SABADO 22 DE JULIO DE 2000
* Comenzó en Nago la cumbre de los más ricos
Busca el G-8 condonar o aliviar deudas de naciones más pobres
* Controlar el lavado de dinero, demanda el G-7 a quince países
Afp, Ap, Dpa y Reuters, Nago, Japón, 21 de julio * La cumbre del Grupo de los Ocho, que reúne a los siete países más industrializados del mundo más Rusia, inauguró este viernes su cumbre económica en esta ciudad de la isla de Okinawa con el firme propósito de responder a los críticos de la globalización mundial y con la promesa de enfatizar en el encuentro iniciativas para condonar o aliviar las deudas de los países más pobres.
Así, este viernes se discutió la posibilidad de acelerar el proceso de reducción de las deudas de las 40 naciones que integran el grupo de Países Pobres Altamente Endeudados (HIPC, por sus siglas en inglés) y planes para conceder ayudas económicas y la reducción de sus deudas a países en guerra civil, siempre y cuando logren resolver pacíficamente sus conflictos internos.
Ministros de Finanzas o de Ayuda para el Desarrollo de Estados Unidos, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, Canadá y Japón se reunieron para empezar a discutir maneras para "animar a los países del HIPC a cumplir las condiciones requeridas para reducir sus deudas".
Voceros británicos en la cumbre dijeron que en el encuentro cimero se tratará de buscar medios de "acelerar el proceso y remover algunos obstáculos" para concretar la reducción de las deudas externas.
Voceros japoneses, a su vez, dijeron que también se buscará implementar medidas para hacer que el actual acuerdo funcione mejor, sin cambiar el marco del mismo ni caer en el riesgo de que después los países beneficiados pidan condonaciones adicionales a sus acreedores.
Un documento firmado este viernes por los ministros constató que, por lo pronto, está a punto de reducirse la deuda de nueve de los 40 países del HIPC, que son Benin, Bolivia, Burkina Faso, Honduras, Mauritania, Mozambique, Senegal, Tanzania y Uganda.
Trascendió también que este día por primera vez se presentó ante los miembros del Grupo de los Siete (G-7) la iniciativa para ayudar a países pobres y en guerra como República Democrática de Congo, Sierra Leona y Burundi, en la que se condicionaría la condonación de sus deudas a avances hacia la solución de sus conflictos internos.
Sin embargo, fuentes cercanas al encuentro dijeron que no se presentó ningún nuevo programa hacia el alivio de las deudas externas de los países más endeudados ni se habló de reducir los cuantiosos adeudos rusos, pese a que Moscú piensa proponer en la cumbre que se le condone la deuda adquirida durante la época soviética.
Traición de promesas
Pese a estos esfuerzos de congraciarse con los opositores a la globalización, los "liberadores de la deuda" agrupados en el colectivo Jubileo 2000 y respaldados por 18 mil firmas en favor de hacer desaparecer la deuda de los países pobres, acusaron hoy al G-7 de haber traicionado las promesas del año pasado en la conferencia cumbre celebrada en Colonia, Alemania.
El responsable de Jubileo 2000 en Gran Bretaña, Adrian Lovett, afirmó que de los 100 mil millones de dólares de deuda que se prometió anular, sólo se han condonado 15 mil millones.
El vocero, además, puso en duda que el G-7 vaya a considerar que países como Nigeria, Chad o Bolivia cumplen con sus "condiciones" para hacer efectiva la reducción de la deuda.
En otro orden, el G-7 amenazó hoy a 15 naciones del mundo con sanciones si insisten en no optimar sus sistemas fiscales para controlar el lavado de dinero.
Las sanciones incluyen la posibilidad de que se congelen transacciones conjuntas con esas naciones "no cooperativas", entre las que figuran Israel, Liechtenstein, Bahamas, República Dominicana, Islas Caimán, Panamá y Rusia.
Por otra parte, el presidente estadunidense, Bill Clinton, hizo alusión a la cadena humana que el pasado jueves reunió a más de 27 mil personas que protestaron contra la presencia de militares estadunidenses en la isla japonesa de Okinawa, al afirmar que "vamos a consolidar nuestras bases (en la zona), pero continuaremos haciendo lo que podamos para reducir nuestras huellas en esta isla".