MIERCOLES 9 DE AGOSTO DE 2000
* Aseguran que nadie les tira línea, y que con el arzobispo Rivera hay amistad
Las universidades católicas niegan que sean sólo formadoras de elites
* En auge desde 1955, postulan que buscan contribuir a una sociedad más justa y un país mejor
María Esther Ibarra /y III * Proclaman como "bandera" la inspiración cristiana. Niegan luchar por que se imponga la educación católica o estar en contra de la laicidad ų"šDios bendito que existe!"ų. Aseguran que no les tira línea la jerarquía de la Iglesia, encabezada por el arzobispo Norberto Rivera Carrera, con quien "tenemos una relación de amistad y de reconocimiento". Postulan que su objetivo es hacer labor pastoral entre las universidades y rechazan que formen únicamente elites.
Eso, por lo menos, sostiene la Asociación Mexicana de Instituciones de Educación Superior de Inspiración Cristiana (AMIESIC), que afilia a 38 casas de estudios operadas o ligadas a órdenes católicas y siete más en espera de ser aceptadas. El presidente del consejo de directores es el rector de la Universidad Lasalle, Lucio Tazzer de Schrijver, quien este mes será sustituido al cumplir su periodo de dos años.
"Nuestro propósito es reunir a los centros educativos inspirados en el Evangelio y, esencialmente, realizar trabajo pastoral al interior de ellos. Somos casi una fraternidad, pues convivimos con plena libertad y por eso ni marcamos ni imponemos políticas", asegura el secretario ejecutivo de la agrupación, Francisco Ontiveros.
Tampoco ųaseveraų el clero secular impone directrices a AMIESIC. "Con el arzobispo Norberto Rivera hay una relación de amistad y de reconocimiento de autoridad, pero no interviene", aunque formen parte de los miembros honorarios de la agrupación las comisiones de Cultura y Educación del Episcopado.
Algunas de las instituciones integrantes de AMIESIC pertenecen a la Federación Internacional de Universidades Católicas (FIUC), que aglutina a casi 200 universidades confesionales de los cinco continentes y cuyas actividades iniciaron en 1924, con la finalidad de contribuir al "progresivo bienestar del saber y a la construcción de un mundo más justo y humano a la luz de la fe cristiana (a través) del espíritu del Evangelio", asegura la Panamericana, una de sus afiliadas.
En busca de "resignificar la universidad católica y de inspiración cristiana para responder a las exigencias de los nuevos tiempos", en 1998 se efectuó en República Dominicana la reunión de rectores de Universidades Católicas de Inspiración Cristiana México, Centro América y el Caribe, donde acordaron seguir "dando pasos" junto con el CELAM a fin de constituirse en asociación.
El investigador Dante Torres ubica el retorno de la Iglesia al ámbito educativo y el surgimiento de las universidades católicas privadas, como una "ola" en 1900 en todos los países, aunque en México su "presencia relevante" la establece a partir de 1955, año en que diversas órdenes religiosas crean instituciones privadas de elite, debido "al fracaso del sector público para cubrir las expectativas de las clases religiosas y a que las elites demandaban mantener su diferenciación social a través de la obtención de grados académicos", acota el académico que prepara su tesis de doctorado Caracterización de las instituciones de educación superior privadas en México.
En mayor o menor medida, en sus idearios postulan buscar a través de la educación contribuir a una sociedad más justa y un México mejor. Las siguientes no son las únicas, pero sí de las más representativas.
El bien común de los jesuitas
Con más de medio siglo en el campo de la educación, la Compañía de Jesús ha integrado en México el Sistema Educativo Universidad Iberoamericana-ITESO, (SEUIA-ITESO), cuyos seis planteles ųuno en el Distrito Federal, en Santa Fe, y cinco en las ciudades de Puebla, Torreón, León, Tijuana y el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, en Guadalajaraų "pretenden alcanzar la excelencia humana de sus estudiantes y, desde la promoción seria de la investigación, buscan ofrecer a los diversos organismos sociales y estatales, propuestas concretas encaminadas a mejorar las condiciones de vida de las personas". Además de su campus Santa Fe, en el Distrito Federal, que alberga a cerca de 11 mil estudiantes, tiene planteles en las ciudades de Puebla, Torreón, León, Tijuana, y el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), en Guadalajara.
En suma, "quisiéramos que el saber no fuera instrumento de poder, sino servicio al reino de Dios (...) y formar no solamente hombres para los demás, sino también hombres con los demás. Queremos colaborar con tantos hombres y mujeres de buena voluntad que también buscan un mundo mejor".
Los Legionarios de Cristo
Como una pieza fundamental del proyecto educativo de los Legionarios de Cristo y del fundador de la congregación, el padre Marcial Maciel ųquien fue acusado de pedofiliaų, surge en 1964 la Universidad Anáhuac. Ese hecho no impide que proclame como misión "formar personas íntegras para México, con excelente preparación profesional y humana, genuina conciencia social, capacidad de liderazgo positivo y con un firme compromiso con el país".
En sus dos sedes en el Distrito Federal (Tecamachalco y Sur) y en sus filiales en Yucatán (Universidad del Mayab) y Veracruz, cerca de 20 mil egresados "exitosos son muestra palpable de la formación profesional y humana", basada en su "espíritu empresarial que va más allá del salón de clases", asegura.
El Evangelio, según La Salle
La Universidad La Salle (ULSA) ų38 años de vidaų se reconoce a sí misma y se presenta como una institución inspirada en el Evangelio, y en el espíritu y carisma de San Juan Bautista de La Salle. Convencida de que a través de sus egresados es como podrá contribuir eficazmente a la transformación de la sociedad, en su ideario asegura que dentro y fuera de sus muros "impulsa el genuino espíritu comunitario, (como) solución al doble escollo del individualismo egoísta y estéril y del colectivismo despersonalizado".
Su misión: "Contribuir al estudio y solución de los más apremiantes problemas de nuestro país, con desinterés, objetividad y libertad". Eso lo busca a través de programas y carreras de Administración, Calidad, Planeación y Sistemas Empresariales, Ingeniería Económica y Financiera, Educación, Negociosos Internacionales y Sistemas Computacionales, áreas de las más redituables en el mercado laboral. Aparte de sus tres planteles en el Distrito Federal, tiene sedes en Cuernavaca, Pachuca, Morelia, Ciudad Obregón, Cancún, Guadalajara, Puebla (Unidad Benavente), la Universidad del Bajío, en Guanajuato; Monterrey; y el Instituto Superior de Ciencias y Tecnología de la Laguna, en Torreón.
La misión educativa guadalupana
De las menos exclusivas, la Universidad Intercontinental (UIC) da fe de apostolado, al señalar que su nombre se debe al apoyo de los Misioneros de Guadalupe, "organización que desde los sesenta ha promovido las escuelas como instrumento de la evangelización". Se constituyó en 1976, aunque su antecedente de creación fue el Instituto Internacional de Filosofía (1955), fundado por ese grupo religioso. Destaca por su activismo en unir al rebaño educativo católico. En 1991, con otras 23 instituciones funda la AMIESIC. Antes, en 1982, participa en la fundación de la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior (FIMPES) y es miembro de la FIUC.
El Opus Dei
Bajo la Prelatura de la Santa Cruz y Opus Dei, un grupo de académicos y hombres de empresa crean en 1967 el Instituto de Alta Dirección de Empresas (IPADE), y en ese mismo año funda la Universidad Panamericana, cuyas escuelas y centros tienen los aspectos doctrinales y espirituales de esa organización católica internacional fundada por José María Escrivá de Balaguer, quien "en 1928 vio que Dios le pedía poner todas sus energías para lograr que hombres (no aceptaba en un principio mujeres) de diversas clases sociales respondieran a una vocación de santidad y de apostolado", cita el Diccionario enciclopédico de México, de Humberto Musacchio.
Por las aulas del IPADE han pasado más de 15 mil directores de empresas, egresados de sus programas para directores generales y divisionales y los de máster en Dirección de Empresas impartidos en el Distrito Federal, las ciudades de Monterrey, Guadalajara, Aguascalientes, Tijuana, Chihuahua, Ciudad Juárez, Hermosillo y San Luis Potosí. Su sede es la Universidad Panamericana del Distrito Federal, y tiene filiales en Monterrey, Guadalajara, Torreón y Aguascalientes. Además, ha puesto en marcha escuelas de negocios homólogas en Latinoamérica (Guatemala, Ecuador, Colombia, Argentina y Perú) y en Sevilla, España.