MIERCOLES 2 DE AGOSTO DE 2000
Ť Hernández Juárez planteó gran acuerdo social
Rodríguez Alcaine pidió a Fox no descongelar reformas a la LFT
Ť La UNT le propuso abrir espacios de interlocución
Roberto Garduño y Elizabeth Velasco Ť Representantes de los dos grandes bloques obreros, el oficial que acompañó al actual régimen político imperante en México durante más de 60 años, y el que se denomina independiente, acudieron a la casa-oficina de Vicente Fox para expresar sus demandas y coincidencias con el virtual presidente electo.
Leonardo Rodríguez Alcaine ingresó por separado al lugar, desdiciéndose de aquella declaración que amenazaba con un paro nacional, y hasta aseguró estar dispuesto para que el guanajuatense ''ojalá llegue a ser mi cuate''. Pero la sustancia de aquel encuentro trascendió más tarde porque, según Netzahualcóyotl de la Vega, el añejo cetemista sugirió a Fox que ''no descongele'' la iniciativa de reformas a la Ley Federal del Trabajo que el Partido Acción Nacional (PAN) presentó desde 1995, tendiente a eliminar el corporativismo sindical.
Por su parte, la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), con Francisco Hernández Juárez al frente, llegó con un pliego de peticiones bajo el brazo; entre ellas se encuentra formar un gran acuerdo para la reforma social y democrática del Estado.
La iniciativa panista, que fue elaborada por Néstor de Buen, buscaría eliminar de raíz el corporativismo sindical. Para ello plantea reformar el artículo 123 constitucional a fin de modificar el derecho de huelga para que ésta pueda ser ''parcial'' o ''total'' y no afecte ''los derechos en juego'' tanto de empresarios como de trabajadores; sustituir las juntas de conciliación y arbitraje por jueces en lo social y del trabajo; establecer el pago por hora; desaparecer la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, así como flexibilizar las relaciones laborales, a fin de que haya ''mayor movilidad del trabajador en los días y horarios de trabajo''.
Las actividades de Vicente Fox Quesada iniciaron, de nuevo, muy temprano. Se reunió con Porfirio Muñoz Ledo, y después con Santiago Creel y Rodolfo Elizondo, sus operadores políticos. Después, en punto de las 11 comenzó el desfile de sindicalistas, entre ellos, primero, Leonardo Rodríguez Alcaine.
Elegante, el líder obrero descendió de un automóvil Infiniti último modelo, y de inmediato comenzó con sus acostumbradas e hilarantes declaraciones:
--ƑViene a limar asperezas? --se le interrogó.
--Nunca he tenido ninguna grosería con él, y no tengo por qué limar asperezas. Vengo institucionalmente a platicar con él.
--ƑEs su cuate Fox?
--No, no es mi cuate, pero ojalá llegue a ser mi cuate.
--Pero usted anunció un paro nacional si ganaba la oposición.
--No anuncié eso, šes una mentira!... ustedes son muy mentirosos.
Enojado, se zafó del cordón de reporteros para ingresar a la casa-oficina. Tras casi una hora, otra vez La Güera salió pero a bordo del vehículo que lo condujo al lugar. Los periodistas se colocaron al frente, y el viejo dirigente de la CTM descendió para seguir declarando.
--ƑCómo le fue?, Ƒse hizo amigo de Fox, sí o no?
--El hacerme amigo de alguien, šya lo era! El problema es que las coincidencias que tiene el movimiento obrero con el señor licenciado Fox sean una realidad y podamos servir a México, él y nosotros.
--ƑCuál es el compromiso de Vicente Fox con el movimiento obrero?
--No hay compromiso todavía, simplemente la CTM entregó por mi conducto un escrito en el que hay 14 puntos.
--ƑHay química con Fox?
--Yo creo que Vicente Fox y cualquier gente hace química conmigo, hasta ustedes.
--Pero usted dijo que Fox no era un presidente emanado de la Revolución...
--Independientemente del ámbito ideológico, nosotros como institución e institucionales esperamos que el trabajo del señor presidente será positivo para los trabajadores.
--ƑUsted cree que la CTM seguirá siendo el principal interlocutor obrero del gobierno?
--Interlocutor o no interlocutor, no hay problema (sic). Lo que tiene importancia es que la CTM es la mayoritaria. šYa está suave, no! šYa está suave!
Más tarde, se supo que Rodríguez Alcaine insistió con el virtual presidente electo en que no termine con las prerrogativas del sindicalismo tradicional del que se han beneficiado las organizaciones agrupadas en el Congreso del Trabajo y la CTM.
Peticiones de la UNT
También la UNT, representada por Francisco Hernández Juárez, Alejandra Barrales, Agustín Rodríguez, Benito Baena, Francisco Rocha y Tomás del Toro, tenía cita con Fox. Sin los aspavientos de Rodríguez Alcaine, pero con el protagonismo que le es inherente, el dirigente con 25 años al frente del sindicato de telefonistas, Hernández Juárez, anunció que entre su peticiones al virtual presidente electo se encuentran: abrir espacio de interlocución, libertad sindical y la desaparición de los contratos de corrupción. Al interior de la oficina los dirigentes leyeron un documento:
''Le proponemos ampliar el proceso de toma de acuerdos, no sólo a los partidos políticos, sino al conjunto de las fuerzas sociales organizadas, para trabajar en común en la reconstrucción de los consensos nacionales hasta llegar a un gran acuerdo para la reforma social y democrática del Estado.
''El llamado Pacto de Chapultepec lo concebimos fundamentalmente como la búsqueda de acuerdos entre las fuerzas políticas, por supuesto, pero sobre todo como una construcción de consensos entre los sectores productivos y sociales encaminados a un desarrollo definido en común para la concordia, la prosperidad y el bienestar''.
El texto insiste en encontrar consensos porque Vicente Fox tendrá limitado su margen de acción constitucional:
''Al nuevo presidente no se le otorgaron poderes ilimitados; por el contrario, se montó un contrapeso legislativo que acotará el ejercicio de sus funciones y lo obligará a consensar las decisiones principales. El mandato popular fue muy claro: el cambio por la vía del diálogo, la negociación y la consulta.
''El motivo principal de nuestra visita es proponer que hagamos de la transición democrática no sólo un proceso político, sino también económico y social, sobre la base de la participación organizada de los trabajadores de la ciudad y el campo y los demás sectores de la sociedad, con el fin de impulsar un cambio de rumbo del desarrollo nacional capaz de alcanzar la democracia como la concebimos los mexicanos, es decir, no sólo como un régimen jurídico y político, sino como un sistema de vida fundado en el estado de derecho, en la ética, en la sustentabilidad y en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo''.
Al término del encuentro los dirigentes de la UNT salieron contentos. Hernández Juárez asumió que fue ''muy satisfactorio''.
--La CTM dice que ellos son los únicos interlocutores...
--Ellos pueden decir misa, pero no pueden evitar que la UNT esté presente --respondió el telefonista.