LUNES 14 DE AGOSTO DE 2000
Ť Los presuntos agresores aseguran que no se encontraba al iniciarse la riña
Sigue el misterio en torno al policía ultimado
Ť Se contradicen con versión de uniformados Ť Están acusados de homicidio y robo calificados
Angel Bolaños Sánchez Ť Nada claro hay sobre la forma en que murió el policía auxiliar de la Secretaría de Seguridad Pública, Ernesto Antonio López Osorio, durante un enfrentamiento con asaltantes de microbús el pasado martes en la colonia San Pedro de los Pinos.
En su declaración ante el Ministerio Público, los cuatro detenidos: Francisco Sánchez Reyes, Gustavo Barojas Torres y los hermanos Roberto y Gabriel Islas Castro, a los que sólo se les acusa de tentativa de homicidio calificado y robo calificado, negaron ser asaltantes, pero admitieron haber enfrentado a los policías, entre los cuales, y según el expediente consignado al juez, no se encontraba López Osorio al iniciar la riña.
La Procuraduría General de Justicia capitalina refiere en su acusación que alrededor de las 16:0 horas se encontraban en la patrulla 05010 los policías René García Martínez y Aurelio Romano Sánchez, sobre avenida Revolución, cuando se acercó un microbús y el conductor les dijo que varios sujetos que se encontraban a bordo de un taxi los habían asaltado.
Se aproximaron al vehículo que les señaló, apenas a un metro de distancia, y ordenaron a las cuatro personas que se encontraban dentro, además del chofer, que bajaran. Los hermanos Islas, Francisco Sánchez y Gustavo Barojas descendieron del lado derecho del taxi, "sacaron varias armas blancas y se abalanzaron" contra los policías; dos atacaron a García Martínez y tres a Romano Sánchez.
Por la superioridad numérica de los delincuentes, refiere el expediente, los dos policías resultaron con heridas en diferentes partes del cuerpo. En ese momento llegaron los policías bancarios Gregorio Domínguez y Fernando Cervantes, quienes se encontraban custodiando una banco próximo al lugar y lograron someter a dos de los asaltantes.
Procedieron entonces a solicitar ayuda por la frecuencia de radio de la misma patrulla, con lo que llegaron al lugar varias unidades y policías de la SSP, pero no refiere si entre ellos se encontraba el auxiliar, Ernesto Antonio López Osorio. La versión se contradice con la información que en su momento dio a conocer la SSP, al referir que había sido este quién sorprendió a los asaltantes en flagrancia y se enfrentó a ellos recibiendo "una profunda herida con un cuchillo", sin mencionar la lesión por disparo de arma de fuego.
Una vez que llegaron los refuerzos "bastante tiempo forcejearon para tratar de someterlos, los cuales los enfrentaron con cuchillos y navajas", señala la consignación.
Ante el MP todos dijeron no saber escribir ni leer y haber llegado recientemente del estado de Veracruz, dos dijeron que hace 20 días, uno que hace 15 y otro que hace ocho. Aseguraron ser albañiles y trabajar en una obra en construcción en San Mateo sin poder referir dirección alguna.
Gabriel Islas Castro, quien en el video trasmitido por televisión aparece vestido de azul, con sombrero y un cuchillo largo, declaró ante el MP que ese día salió de trabajar como a las 13:30 horas, se encontraba borracho "tomó unas cervezas y unos alcoholes desde las 9:00 de la mañana". En el microbús tres personas quisieron asaltarlos, le pidieron su cartera "pero se echaron a correr", pararon un taxi que iba pasando y le dijeron al conductor que los llevara a San Angel, pero fueron detenidos por unos policías.
Los bajaron y un policía le dio dos patadas "y como había un cuchillo cerca del taxi se le aventó al policía, pero ignora si los agredió". Dijo no recordar nada más y aseguró que no portaba ningún arma.
Roberto Islas Castro, el otro asaltante que también se observa en el video, dijo que tenía un cuchillo con mango de madera como de 20 centímetros "que lo usa en su trabajo" y al ir en el microbús tres sujetos empezaron a robar y para evitar que los asaltaran se bajaron y tomaron un taxi que apenas inició su marcha fue detenido por los policías, quienes "los encañonaron y les tiraron dos balazos", sacó un cuchillo y un policía al quitárselo se hirió él mismo en la mano, pero alcanzo a observar que uno de sus acompañantes desarmó a un policía.
Francisco Sánchez Reyes admitió que cada uno de ellos traía cuchillos. "En el micro dos chavos les empezaron a echar bronca" por lo que decidieron bajarse y se subieron a un taxi, al ser detenidos por los policías se dio cuenta de que uno de sus compañero forcejeó con ellos. Escuchó un disparo y a un policía se le cayó su pistola, "tomó él arma y se la guardó y luego sintió un chingadazo en la cabeza y luego caliente, caliente en el pecho", y ya no supo más.
Finalmente Gustavo Barojas Torres, admitió que tenía una navaja 007 que compró en Veracruz, al bajarse del taxi corrió a la esquina "por miedo a los policías", escuchó disparos, tres policías lo detuvieron, le encontraron su navaja y lo subieron a una patrulla".