LUNES 14 DE AGOSTO DE 2000

Ť Las nacionales, sin capacidad para competir


En constructoras trasnacionales, 42% de obras gubernamentales

Ť CMIC: esta industria creció 2.5 por ciento durante 1999

Mayela Delgadillo Bárcena Ť Las trasnacionales se adjudicaron 42 por ciento de los contratos de obra que licitó el gobierno, y pese a que la industria de la construcción en México creció 2.5 por ciento en términos reales durante 1999, es un hecho que las empresas nacionales no pueden competir con las extranjeras.

El sector vive una etapa difícil, ya que genera baja rentabilidad y se encuentra descapitalizado, a lo que se añade una fuerte competencia internacional contra cuya tecnología y costos no pueden competir las empresas mexicanas, explicó Pedro Strassburger, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

En las dos últimas décadas se aceleró en el exterior el desarrollo tecnológico en materia de ingeniería de diseño, métodos constructivos, aplicación de materiales, y también evolucionaron la maquinaria y equipo de construcción especializados, sin que en México se tuvieran avances, comentó el representante empresarial.

''A la industria mexicana le resulta difícil competir con los consorcios extranjeros, los cuales obtienen más de 42 por ciento de los contratos de obra del gobierno, pero a pesar de ello los constructores del país organizados en la CMIC confían en que podrán enfrentar este reto mediante la promoción y creación de alianzas estratégicas'', señaló.

El estudio La industria de la construcción y su entorno económico en la última década señala que mientras en la década de los 70 y 80 el sector fue ganando espacio en la participación del producto interno bruto (PIB) hasta alcanzar 6 por ciento, en el sexenio de Zedillo éste no alcanzará ni 4.5 por ciento en promedio.

Esto ha implicado que sectores prioritarios como petróleo, telecomunicaciones, carreteras, gas natural y aeropuertos, entre otros, sólo hayan recibido una cuarta parte de los 30 mil millones de dólares anuales que requieren para sostener un desarrollo equilibrado del país.

Para este año se espera que se mantenga la tendencia positiva para la industria en general, aunque Strassburger señaló problemas como el crédito inaccesible y la falta de programas gubernamentales.