LUNES 31 DE JULIO DE 2000

* El comercio ambulante, obstáculo para la acción de la justicia, subrayó

Necesario un uruchurtazo para combatir a criminales en Tepito: De la Torre Ruelas

* El funcionario de la SSP admitió que existe complicidad entre autoridades y delincuentes de la zona

Susana González G. * El "maridaje" establecido entre la delincuencia y los policías que operan en Tepito se ha fortalecido de tal manera en los últimos años que para combatirlo es necesario un "uruchurtazo", dijo Miguel Angel de la Torre Ruelas, director ejecutivo de Agrupamientos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en alusión al llamado "regente de hierro", Ernesto Peralta Uruchurtu, jefe del Departamento del Distrito Federal en tres sexenios (1952-1966) y quien, entre otras acciones, acabó con la vida nocturna de la capital y mandó construir mercados para reubicar en ellos los puestos callejeros de La Lagunilla y La Merced.

Y es que, según De la Torre, la obstrucción de calles en ese populoso barrio representa uno de los principales obstáculos para el ingreso y actuación de la policía, lo que genera impunidad; sin embargo, aseguró que ya es "clamor general de los ciudadanos de ahí que se limpie la zona de ambulantes para que los uniformados puedan ingresar y moverse libremente".

"ƑDe qué manera ųse preguntó- podemos realizar operativos si ya no hay calles en Tepito, porque los puestos se apoderaron de todo y no hay forma de que circulen las patrullas? Mi opinión personal es que hay que limpiar esas calles y eso sólo puede ocurrir el día en que la autoridad se atreva a hacer valer sus atribuciones".

Por esta particular situación, reconoció en entrevista, Tepito es hasta el momento la única zona del Distrito Federal donde la policía no ha podido entrar completamente para combatir la delincuencia ų"sólo le hemos dado unos llegues"ų como sí lo ha hecho a lo largo de la presente administración en otras colonias que gozaban de la misma fama y en donde poco a poco se han arrebatado las calles al crimen, como han sido los casos de la Anáhuac, la Doctores e incluso la Buenas Aires, misma que por la ejecución de seis jóvenes a manos de policías durante la regencia pasada "se convirtió en un coto de poder, donde no podía entrar ninguna patrulla", y por lo tanto fue más difícil restablecer el contacto con la gente.

Para el jefe de los grupos Alamo y Escudos ųresponsables de los operativos especiales contra la delincuencia, como los llevados a cabo el martes pasado en la Morelos y el viernes en Peralvillo y Merced Balbuenaų otro factor que impide el combate contra las bandas de Tepito es el control que éstas ejercen sobre policías ahí asignados, gracias a la corrupción, y que se ha incrementado de tal manera que, dijo, los delincuentes pueden tratar a muchos de esos uniformados como "esclavos".

A esto hay que agregar la permanencia de familias que cumplen al menos dos generaciones de dedicarse al crimen ųcomo ejemplo cita el caso de Javier Padilla Ruiz, de 51 años y su hijo David de 27 años, ambos aprehendidos la noche del viernesų, así como la existencia de toda una red de complicidades, voluntarias o no, de vecinos y comerciantes que impiden la labor de la Policía Preventiva.

"Cuando llevamos a cabo un operativo en Tepito ųen este año sólo han realizado cuatro de un total de 139 efectuados en toda la ciudadų nos echan en principio una avanzada de niños que ya tienen instrucciones precisas de lanzarse sobre nuestros elementos para tratar de quitarles las armas, luego vienen las mujeres y mientras nosotros nos cuidamos de que no se nos vaya un tiro, los hombres, los delincuentes, escapan o vienen detrás pero ya armados".

De cualquier manera, De la Torre indica que los agrupamientos especializados de la SSP, que algunos califican como de "élite", han logrado cierta penetración en la zona y así, del nulo apoyo que encontraron al principio, la colaboración de los vecinos se ha incrementado paulatinamente y se refleja en las denuncias ciudadanas que recibe la dependencia, algunas de ellas tan precisas que revelan la identidad, modo de operar y hasta horarios de los hampones del barrio y que les ha permitido a las autoridades elaborar "mapas delictivos, casi croquis detallados" de ese barrio, del que abundan variadas historias sobre sus callejones, vecindades con entrada doble, bodegas e incluso túneles secretos.

En la SSP, remarcó Miguel Angel de la Torre, estamos convencidos de que "no todo Tepito está maleado y hay gente decente que vive muy presionada y no se atreve a denunciar los ilícitos que ahí se cometen".