MIERCOLES 9 DE AGOSTO DE 2000
Ť Lo más probable es que Blanco no juegue contra Canadá, adelantó
Ojalá el público no se convierta en enemigo: Lapuente
Ť El encuentro será el inicio para escribir otra historia, señaló el técnico nacional
Miguel Angel Ramírez Ť "Ojalá que el público no se convierta en un enemigo", señaló el técnico Manuel Lapuente, asegurando que del exceso de confianza a la inseguridad sólo hay un paso. Recordó que siempre ha dicho que no hay rival pequeño, y que Canadá tiene la capacidad para ganarle a México.
La selección mexicana realizó ayer su primer entrenamiento con miras al partido contra los canadienses, lo que para Lapuente es el inicio para "escribir otra historia". El entrenador prefirió olvidarse de los anteriores encuentros y únicamente resaltó que así como se "asimilan los triunfos" se debe hacer lo mismo con los fracasos.
Sobre las nuevas incorporaciones, José María Higareda y Marco Antonio Ruiz, explicó: "Si algo tenemos que atacar es por los extremos; me di cuenta la falta que hacen".
Aceptó que a Canadá "debemos ganarle", pero no será fácil, como tampoco "lucir, y el primer jugador que quiera lucir no va a permanecer en el equipo".
Dijo que para los canadienses fue una grave sorpresa el mal inicio en la eliminatoria mundialista, luego de los "12 o 13 partidos sin perder" que hilvanaron. "Aquí para ellos es oro el triunfo. El empate es buenísimo o perder por el menor número de goles". Insistió en que "nosotros debemos ganar", pero también reconoció que Canadá "tiene la capacidad para" hacerlo.
Puntualizó que el rival podría jugar con la presión que tiene el tricolor por ganar. Puso como ejemplo lo que ocurrió en la pasada Eurocopa, donde todos daban por hecho la coronación de Holanda y los edificios de ese país mostraban hasta imágenes de jugadores como Davis. "Eso les causó una presión tal que llegó un momento en que esos jugadores no pudieron. No pudieron ni tirar penales. A qué grado llegarían de desesperación. Por eso les digo que es muy importante y ojalá el público no se convierta en un enemigo; sí vamos a ganar, vamos a intentarlo, y nos van a ver atacar en todo el partido".
Agregó: "Esos ejemplos se los voy a dar a los muchachos. Les voy a decir: tranquilos, hay que salir con el espíritu de que vamos a ganar, obviamente, pero ese espíritu se puede apagar. Del exceso de confianza a la inseguridad hay un paso".
Incluso, comentó que le sucedió a la misma selección mexicana en el pasado encuentro con Canadá, cuando los dominaron y en el "gol de oro" para definir al triunfador, "nos vamos como El Borras a un tiro de esquina", y les anotaron. "Por eso hay que prepararse para no entrar sobrados a la cancha, pero tampoco con presión. Buscar el equilibro".
--ƑUsted está presionado?
--No, estoy contento. Estoy nervioso, sí.
Agregó que siempre ha dicho "que no hay rival pequeño, como no hay rival grande al que no le podamos ganar". Aceptó que ha sido un constante crítico de la selección, pues considera que "México debe de jugar a ganar contra quien sea y no ver a algunos demasiado grandotes para ganarles".
Se le recordó entonces lo que algunas vez dijo: que hasta con el Zacatepec se podía clasificar a un Mundial.
--No, no dije eso. Si lo dije me equivoqué.
Por último, adelantó que lo más probable es que Cuauhtémoc Blanco no juegue el próximo martes (dijo que el error contra Trinidad y Tobago no lo vuelve a cometer), pero que el viaje del delantero se debe a un estricto apego a los reglamentos.
Puntualizó que no le tienen desconfianza a los médicos del Valladolid, pero en la selección se debe dar la última palabra. Para él no pasa nada con las "11 horas de vuelo", porque "no se va a venir en lancha".