* Otros países aportan hasta 2% en ese rubro, revela un funcionario del IMSS


Destina el sector salud 0.3% de sus fondos a la investigación

Carolina Gómez Mena * Aunque la investigación científica es el motor del desarrollo, en México se destina a los estudios de salud sólo 0.3 por ciento del los recursos asignados anualmente al sector. "Así nunca despegaremos", lamentó Juan Garduño Espinosa, jefe de la División de Informática Médica de la Coordinación de Investigación Médica del IMSS.

El maestro en ciencias por la UNAM, señaló a La Jornada que Inglaterra, líder en la materia, destina cada año a ese rubro 2 por ciento de su presupuesto de salud, y comentó que otro indicador del atraso en esta actividad lo constituye la tasa de científicos con que se cuenta. En México, por ejemplo, hay 20 científicos por 100 mil habitantes; en cambio, en Estados Unidos y Japón hay 500 investigadores por 100 mil. En el campo de la salud, nuestro país tiene un investigador por cada 100 mil personas.

En Estados Unidos, cuatro de cada 100 médicos son investigadores de primera línea, con por lo menos siete años de especialización. En México sólo hay un médico especializado por cada 100 galenos.

Otro punto de referencia es el número de graduados en ciencias médicas. En Canadá son mil 500 egresados al año y en Estados Unidos, 70 mil, de los cuales 40 mil son maestros en ciencias y 30 mil son doctores en ciencias médicas. En el país no se llega a los 500 por año.

Garduño Espinosa indicó que gracias a los esfuerzos del IMSS en los últimos 10 años, la actividad ha tenido un crecimiento. Mencionó que durante ese lapso el instituto ha crecido en 200 por ciento en ese ámbito, ya que a principios de la década contaba con apenas 100 investigadores que publicaban 500 artículos al año, y hoy posee 311 y se elaboran mil, tanto para revistas nacionales como internacionales.

Ante ese panorama, el investigador refirió que la próxima administración debe respetar la visión a mediano y largo plazos con la que se han trazado los estudios. Confió en que estos planes no se abandonen, pues aunque la actividad demanda muchos recursos, también representa un ahorro a futuro, al hacer más eficiente la toma de decisiones y permitir desarrollar una mayor calidad en atención de salud.

''En algunos años estaríamos produciendo más salud a menor costo, pero para conseguirlo necesitamos de la investigación, de otra manera no se tomarán las mejores decisiones".

En este punto resaltó que el Congreso de la Unión debe procurar el aumentó del presupuesto para salud, el que actualmente es de 4 por ciento del producto interno bruto. Explicó que en países de mejores estándares se invierte 8 por ciento.

Sostuvo que otra limitante para invertir en investigación es que el dinero se recupera a largo plazo, a veces después de dos décadas, debido a que en promedio la formación de un investigador de primer nivel en el campo de la salud requiere alrededor de 18 años.

A causa de lo anterior, México no podrá llegar a los niveles internacionales en breve, pero si no se comienza pronto, jamás lo hará. Por ello habría que cuadriplicar de forma paulatina (a lo largo de 10 años) el presupuesto general destinado a todo tipo de investigación, el cual asciende a 0.5 del PIB.

Indicó que el IMSS, en su afán de promover la cultura de la investigación entre el personal médico y la población en general, ha orientado sus estudios a las problemáticas en salud que en mayor medida afectan a los derechohabientes, así como al resto de la población.