MIERCOLES 2 DE AGOSTO DE 2000

Ť Hoy, en sesión solemne, la lectura del dictamen


Ante magistrados, el primer mensaje del presidente electo

Ť Concluirá así la calificación por la vía jurisdiccional

Jesús Aranda Ť Al declarar hoy el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) presidente electo a Vicente Fox, se culminará el proceso en el que por primera vez en la historia los comicios a la primera magistratura se calificaron por la vía jurisdiccional, y no por la vía política.

En sesión pública solemne, el secretario de Acuerdos del tribunal leerá el dictamen en el que se hará una reseña del proceso electoral en su primera etapa, en la que se incluirá una postura oficial de los magistrados sobre los comicios y la etapa de registro de las coaliciones y de los candidatos presidenciales; el cómputo oficial de la votación obtenida en los 300 distritos electorales y, finalmente, las declaratorias de validez de la elección y de que Fox es mandatario electo. Una vez votado por unanimidad el dictamen, el panista recibirá una copia certificada del mismo, así como una constancia en la que se acredite su triunfo en los comicios.

Posteriormente, Fox subirá a un pódium en donde hará su primera declaración como presidente electo; lo hará ante los magistrados a quienes hace apenas unos meses acusó de hacer "marranadas", cuando le negaron el registro del emblema de la Alianza por el Cambio en el que aparecía su foto en primer plano.

Al concluir la sesión, el pleno de magistrados enviará una notificación oficial a la Cámara de Diputados, para que emita el bando en el que se informe que Vicente Fox es presidente electo de México.

Sin embargo, este acto trascendental y primero en su tipo, no ha estado exento de problemas, improvisaciones y jaloneos, entre el equipo del aún "virtual presidente electo" y el personal del tribunal, no sólo en lo que se refiere al número de invitados especiales y personajes que tendrán el privilegio de presenciar la sesión pública en el salón de plenos, sino también en lo que se refiere a aspectos de logística, en donde los "invitados", que son los foxistas, pretendieron hasta el último momento imponer sus condiciones.

Incluso, trascendió en fuentes oficiales, el equipo de Fox se negó hasta la tarde de ayer a informarle al personal de seguridad del tribunal sobre la forma en que el presidente electo arribará a la sede del máximo órgano de justicia en materia electoral. "No sabemos siquiera si llegará en vehículo o por la vía aérea, porque nos preguntaron si teníamos helipuerto".

De acuerdo con fuentes consultadas, bajo el argumento de que se declarará presidente electo a Fox, su equipo intentó obtener un mayor número de invitaciones para la sesión solemne e, incluso, reivindicó el derecho de llevar a "su fuente" de prensa. Esta actitud motivó roces con el área de comunicación del tribunal, que finalmente entregó un número determinado de invitaciones -se habla de 15-, para los familiares y colaboradores más cercanos de Fox; esto, además de las de tipo protocolario que se giraron a los coordinadores de las bancadas panistas en el Congreso.

Además, el tribunal invitó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a los consejeros de la Judicatura Federal y a los consejeros del IFE, entre otros.

En ese ambiente, la reunión programada para la tarde de ayer, en la que se ajustarían los últimos detalles -como una posible conferencia de Fox-, está en suspenso, y será este miércoles "a primera hora" cuando los equipos se reúnan en la sede del Tribunal Electoral.

Preparado inicialmente para lo que se esperaba sería una reñida calificación de la elección presidencial, y también con la amenaza del propio Fox de que si no perdía por más de 10 puntos porcentuales no reconocería su derrota, el TEPJF hizo un esfuerzo adicional que permitiera la presencia, en esa etapa, de decenas de representantes de los medios de comunicación. Instaló una gran sala de prensa y ordenó un registro máximo de reporteros y fotógrafos que acudieron a las sesiones.

Sin embargo, el triunfo holgado de Fox y la presentación de dos únicas impugnaciones -que derivó en la anulación de una sola casilla-, le quitó la presión y las expectativas al trabajo de los magistrados electorales y, finalmente, se tuvo que desmantelar el andamiaje preparado para recibir a los medios de comunicación.

Conforme se acercó la fecha de la sesión de declaratoria de validez de la elección, y después de la entrevista privada que sostuvieron Fox y el presidente del tribunal, magistrado José Luis de la Peza, empezó el estira y afloja por el formato, acceso y control a la sesión.

Por lo que respecta a la seguridad, el Estado Mayor Presidencial "tomó por asalto" el inmueble ubicado en Carlota Armero desde el pasado martes, en lo que será la primera participación de sus elementos en un acto oficial al que acuda Vicente Fox, quien dejará de ser presidente electo el primero de diciembre, cuando sea declarado mandatario constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.