SABADO 5 DE AGOSTO DE 2000
Ť Estrenos del milenio, temporada del Ballet Nacional de México
Mosaico de expresiones, épocas, ritmos y talentos en el Palacio de Bellas Artes
Ť El coreógrafo Jaime Blanc presenta una reflexión sarcástica acerca del abuso de las drogas
Ť La obra del fallecido poeta Jaime Sabines es la invitada principal de Sensaciones lúdicas
Miryam Audiffred Ť Con una historia que rebasa el medio siglo, el Ballet Nacional de México (BNM) -fundado por la bailarina Guillermina Bravo en 1948- llega nuevamente al foro principal del Palacio de Bellas Artes para ofrecer un mosaico de expresiones, épocas, ritmos y talentos mediante la temporada Estrenos del Milenio.
Podría decirse que se trata de un espectáculo afortunado por incluir cuatro trabajos coreográficos nunca antes presentados en la capital y producidos por jóvenes creadores que, si bien brindan visiones muy diversas sobre el mundo de la danza, despiertan por momentos el recuerdo de algunas escenas de famosas películas musicales como Vaselina o Amor sin barreras. Es el caso de Moneda al aire, pieza coreográfica de Lidya Romero, que aborda el universo del juego de futbol con todo y sus riñas, pasiones y fanatismos.
Los amorosos también bailan
Con los sonidos de Dance Works, de Steve Martland, como fondo musical, esta cierra la función tras haber convertido el escenario en una minicancha deportiva en la que, como en cualquier campo de futbol soccer, los anuncios publicitarios de los patrocinadores aparecen en las barreras laterales.
Así, los espectadores abandonan el palacio de mármol con los logotipos de Telmex y Nestlé en la memoria. Atento a los problemas contemporáneos, Jaime Blanc presenta en esta ocasión una reflexión sarcástica sobre el abuso de las drogas. La realidad está en otra parte se propone para traer a la conciencia, sin tonos moralistas, a aquellos jóvenes que día con día se podrían codear con la muerte mediante excesos y situaciones límite.
La obra del poeta chiapaneco Jaime Sabines, fallecido el año pasado, es la invitada principal de las Sensaciones lúdicas creadas por Federico Castro, coreógrafo que con música de Conlon Nancarrow y Nino Rota retoma las relaciones de pareja. Porque los amorososo también bailan.
Repertorio amplio
Los fragmentos de Carmina Burana retomados, enlazados y vueltos danza por el coreógrafo Luis Arreguín son, sin duda, el plato fuerte de la noche. Si bien se
trata de la pieza más larga del espectáculo, también es la obra que permite a los espectadores disfrutar con libertad de la destreza y los cuerpos de unos bailarines súper entrenados.
Como lo ha documentado la crítica Patricia Cardona, el Ballet Nacional de México demuestra en su repertorio una gama inumerable de arquetipos universales y
héroes nacionales, leyendas populares y mitos de ayer y hoy.
(La última función de Estrenos del milenio se efectuará mañana, a las 17:00 horas, en el teatro del Palacio de Bellas Artes.)