MIERCOLES 16 DE AGOSTO DE 2000

Ť Los municipios autónomos del norte y la Lacandona, en alerta permanente


Movilizan tropas en comunidades zapatistas en vísperas electorales

Ť Los paramilitares divulgan que atacarán la población ejidal La Revolución de Tila

Hermann Bellinghausen, enviado, San Cristóbal de las Casas, Chis. 15 de agosto Ť Todo parece listo para el apretón final. La amplia ofensiva paramilitar de las bandas armadas de lo que fue Paz y Justicia en Tila, Yajalón y Palenque, así como las agresiones policiacas y paramilitares a comunidades de Ocosingo, Altamirano y Chilón en los últimos días son apenas el anuncio de la quieren armar el gobierno estatal y el partido todavía oficial para el próximo fin de semana.

A diferencia de lo que ocurrió el 2 de julio -en que el Ejército se retiró a sus cuarteles- en estas vísperas electorales se vive una movilización generalizada de tropas y fuerzas policiacas en las comunidades zapatistas y en las que la presencia de la opositora Alianza por Chiapas es mayoritaria. Proliferan las amenazas de muerte, las "invasiones de tierras", justamente ahora (Tierra y Libertad-El Paraíso fue el primero de los muchos episodios que ahora mismo se están suscitando), las detenciones violentas y arbitrarias de personas inocentes, el bloqueo de caminos por parte de paramilitares armados, uniformados y frecuentemente con pasamontañas.

Las casillas donde el 2 de julio tuvo mala votación el PRI en esta ocasión fueron borradas del mapa. Sólo en la selva de Ocosingo "desaparecieron" 8 y en Chilón 3.

Los municipios autónomos de la zona norte y la selva Lacandona se encuentran en alarma permanente. En el mismo sentido, la ARIC Independiente, por boca de su dirigente Porfirio Encino, denuncia la grave situación: "Pueden matar gente. Albores va con todo". Ante las decenas de conflictos "espontáneos" que están surgiendo, "como para justificar que no haya elecciones o se den con fuertes operativos de seguridad para aterrar a la gente", la ARIC Independiente plantea estas demandas urgentes: que se instalen las casillas eliminadas, que se acuartele al Ejército federal para que no interfiera en los comicios, y que se calme la tensión en las comunidades.

Diversas fuentes confirman la existencia de una nueva red de teléfonos satelitales y radios-base que conectan a las comunidades priístas de toda la región indígena de Chiapas al sistema 066 de Tuxtla Gutiérrez, extraoficialmente controlado por el Ejército federal y que se supone es para el servicio civil de emergencias. A la vez, la red de telefonía rural ha dejado de funcionar o está vedada para el público, lo que de no resolverse significará que el próximo domingo las tierras indígenas estarán incomunicadas con el exterior. La Alianza por Chiapas teme que esta circunstancia permita todo tipo de irregularidades, incluidas las violentas, sin que haya manera de informar a tiempo a las autoridades electorales y a los organismos civiles de observación.

Andanada paramilitar

La población ejidal La Revolución, en el municipio de Tila, está a punto de ser atacada por civiles armados de Paz y Justicia, actualmente reunidos en Pasijá, en el vecino municipio de Sabanilla. Dos testimonios distintos, uno procedente del propio Pasajá, y el otro de Tila, coinciden en que los paramilitares divulgan la especie de que atacarán La Revolución en cualquier momento esta semana. De hecho, dicho grupo ya controla los caminos y veredas de la zona. Según la gente, empuñando armas de grueso calibre, han detenido, golpeado y amenazado a campesinos que transitan por ahí.

En la cercanías de Chancalá fueron vistos ayer varias decenas de hombre vestidos de verde, de uniformes "parecidos" a los militares. Dijeron que intervendrían en La Revolución, "para desalojar a esos zapatistas". Se teme un "operativo" similar al de El Paraíso, bajo el pretexto de moda de "disputa de tierras". Los conflictos agrarios Ƒtambién van a la guerra?

La Red de Defensores Comunitarios por los Derechos Humanos informó que los paramilitares de Paz y Justicia se están concentrando en distintas comunidades, al grado de tener problemas incluso con las familias priístas. Priístas pacíficos han manifestado su inconformidad; en Roberto Barrios uno de ellos fue colgado por los paramilitares, pero logró descolgarse y huir. El miedo recorre el espinazo tanto de priístas como zapatistas o simpatizantes de la Alianza por Chiapas (perredistas, y en menor medida, del PAN).

En Hidalgo, municipio de Palenque, se encuentra otra concentración de paramilitares armados. Y la tensión entre priístas en Roberto Barrios es tal que las bases de apoyo del EZLN en dicha comunidad se encuentran "entre dos fuegos", según su propio testimonio.

Las diferencias entre los dos grupos de Paz y Justicia llevó a una asamblea, el día 9, en Arimatea. Campesinos de las 27 comunidades afiliadas a la organización, con el fin de analizar lo que sus dirtigentes no les han cumplido, así como los proyectos productivos y programas de apoyo que se han desvanecido antes de llegar a la gente, contra lo que dice el slogan de Sami David: Primero la gente.

En el mismo sentido, nuevamente, la ARIC Independiente señala que las autoridades priístas han desatado una campaña de calumnias contra los opositores. Mientras los grupos priístas armados "son los que roban ganado, secuestran gente, roban tiendas, bloquean caminos, desalojan familias enteras", se dice a las bases priístas que son los zapatistas y los perredistas quienes realizan estas acciones. Con el mismo procedimiento, la Procuraduría estatal ha encarcelado ya a campesinos de Unión Progreso y Yajalón. Se trata de convertir doblemente en víctimas a los opositores.

La Alianza exige que se instalen las casillas eliminadas en Amador Hernández, Pichucalco, Macedonia, Sacrificio la Esperanza, Río Florido, Campo Alegre, La Unión y Pataté Viejo (Ocosingo) y en Muc'uljá, Chalamchem y Jotoaquil (Chilón). También que se reinstalen los teléfonos rurales, que se acuartele el Ejército federal y que cesen amenazas, agresiones y encarcelamientos.

En Roberto Barrios, donde existe un Aguascalientes zapatista, los movimientos de Paz y Justicia son continuos. Hace unas noches, alrededor de 150 paramilitares uniformados incursionaron en la comunidad a eso de las 3 de la mañana, y colocaron rápidamente decenas de carteles propagandísticos con la efigie de Sami David David.

Amenazas, encarcelamientos, desalojos

La Red de Defensores Comunitarios denuncia que existe una abierta persecución a los defensores de derechos humanos de su organización, y muchos están amenazados de muerte. Por tal motivo, han dejado de dar sus nombres al hacer denuncias. Se han dado casos en que estos defensores son retenidos en los retenes militares, donde se les hostiga y toman fotografías de sus acreditaciones, como prueba en su contra.

En el ejido Luis Echeverría, "los grupos de Paz y Justicia provocan problemas para culpar a las comunidades en resistencia", dice la Red. El ejido San Felipe Tulijá es sobrevolado por helicópteros militares a muy baja altura.

En Palestina, Modesto Hernández Encino, encargado de Procampo, y Mariano Díaz Arcos, han estado presionando a los priístas contra la gente de la Alianza por Chiapas. El mismo ambiente de violencia prefabricada se vive en Arena Segunda Ampliación y en Santo Domingo.

La construcción de caminos con fines militares se ha apresurado estos días. Así los tramos que parten hacía Luis Echeverría Alvarez desde Santa María, Chancalá Zapote y Samaritano, "carreteras que no benefician a las comunidades, son para facilitar la entrada de militares y el cerco a las comunidades" según la Red. Algo similar ocurre con las obras que va de Roberto Barrios hacia Salto de Agua, pasa enfrente del Aguascalientes, y completa el cerco militar a la comunidad.

Por último, y mientras en el violento ataque de Paz y Justicia contra Tierra y Libertad en Yajalón no hubo detenidos después de la intervención de la fuerza pública, el viernes 11 de agosto la Seguridad Pública de Ocosingo detuvo violentamente a Isidro Entzín Pérez, de 22 años, y a Natalio Entzín Pérez, de 16 años, en la comunidad de José María Morelos y Pavón, en el municipio autónomo 17 de Noviembre (Altamirano).

Quizás pesa en este curso dramático de los acontecimientos el hecho de que numerosos campesinos priístas en Palenque y Ocosingo se han pasado al PAN, listos para caer del otro lado del cambio. Y si eso ocurre en las tierras donde el PRI espera todavía ordeñar el "voto verde", se comprende que el oficialismo esté elevando tan peligrosamente la temperatura política.