VIERNES 4 DE AGOSTO DE 2000

Ť La "primera gran inversión extranjera" se realizará en su natal Guanajuato


Un estreno como presidente electo con "buenas noticias"

Enrique Méndez y Juan Manuel Venegas Ť En su primer día como presidente electo de México, Vicente Fox recibió la noticia de la primera "gran inversión" extranjera en nuestro país, que, para su beneplácito, será en Guanajuato. A fines de este año, ya con la investidura presidencial, colocará el primer riel de lo que será el tren interurbano de esa entidad, en el que se invertirán mil 200 millones de dólares.

El gobernador guanajuatense Ramón Martín Huerta fue el encargado de informar a su antecesor del acuerdo de inversión durante una reunión privada que sostuvieron en un hotel de Polanco, a la que asistieron representantes de las empresas de Canadá y Alemania participantes en el proyecto. Fox Quesada se comprometió con ellos a que, desde la Presidencia de la República, les dará todo el apoyo para concretar la obra que comunicará a los municipios San Francisco del Rincón, León, Irapuato, Salamanca y Celaya, con ramales en Silao y Guanajuato.

En el encuentro de Fox con Martín Huerta y los empresarios extranjeros -celebrado por la mañana-- estuvo ausente la mayoría de los reporteros que cubren las actividades del mandatario electo debido a que su equipo de prensa se encargó de negar que estuviera en su agenda. Más tarde intentaron justificarse al decir que sólo estaba previsto el acceso a fotógrafos y camarógrafos y ofrecieron una grabación con comentarios de Fox Quesada sobre el momento económico del país y un boletín del gobierno de Guanajuato.

Según la grabación, Fox comentó que ya pueden apreciarse las grandes oportunidades de inversión para el país, y reconoció que la actual administración, con base en la disciplina y buen manejo de variables nacionales y externas, logró en los primeros dos trimestres del 2000 un crecimiento superior a 7 por ciento del producto interno bruto (PIB). "Esta es la meta a alcanzar por mi gobierno".

Buscamos, agregó, que sea un crecimiento que se traduzca en empleos y condicionado a la distribución justa del ingreso; que dé estabilidad regional y política al país, así como al propio desarrollo económico.

Fox asentó que este crecimiento dependerá también de la sustentabilidad y protección de los recursos naturales. "Son tareas que ya están en marcha en la economía en estos momentos, por lo que comparto el optimismo expresado por los inversionistas para llevar a cabo este proyecto", expuso.

Martín Huerta, por su parte, informó que el compromiso de los inversionistas canadienses y alemanes es iniciar la construcción del tren el 2 de diciembre, un día después de que Fox sea investido presidente.

El proyecto del tren interurbano data de 1992, cuando el entonces gobernador interino, el panista Carlos Medina Plascencia, fue embaucado por unos inversionistas árabes que le vendieron, literalmente, el proyecto ejecutivo del tren... luego se marcharon y nadie supo más de ellos.

Finalmente, el presidente del grupo GMAT Itée de Canadá, Normand Nadeau, dijo a nombre de los inversionistas que esperarán a que Fox Quesada asuma la Presidencia para que coloque el primer riel de la construcción como su primera actividad como jefe del Estado mexicano.

Luego de recibir la "magnífica noticia", el presidente electo se concentró en Paseo de la Reforma 607 para desahogar su agenda privada. Recibió a los integrantes de sus equipos de transición, entre ellos Eduardo Sojo, del área económica; Francisco Molina y José Luis Reyes, de justicia, y Jorge Castañeda, del área de relaciones internacionales, y con quien terminó de afinar detalles de su próxima gira a Sudamérica.

Poco antes del mediodía, 22 representantes de ahorradores de Jalisco defraudados por la Sociedad de Ahorro y Préstamo Crédito del Noroeste solicitaron una audiencia con Fox o alguno de sus colaboradores del área económica. Pidieron que el presidente electo interceda ante la Secretaría de Hacienda para que la compra de cartera, valuada de 700 a 900 mil pesos por ahorrador, no sea a menos de 150 mil pesos, como pretende el fideicomiso de liquidación.

No fueron recibidos, pero les informaron que a partir del 2 de diciembre, en Los Pinos, operará una nueva unidad de atención a la ciudadanía que responderá a las peticiones que se le hagan al presidente Fox.

Más tarde arribó a la casona de Las Lomas el gobernador de Querétaro, Ignacio Loyola Vera, quien llegó a bordo de su camioneta Suburban.

Los reporteros gráficos fueron entonces invitados a entrar a la residencia a fotografiar a Fox con su correligionario queretano, y autorizados a registrar la imagen del futuro presidente con sus dos hijos, Rodrigo y Vicente, con quienes comió por la tarde.