MIERCOLES 16 DE AGOSTO DE 2000

Ť Por la remexicanización, crecen luchas sociales


Los Angeles, donde viven los más ricos de EU... y los más pobres

Ť La ciudad tiene un producto bruto mayor que el de México

Jim Cason y David Brooks, enviados, Los Angeles, 15 de agosto Ť A sólo unas 10 cuadras del Staples Center, donde se celebra la Convención Nacional Demócrata, grupos de hombres y mujeres sin techo se esconden del sol en puertas con bolsas llenas de lo único que tienen, una imagen vívida de que el auge económico que celebran los políticos en un centro con aire acondicionado, al que llegaron en limosina, aún no ha beneficiado a todos en este país.

Los Angeles es la tercera economía metropolitana más grande del mundo, con un producto bruto mayor al de México y una imagen de lujo proyectada por Hollywood, pero también es la ciudad donde la brecha entre pobres y ricos es más visible y sede de vanguardia de algunos de los movimientos sociales más importantes que están cambiando el panorama estadunidense.

También es la tercera ciudad más grande de mexicanos en el planeta, después de la ciudad de México y Guadalajara: Los Angeles no sólo tiene la población latina más grande de Estados Unidos (80 por ciento de ellos son de origen mexicano), sino que este último año ese grupo étnico ha superado al número de habitantes blancos.

En los últimos 10 años la radiodifusora KSCA-FM, que trasmite en español, se convirtió en la estación de radio más escuchada, mientras a unas cuadras al oriente y al poniente del centro de convenciones, en la parte céntrica de esta ciudad, los letreros son en español y sólo algunos restaurantes y tiendas se atreven a informar, en español, que "se habla inglés".

Paseando por las colonias que rodean el centro, la evidencia es amplia de que hay más mexicanos que casi en cualquier otra ciudad de México y más salvadoreños que en San Salvador.

Gran parte de este cambio en la composición de esta ciudad se ha producido en los últimos 15 años, pero no todos los nuevos angelinos hablan español.

El diario Los Angeles Times informa que ahora hay concentraciones más grandes de iraníes, de gente de Samoa, filipinos, armenios, guatemaltecos y coreanos en esta región que en cualquier otra parte del mundo fuera de sus países de origen.

Estos cambios en una ciudad donde históricamente la minoría más grande y poderosa fue la negra, una urbe que ahora cuenta con 216 políticos electos latinos locales, que representa una tendencia que se repite en varias partes de Estados Unidos.

El experto Mike Davis dice que en seis de las 10 ciudades más grandes del país (Nueva York, Los Angeles, Houston, San Diego, Phoenix, y San Antonio) los latinos suman ahora más que los negros.

La remexicanización de esta ciudad también fue evidente hace unos días en las luchas que se realizan en la zona metropolitana. El lunes, frente al lujoso hotel Loews, en la playa de Santa Mónica, líderes de la central obrera y figuras políticas se manifestaron en apoyo a la fuerza laboral mayoritariamente mexicana que da una lucha para sindicalizarse.

Y los miles de trabajadores de limpia, también casi todos mexicanos, han hecho que esta ciudad sea la sede del movimiento sindical más dinámico del país, revitalizando así al movimiento nacional.

El martes, burócratas se manifestaron en el centro angelino para exigir un contrato colectivo justo, y cada día de esta semana un sindicato diferente realizará acciones para enfatizar diversas demandas laborales.

María Elena Durazo, secretaria general de la sección 11 del Sindicato Nacional de Empleados de Hoteles y Restaurantes, hija de jornaleros mexicanos, comentó a La Jornada que su sindicato entiende la necesidad de apoyar a trabajadores mexicanos recién llegados.

"Necesitamos que se entienda que el sindicato está de su lado y es importante que ellos comprendan que al venir a este país deberían estar preparados para luchar, ya que llegarán sin derechos".

Por eso, dice Durazo, "nuestro sindicato ha tenido un papel principal en la promoción de la amnistía general para los indocumentados a nivel nacional".

Este año, el sindicato nacional de Durazo logró que la central obrera AFL-CIO revirtiera su tradicional oposición a los indocumentados y adoptara una política a favor de una amnistía.

Esta revitalización del movimiento sindical también ha sido nutrida por un crecimiento económico sin precedente en Los Angeles, en donde partes enormes de la economía local han sido reconstruidas y han atraído a más de 2 millones de nuevos residentes. Pero el crecimiento económico de Los Angeles, como en tantas otras partes del país y el mundo, ha sido desigual.

En los últimos 15 años de crecimiento económico, 800 mil personas ingresaron a las filas de los pobres, mientras en los hoteles de lujo donde se alojan los delegados e invitados a la Convención Nacional Demócrata, y el centro de convenciones, hay más que suficientes hechos como para recordar que 20 por ciento de la población de esta ciudad vive en la pobreza.

Y aunque la contaminación ambiental es peor en Houston que aquí, el número de a EU-28-1 utomóviles en la zona metropolitana se ha duplicado durante los últimos 15 años, aunque los fondos para el transporte publico siguen siendo muy limitados.

Esta es una ciudad de estrellas de cine, de millonarios de Beverly Hills, de fortunas petroleras y agrarias, así como también de algunos de los pobres más pobres del país.

"Es más fácil conseguir drogas que educación en las calles de South Central (el barrio más pobre) en Los Angeles", indicó hoy el actor Tim Robbins.

La ciudad ya no es la de aquella rubia de ojos azules de los Beach Boys y de las viejas películas de Hollywood. Aquí está reunido el mundo, y Los Angeles ahora es más diversa que nunca.

Como la calificó hoy el reverendo Jesse Jackson, Los Angeles es el "hogar de los fabricantes de sueños, pero también hogar de los limpiadores que asean el mundo de ustedes... donde viven algunos de los más ricos en Estados Unidos, así como también de los más pobres".