MARTES 25 DE JULIO DE 2000
* Reunión de obispos con el candidato triunfador
La Iglesia católica no exige privilegios, aseguran jerarcas
* Habrían aceptado sumarse al llamado de concordia hecho por Fox
Rosa Elvira Vargas * Los obispos de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) habrían aceptado ayer sumarse al llamado a la "concordia y a la reconciliación" nacional formulado por Vicente Fox Quesada.
Así, en el primer encuentro que sostienen con el candidato triunfador, después del 2 de julio, los representantes de la jerarquía católica aseguraron "que no exigen privilegios de ninguna especie a su Iglesia, sino únicamente respeto a las personas, a la sociedad y al pluralismo", así como las medidas necesarias "para salir adelante en materia de pobreza y marginación''.
Los integrantes de la Comisión de Presidencia de la CEM se pronunciaron también ante Fox por mantener la separación Iglesia-Estado y manifestaron su respeto por la laicidad del gobierno mexicano.
Siempre según la versión de Alberto Ortega, quien habló en su condición de coordinador de seguimiento a la relación con las iglesias del equipo foxista, en la reunión de este lunes no abordaron nada respecto al conflicto de Chiapas; tampoco tocaron lo relativo al esclarecimiento del asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo y no hubo alusión al "decálogo'' contenido en la misiva que les envió el candidato presidencial ganador, durante su campaña política a finales de abril.
Encabezados por Luis Morales Reyes, arzobispo de San Luis Potosí y presidente de la CEM, llegaron también a la cita con Fox, José Guadalupe Martín Rábago, obispo de León y vicepresidente del organismo; Abelardo Alvarado, secretario general; los vocales Alberto Suárez, arzobispo de Morelia, y Mario de Gasperín, obispo de Querétaro.
El grupo arribó a la casa 607 de la avenida Reforma, pasadas las 13 horas. El propio Morales Reyes fue el encargado de informar que su visita se debía a la invitación que les había cursado el propio virtual presidente electo, y mencionó que aunque desconocía cuáles serían los temas a tratar momentos después, "él (Fox) conoce muy bien nuestra propuesta contenida en la Carta Pastoral de marzo''.
Desde su llegada, el interés por conocer si la Iglesia católica espera o pedirá algún privilegio al nuevo gobierno fue planteado al arzobispo Morales. Sin dudarlo respondió que ni antes, ahora, ni después, la jerarquía católica se ubicará en esa posición, pues aquella "quiere solamente que se le respeten sus derechos y libertades, mas no concesiones ni tratos privilegiados''.
Aun más, señaló que la condición de Vicente Fox como católico confeso no quiere decir que "deba haber hacia él una actitud privilegiada. No conviene a nadie; no lo queremos ni es conveniente para México". Confió entonces en que el futuro Ejecutivo se muestre muy respetuoso y equitativo con todas las iglesias y viceversa.
El prelado aseguró que, por su parte, la religión católica seguirá teniendo contacto con todos actores del país, pues "una interrelación amplia con la sociedad civil, con los partidos, con el gobierno''.
Ya en la reunión con Fox y de acuerdo con lo declarado por Ortega, los obispos entregaron al guanajuatense un ejemplar de la Carta Pastoral y en el diálogo de casi dos horas, dijo, se refirieron a los grandes retos que tiene el país y que deberán abordarse con una gran convocatoria nacional.
Indicó entonces que otro tema "importante y reiterativo'' por parte de Vicente Fox fue el llamado a la concordia y a la conciliación. Que todo el mundo tenga la posibilidad de encontrarse, reconciliarse, para que el país, con una gran unidad'', pueda enfrentar sus desafíos en convergencia e inclusión.
Se trata de algo que, puntualizó el personero foxista, enfatizó desde su campaña el abanderado de Alianza por el Cambio y que ahora expresa de manera "muy clara y concreta".
Alberto Ortega comentó que en respuesta, los jerarcas católicos coincidieron también en su "apuesta" por esa conciliación y porque todo se maneje en términos plurales, con mucho respeto. "Se habló que el hombre es el que está al centro de todo, los mexicanos, y también por supuesto, del reto que significa el tema de la pobreza".
En síntesis, de acuerdo con el informante, Fox y los obispos manifestaron en su encuentro que tienen "preocupaciones que coinciden", y que para ilustrar la visión que posee la Iglesia católica sobre la historia de México, las cuestiones sociales, la pobreza y la marginación, entregaron la Carta Pastoral.
Antes se había inquirido a Morales Reyes si ese documento de la Iglesia había tenido eco en la actitud ciudadana durante la jornada electoral. Esa valoración, respondió, debe hacerla la propia sociedad civil, pues "nosotros estuvimos centrando nuestro mensaje en la democracia participativa, en la dignidad de la persona humana en sus derechos; en el llamado a votar creo que muchos nos escucharon".
El prelado desconocía hasta ese momento si ya en su diálogo con el guanajuatense hablarían sobre el conflicto en Chiapas, y comentó que dada la importancia del punto, si el panista lo tocaba, "le daremos nuestras experiencias dentro de la Comisión para la Paz y la Reconciliación", en aquella entidad, pero un poco a sabiendas de que no se abordaría, dijo que la CEM estará observante de cómo el candidato ganador visualizará este problema cuando tome posesión, pues en la Iglesia católica, como desde 1994, "seguimos en la coadyuvancia, que no en la intermediación" en ese conflicto.
De igual modo, Morales Reyes comentó que desde el 3 de julio, la jerarquía católica envió una comunicación a Vicente Fox felicitándolo por su triunfo y donde además, "le pedimos que haga un servicio generoso y honesto y que convoque a México a la reconciliación y a la unidad''.
Otros visitantes
A la residencia de Las Lomas, que se ha convertido en un claustro de acceso exclusivo para convocados, llegaron también integrantes del llamado "equipo de transición" hacia el nuevo gobierno, entre ellos Francisco Molina, de la mesa de Seguridad; Carlos Rojas, del área de Administración; Adolfo Aguilar Zinser y Jorge Castañeda, del área Internacional. Además asistió el ex subsecretario de Hacienda, Tomás Ruiz.