SABADO 12 DE AGOSTO DE 2000
Marchan 40 mil personas en Pamplona contra la violencia
ETA se atribuye 12 atentados
Armando G. Tejeda, corresponsal, Madrid, 11 de agosto Ť La organización separatista vasca ETA se atribuyó hoy 12 atentados cometidos entre mayo y julio, pero no mencionó los más recientes, que dejaron un muerto. Al mismo tiempo, el Ejecutivo español, en manos del conservador José María Aznar, rechazó todas las propuestas presentadas por el resto de las formaciones políticas para abrir una mesa de diálogo en torno al conflicto en el País Vasco que incluya a los nacionalistas moderados de PNV y EA.
Mientras el gobierno exigía a esas dos formaciones la ruptura inmediata del Pacto de Lizarra y el acatamiento sin restricciones de la Constitución para reiniciar el diálogo, unas 40 mil personas marchaban en Pamplona para protestar contra la escalada de violencia de ETA.
El grupo separatista armado también reivindicó los atentados fallidos contra el líder socialista de Andalucía, José Asenjo, contra Juan Bautista Rubio Beloki y contra el concejal del PP en Abadiño, Agustín Ramos Vallejo.
Además, asumió su responsabilidad por los coches-bomba que estallaron en un cuartel policial en Burgos, en el cuartel de la Guardia Civil en Soria, en la Plaza de Callao de Madrid y en una zona residencial de Getxo, así como las bombas que destrozaron dos oficinas de Caja Vital en Vitoria.
En su comunidado, el grupo sostiene que atentó contra miembros de la elite empresarial vasca por no pagar el "impuesto revolucionario", y cita entre otros a Emilio Ybarra, presidente del Banco Bilbao Vizcaya.
Sin embargo, la declaración de ETA no menciona los más recientes atentados atribuidos a ETA, entre ellos dos con coche bomba y un tiroteo esta semana, con un balance de dos muertos y once heridos en diversas ciudades.
La situación en el País Vasco requiere de un "diálogo urgente", manifestaron personalmente a Aznar y a su ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, representantes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE, principal fuerza opositora), de Izquierda Unida (IU, tercera fuerza), de Convergencia i Unio (CiU, nacionalistas catalanes), de los sindicatos Comisiones Obreras y de la Unión General de Trabajadores, así como agrupaciones de empresarios.
Madrid ha rechazado restablecer este diálogo con el Partido Nacionalista Vasco (PNV, en el gobierno local) y con Eusko Alkartasuna (EA, socio del anterior), hasta que "rectifiquen" su posición y rompan el Pacto de Lizarra. Este acuerdo es un foro abierto formado por líderes nacionalistas cuyo primer logro fue la declaración de tregua unilateral de ETA durante 14 meses, rota el pasado 3 de diciembre.
Para el gobierno español "lo prioritario es poner el acento en la respuesta que el estado de derecho" y la vía policial pueden dar a la resolución de este histórico conflicto, que en lo que va del año ha cobrado 12 vidas y ha provocado un enfrentamiento social que se recrudece día con día.
Ante esta situación han proliferado propuestas de pacificación, entre ellas la del PSOE, que considera "prioritario" abrir una mesa de diálogo en torno al Congreso y abierta a la sociedad.
Aznar también rechazó esta sugerencia, al responder que "se seguirá reflexionando sobre estas cuestiones", pero que lo que debe primar en estos momentos es la "aplicación de la ley".
El líder de IU, Julio Anguita, consideró a su vez un "tremeno error político del gobierno" persistir en su posición, a la vez que señaló que "la lógica de ETA es cuanto peor, mejor, y su idea de patria vasca parece que sólo encuentra su referencia en el cementerio".
En este contexto, ETA asumió, en un comunicado publicado por el diario vasco Euskaldunon Egunkaria, la autoría de 12 atentados cometidos entre el 9 de mayo y el 29 de julio, entre ellos los asesinatos del concejal del Partido Popular (PP, en el gobierno) José Martín Carpena, y del ex gobernador civil de Guipúzcoa en la epoca del gobierno socialista, Juan María Jáuregui, a quien acusó de colaborar con el sistema de inteligencia español en América Latina.
El vocero del PNV en el Congreso, Innaki Anasagasti, reiteró por su parte la disposición de su partido (tendencia demócrata cristiana) a dialogar con todos los que estén involucrados en el conflicto vasco, incluido el brazo político de ETA, la coalición Euskal Herritarrok (EH), si bien criticó la postura de esta formación de independentistas radicales y de su líder Arnaldo Otegi.
Por otro lado, la marginación política a EH continuó hoy al quedar formalmente destituido el presidente municipal de EH de Berroizar, José Manuel Goldaracena, por negarse a condenar el atentado que costó la vida el pasado miércoles al subteniente de ejército Francisco Casanova. Esta decision fue tomada en el pleno del ayuntamiento, con la votación a favor de todos las formaciones políticas, con excepción de EH.
En Pamplona, el vocero de EH, Fernando Barrena, informó que la coalición presentará una querella criminal contra el delegado de gobierno, José Carlos Iribas, por "difamación" contra los militantes de ese partido, a los que acusó de dar información a ETA sobre los movimientos y costumbres del militar asesinado.
Mientras, la jornada de movilizaciones con la que los independentistas radicales homenajearon a los cuatro etarras muertos el lunes en Bilbao cuando su automóvil, cargado de explosivos, estalló, continuó este viernes. En la madrugada, cinco autobuses, ocho automóviles, cinco cajeros automáticos y una oficina de seguros fueron quemados en localidades vascas y navarras.