VIERNES 21 DE JULIO DE 2000

* El legislador propone construir un nuevo partido, de centro-izquierda

Los ciudadanos ya no quieren más PRI, señala el diputado Luis Miguel Ortiz Haro

* Presentó Levín Coppel a Florentino Castro como nuevo secretario general del tricolor capitalino

Gabriela Romero Sánchez * Los ciudadanos ya no quieren "más PRI" y no volverán a votar por él, admitió el diputado local Luis Miguel Ortiz Haro Amieva, quien resaltó que en las elecciones del 2 de julio quedó demostrado que en el Distrito Federal el Revolucionario Institucional "se agotó".

Advirtió que el sentimiento antipriísta que en esta ocasión se concentró en la ciudad de México, puede en un futuro no muy lejano llegar a los estados del país, si no se construye un nuevo partido de centro-izquierda.

Luego de anunciar que no intervendrá en el comité directivo del PRI capitalino, Ortiz Haro Amieva puntualizó que el dirigente, Oscar Levín Coppel, lo invitó a participar en un comité de transición, no en la dirección del partido.

En corto, recordó que la presidenta del Comité Ejecutivo Nacional, Dulce María Sauri Riancho, presentó la propuesta en la reunión del martes pasado, no la aceptaron y decidió retirarla. "Entonces, no tengo por qué quedarme e intervenir en un proyecto con el que no comulgo".

Minutos antes, en el marco de la conferencia de prensa en la que el dirigente del PRI capitalino, Oscar Levín Coppel, presentó oficialmente a Florentino Castro como secretario general, a Alfonso Rivera Domínguez como secretario de Acción Electoral, y a Adriana Valdez como secretaria de Movilización Ciudadana, Ortiz Haro Amieva enfatizó que está convencido de que el tricolor en la ciudad de México "ya se agotó".

"Creo que el compromiso que tenemos con los ciudadanos que votaron por el PRI se tiene que traducir en la construcción de un nuevo partido. Estas son las razones que me impiden integrarme al comité directivo en esta etapa del partido. Reitero mi militancia y mi interés por participar en la construcción de un nuevo partido de centro-izquierda; un partido ciudadano que despierte el interés de la mayoría de los electores que nos dieron la espalda", abundó Luis Miguel Ortiz.

Mi permanencia, temporal

Por su parte, Levín Coppel reiteró que su permanencia en la dirigencia del partido es sólo una medida temporal para dar paso a la transición que requiere el tricolor. "Mi momento en el partido se agotó, se lo he dicho a la militancia de mil maneras, pero de lo único que estoy convencido también es que debo tener la entereza para saber entregarle las llaves a una nueva dirigencia del PRI en la ciudad de México".

De la presión que en los últimos días han ejercido distintos grupos, que va desde el bloqueo de las instalaciones del PRI-DF hasta condicionar su apoyo a la cesión de lugares en la comisión de transición (Cuauhtémoc Gutiérrez), Levín Coppel rememoró que el viernes anterior, cuando le presentó su renuncia a Sauri Riancho, le dijo que había grupos acelerados y ella le pidió que hiciera un acto de responsabilidad y se quedara. "Acepto quedarme, pero 45 días, con la idea de que si no se arregla en ese tiempo, ya no se arregló, así de sencillo", contestó.

Otra versión señala que se presionó al dirigente capitalino a seguir en el cargo, ya que el viernes hizo un par de llamadas asegurando que se iba, que ya estaba cansado y que incluso ni siquiera estaba en las oficinas del partido, mismas que habían sido tomadas por el Frente Político 6 de Julio.

Admitió que quizá fue un error invitar a la dirigente nacional, Sauri Riancho, y pedirle que diera a conocer la integración del comité de transición. "Así lo hizo, pero un grupo de militantes dijo no; no dudo que muchos estén enojados con Levín Coppel y busquen algún culpable, no se dan cuenta de que fueron tan culpables como nosotros".

Flanqueado por Florentino Castro y Ortiz Haro Amieva, el líder priísta recriminó: "todos los que perdieron ya se lavaron las manos. El único que está dando la cara soy yo, entonces es para el único que tendrá costos".

Levín Coppel señaló que hay quienes desean que se vaya, "porque saben que sin nosotros esto se acaba". Aseguró que dejará el cargo el primero de septiembre, "pase lo que pase".

Inconformes anuncian movilizaciones

Por su parte, los dirigentes León Enrique Espinosa (Frente Político 6 de julio), Carlos Aquino López (Democracia 2000) y Héctor Becerril Lira (Coalición Nacional de Oradores), en representación de cerca de 50 organizaciones sociales, informaron que en los próximos días realizarán movilizaciones para exigir la salida de Levín antes de 45 días.

"Tomaremos de nuevo las instalaciones del PRI capitalino, llevaremos más gente, para que Levín vea que no somos un pequeño grupo como piensa", sentenció Enrique Espinosa.

En nombre del nuevo comité directivo, Florentino Castro aceptó que la derrota ha llevado al partido a una crisis profunda, en la que intereses de grupo se están poniendo por encima de la tarea histórica del Revolucionario Institucional, por lo que se parte de la idea de establecer un partido de centro-izquierda, más cercano a los ciudadanos.