MARTES 15 DE AGOSTO DE 2000
* Sus principios siguen vigentes, afirma; el Partido Popular lamenta la decisión
Se mantendrá el PNV en el Pacto de Lizarra: Arzalluz
Armando G. Tejeda, corresponsal, Madrid, 14 de agosto * La Ejecutiva del Partido Nacionalista Vasco (PNV, en el gobierno local) concluyó hoy, tras una reunión para analizar los efectos de la más reciente ofensiva de la organización armada ETA, que el Pacto de Lizarra ha quedado "invalidado" por culpa de la "fetichización" de la que ha sido objeto por parte del gobierno central español, así como por los más recientes atentados del grupo separatista.
El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, sostuvo que los principios y el espíritu de Lizarra siguen vigentes, por lo que su partido permanecerá en dicho pacto, creado en septiembre de 1998 y al que se adhirieron partidos políticos, sindicatos y otros agentes sociales nacionalistas.
Arzalluz aseguró hoy que su partido decidió permanecer en el Pacto de Lizarra al igual que su socio en el gobierno, el partido Eusko Alkartasuna (EA).
La reunión del PNV ocurrió un día después de que el vocero del partido en el Congreso, Iñaki Anasagasti, publicó un artículo en el que declaró "muerto" el Pacto de Lizarra "por culpa de ETA y por la cobardía de los líderes de EH". Xabier Arzalluz afirmó que el artículo de Anasagasti no significa que haya divisiones dentro del partido, sino coincidencias, y sostuvo: "nosotros hemos dicho que Lizarra quedó 'congelado' o 'invalidado', tras los atentados de ETA", y agregó que esto se debe también a la actitud de Madrid y a la violencia callejera de simpatizantes del grupo armado. "Ningún proyecto, ninguno tiene sentido si no se le acompaña o se prepara fuera de cualquier acto de violencia. Y eso es Lizarra. Por tanto, que sigan fetichizándolo. Y el que quiera ser engañado, pues, allá él".
En cuanto a la política del presidente del gobierno español, José María Aznar, ante el conflicto vasco, Arzalluz señaló que la solución "vendrá por la vía del diálogo y no por la lucha policial, que por mucho que se empeñe el señor Aznar, esta no es la solución".
El secretario general del Partido Popular, gobernante en España, Javier Arenas, expresó su más "profunda decepción" por la postura del PNV. "Que- remos una respuesta, porque si siguen siendo válidos los principios en los que se reafirma, el PNV va a seguir contribuyendo al intento de ruptura del marco constitucional".
El gobierno español y el Partido Socialista Obrero Español han exigido desde febrero pasado la celebración de elecciones vascas anticipadas, en las que el actual ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, sería el candidato del PP a ser el nuevo presidente vasco. Días después de la creación del Pacto de Lizarra, ETA declaró una tregua unilateral que se prolongó 14 meses y que significó el periodo más largo sin atentados violentos en la historia del conflicto vasco.
Por ello, líderes del PNV han reiterado, tras la ruptura de la tregua de ETA en diciembre pasado y atentados que han dejado nueve muertos y varios heridos, que el Pacto quedó "congelado". Sin embargo, tras cada nuevo ataque, el gobierno de Aznar ha acusado al PNV de "complicidad" con ETA, debido que el partido había firmado el Pacto de Lizarra al igual que EH. El PNV mantenía con dicha coalición pactos municipales que rompió hace unos meses.
Pero Aznar se ha mostrado inflexible hacia el PNV y el gobierno regional del presidente Juan José Ibarretxe, y reiterado que mientras no se disuelva "ese pacto criminal que es Lizarra, no habrá diálogo". Aznar exige además al gobierno vasco acatar el Estatuto de Autonomía y renunciar a sus intenciones de reformar la Constitución para lograr mayor soberanía y autonomía de los vascos, ideas que son el eje de la oferta política del PNV y del resto de los partidos nacionalistas en la región.
Por último, la Fiscalía del País Vasco presentó hoy las querellas por "apología del terrorismo" anunciadas el domingo contra el vocero de EH, Arnaldo Otegi; el concejal de EH en Bilbao, Lander Exteberría, y el ex miembro de la mesa nacional de Herri Batasuna, Jon Idígoras, por su participación en un homenaje, el sábado, a cuatro miembros del grupo armado vasco ETA, muertos el lunes pasado cuando estalló antes de tiempo el coche-bomba que conducían por Bilbao.