo haber denunciado los engaños de esos secretarios y de los anteriores directores de la Comisión Federal de Electricidad? Alguien miente en el gabinete.
En los últimos sexenios, uno de los más dóciles funcionarios al servicio de la americanización económica de México y de la privatización a ultranza de los bienes nacionales es el actual secretario de Energía. Es peligroso y se presta a suspicacia que una persona tan riesgosa como él sea el que haya descubierto al país y a Vicente Fox que estamos al borde de la crisis en el suministro eléctrico. Porque es posible que él no encabece un proyecto para el verdadero fortalecimiento del sector energía, sino un proyecto de privatización y subasta del sector.
Es grave que tantas afirmaciones, declaraciones, documentos oficiales, mensajes a la nación, estudios y proyecciones de cuatro años de gobierno carezcan de valor en cuanto un ciego creyente de la privatización asciende en las escalas de la burocracia. Si todas las declaraciones gubernamentales anteriores al ascenso del actual secretario de Energía estaban equivocadas, el Presidente debió haber evaluado la responsabilidad de sus anteriores colaboradores del sector energía. Debió haber aclarado cómo fue posible que en un aspecto primordial para el desarrollo económico de México las afirmaciones oficiales pudieran ser tan erráticas.
Después de tantas declaraciones contradictorias, Ƒqué garantía tiene ahora Fox de que la privatización del sector eléctrico no pueda ser un error más grave? El secretario de Energía sabe que él mismo no constituye ninguna garantía; pero sí sabe que la garantía para la privatización y americanización de México es Vicente Fox mismo. Dócilmente le allana el camino al continuador de una política económica que se inició desde el 2 de julio de 1982. El secretario de Energía sabe que el proceso de desmantelamiento del país entró en su cuarto periodo de neoliberalismo y americanización el pasado 2 de julio.