VIERNES 21 DE JULIO DE 2000
* Manifestación de migrantes frente al Capitolio
Exigen sindicatos y legisladores amnistía para indocumentados
* Se busca cambiar a fondo las leyes estadunidenses de inmigración
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 20 de julio * Sindicatos nacionales, religiosos y legisladores federales se sumaron a más de mil inmigrantes frente al Capitolio para demandar una amnistía general para todos los indocumentados en este país y empezar lo que un congresista llamó "la larga lucha" para cambiar a fondo las leyes de inmigración.
"Nueva York, Los Angeles, Washington; sin inmigrantes, olvídense de salir a comer", se leía en una pancarta que portaba uno de los manifestantes que viajó desde Nueva York para unirse a esta protesta.
Muchos acudieron vestidos con camisetas o gorros que indicaban su afiliación con sindicatos, y otros dijeron haber tomado el día libre para poder viajar para estar presentes en esta demostración.
"Clinton escucha, estamos en lucha", se leía en una manta que encabezaba un contingente de varios cientos de inmigrantes que llegaron desde Maryland.
Al iniciarse la manifestación, el representante federal Luis Gutiérrez y un dirigente de un sindicato nacional con 800 mil agremiados señalaron que el poder de este movimiento podría ser incrementado con la llegada al poder en México de Vicente Fox.
"Me estimuló mucho (su elección) porque ahora tenemos a alguien que ve como parte de su trabajo a los 18 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos", comentó Gutiérrez a la prensa.
Por otro lado, Terence O'Sullivan, secretario general del sindicato de trabajadores de la construcción Laborer's International Union, dijo que su gremio estaba alentado por las declaraciones de Fox y que se reunirá con integrantes del equipo de transición del virtual presidente electo en agosto para abordar el tema de la inmigración.
La manifestación de hoy fue parte mitin político y parte fiesta que celebraba lo que parece ser un creciente movimiento de inmigrantes a nivel nacional, y ante el Capitolio la escena era dominada por mexicanos que ondeaban su bandera y exigían respeto por su mano de obra en este país.
La manifestación empezó con unos cientos de trabajadores, muchos de ellos acompañados de sus familias, que se congregaron en un parque frente al Congreso.
Pero después empezaron a arribar nuevos contingentes de varios cientos, algunos de lugares tan lejanos como Houston o Chicago. Y no todos eran latinoamericanos: se anunció la llegada de un contingente de africanos del este que se unió a este acto.
"Los instamos a que hablen con sus familiares, sus padres, con todos los que conozcan para pedirles que apoyen una demandada de una la amnistía general", declaró un cura desde el podio.
Mientras algunas organizaciones latinas cabildeaban en el Congreso cambios mucho menores, pero más posibles, en las leyes migratorias de este país sin mencionar la amnistía, el mensaje de esta manifestación fue a favor de una amnistía general para casi 9 millones de indocumentados.
"El Consejo Nacional de La Raza apoya el llamado a favor de una amnistía general, la única forma para evitar la explotación de los trabajadores y sus familias en esta nación", declaró el presidente de esa organización, Raúl Yzaguirre.
Una mitad de los participantes eran miembros de sindicatos; el contingente más grande fue el del sindicato de la construcción.
"Necesitamos cambiar las leyes de este país --afirmó el secretario general O'Sullivan--. Cuando los trabajadores latinos intentan organizarse, los patrones suelen llamar al Servicio de Inmigración".
Tras destacar que un gran porcentaje de sus bases sindicales son latinas, dijo que el sindicato seguirá realizando acciones públicas como eventos de educación de los trabajadores para promover la demanda de una amnistía general.
Uno de los promotores más importantes de la amnistía, Luis Gutiérrez, dijo a los reporteros que esta lucha será larga y ardua, e indicó que está dentro de lo posible que el Congreso apruebe una legislación que permitirá a entre 400 mil y 500 mil indocumentados mexicanos en este país hacerse ciudadanos y poder traer a sus familias.
Para Gutiérrez, estos esfuerzos forman parte de una larga campaña para lograr una amnistía general y promover una nueva forma de abordar el tema de la inmigración, y señaló: "Hay que empezar esta lucha".
Para el largo plazo, Gutiérrez cree que son muy importantes las propuestas de Fox para un debate bilateral sobre la inmigración en un nuevo marco que incorpore la discusión del desarrollo económico y la generación de empleo en México.
Y la escena de banderas mexicanas, cargadas por inmigrantes de otras partes del mundo frente al Capitolio para exigir respeto a todos los seres humanos, fue algo poco común en este centro del poder político.