LUNES 24 DE JULIO DE 2000
* PARABOLA
* Emilio Lomas M. *
Privatizadores del mundo, uníos
Aunque usted no lo crea, en el campo de la energía el nuevo gobierno afila sus instrumentos para presentar una visión renovadora de los asuntos. Y decimos aunque usted no lo crea, porque no va a adivinar a quién se ha encargado de coordinar la cuestión energética por parte del equipo foxista. Se trata del doctor, ahora sí, Fausto Alzati Araiza que, como se dice vulgarmente, viene por la revancha en la administración pública luego de que debió abandonarla por la puerta trasera, una vez que el entonces señor Alzati, que no era ni licenciado, ni maestro ni doctor, fue cuestionado para encabezar la Secretaría de Educación Pública, ni más ni menos que la dependencia en la que se validan y reconocen los títulos profesionales y los grados.
Pero ya está aquí de nuevo uno de los mexicanos que, entre sólo algunos, llegó a ser de los hijos predilectos, no del régimen, no, sino del Massachusetts Institute of Technology (MIT), institución de gran prestigio en la que los especialistas del área de energía han cuestionado permanentemente la propiedad estatal del petróleo y la electricidad en Arabia Saudita, Irán, Argelia, Venezuela, y también en México.
Ya veremos por dónde se orienta el doctor Alzati y a qué acuerdos llega este gobierno foxista con el actual gobierno para aplicar y profundizar los cambios que el doctor Zedillo, antes amigo del doctor Alzati, y el doctor Téllez, ahora amigo del doctor Alzati, han preparado para Pemex, la Comisión Federal de Electricidad, Luz y Fuerza, el Instituto de Investigaciones Eléctricas, el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares; es decir para todo el sector de la energía. Ya veremos a qué arreglos llegan, lo cierto es que se esperan acuerdos entre los equipos del gobierno entrante y del saliente para retomar las transformaciones, ventas y demás cambios sugeridos por los privatizadores del mundo. Por cierto, Alzati confesó por primera vez a quien esto escribe que carecía de los títulos profesionales que lo acreditaran como licenciado, y no lo hizo a otro diario, como Andrés Oppenheimer citó en una publicación. Los puestos en el sector energético ya se cabildean; Téllez se quedaría en la Secretaría de Energía impulsando la iniciativa de reforma a la CFE y Pemex del equipo foxista, que si no plantea la privatización no niega una apertura más ancha a los capitales extranjeros, que no es lo mismo pero es igual. Alzati se quedaría al frente de Pemex, y por lo pronto Elías Ayub no por exceso de eficiencia, se va.
Los primeros problemas por resolver
Para quienes están convencidos de que la presente administración pasará a la gloria por haber erradicado las crisis sexenales y haber sido la primera en no tergiversar los resultados electorales, hay que recordarles que dejará una gran cantidad de compromisos sobre las finanzas públicas y muchas insuficiencias en las demandas más elementales de los que menos tienen. No hay que olvidar que en seis años la administración zedillista fue incapaz de iniciar siquiera una reforma fiscal integral, que realmente ampliara la base de contribución, replanteara los esquemas de incentivos y exenciones fiscales, y no se concentrara en castigar más a los pocos contribuyentes.
De esta forma, el próximo gobierno difícilmente podrá hacer grandes cambios en los primeros años de su mandato, pues cuenta con una débil estructura fiscal incapaz de financiar las funciones básicas del Estado. México comienza el nuevo siglo con una quiebra fiscal similar a la de 1982. Para este año tenemos el gasto público más bajo de los últimos 18 años y es casi 20 puntos porcentuales menor al de 1982 con respecto al producto interno bruto. ƑCómo alcanzar entonces el incremento de 3.19 por ciento que se requiere para satisfacer las necesidades de la población?
A la situación fiscal se suma la pesada carga de la deuda pública interna, en la que el caso de las pensiones es un problema que la administración zedillista tampoco quiso resolver, y para el que Vicente Fox aún no ha hecho propuestas. Se prevé que las dificultades financieras del sistema de pensiones del ISSSTE requerirá por lo menos 17 mil 500 millones de pesos al año, mientras los sistemas de pensiones estatales podrían estar en una situación más grave. Pero esta situación no para aquí, sino que se extiende a las empresas estatales y los grandes organismos públicos descentralizados, donde existen regímenes particulares de pensiones. Por ejemplo, en el caso de la Comisión Federal de Electricidad se estima que los pasivos laborales alcanzan cerca de 60 mil millones de pesos; otro caso es el de Ferrocarriles Nacionales, cuyos ingresos derivados de su venta apenas alcanzaron a cubrir el total de los pasivos laborales ƑSe estará gestando un problema similar en Pemex?
Melée
Hace 15 días, en momentos en que se cumplía el límite superior de la banda de control de precios para determinar el incremento de la producción, los jeques de Arabia Saudita plantearon la necesidad de aumentar el abasto petrolero, señalando que de no hacerse ese mismo país lanzaría al mercado los 500 mil barriles prometidos luego de 20 días con precios superiores a los 28 dólares. México, inmediatamente secundó la propuesta ofreciendo 50 mil barriles. Sin embargo, como se demostró en las reuniones extraordinarias de la OPEP de la semana pasada, sólo el anuncio de un probable aumento en la oferta petrolera ha empujado los precios a la baja, por lo que los mismos árabes recomiendan esperar un poco para lanzar un incremento de producción, es decir, esperar a que la elevación estacional de septiembre y octubre logre la estabilidad de precios que el descenso de los últimos días parece prometer. Así el panorama, los funcionarios mexicanos debieran actuar con mayor prudencia pues parecen preocuparse más por los altos precios de la gasolina en el vecino país que por los del gas natural en México, por ejemplo.