MIERCOLES 19 DE JULIO DE 2000
* La líder nacional del tricolor tuvo que ratificar y dejar en sus manos la decisión
Militantes impidieron que Sauri impusiera dirigencia del PRI-DF
* Finalmente, Oscar Levín Coppel quedó en libertad para conformar a su comité directivo
Gabriela Romero Sánchez * El PRI capitalino atraviesa por una situación de emergencia, que obliga a la renovación del comité directivo en un plazo no mayor de 45 días, advirtió Dulce María Sauri Riancho, dirigente nacional de ese partido, al salir de una reunión con militantes del tricolor en esta ciudad, que con gritos la obligaron a rectificar y dejar a ellos la decisión de elegir a quienes ayudarán a Oscar Levín Coppel a conducir al PRI en esta etapa.
En medio de un ambiente de confusión generado por la falta de comunicación y los amarres de último momento, Sauri Riancho ingresó al auditorio Heriberto Jara acompañada por César Camacho Quiroz, secretario de Acción y Operación Política del CEN, y por Jesús Murillo Karam, encargado de la secretaría técnica del Consejo Político Nacional, e informó que los integrantes del comité directivo del PRI capitalino le presentaron su renuncia. "Acepté todas, con excepción de la de Oscar Levín Coppel", afirmó.
Luego de anunciar que los diputados locales Luis Miguel Ortiz Haro Amieva y Alfonso Rivera Domínguez, junto con Florentino Castro, Juan Torres y César Camacho Quiroz, integrarían la comisión de transición del PRI capitalino, vino la reacción de repudio de los militantes: "šFalso!", "ƑA quién se consultó para hacer esto?"
Esta actitud hizo dudar a la dirigente nacional, quien tras aclarar que no era una sesión de Consejo Político optó por dejar que los inconformes hicieran uso de la palabra.
Carlos del Olmo, del sector obrero, le aclaró que los priístas del Distrito Federal quieren que se les tome en cuenta, y puntualizó que no se ponía en duda la capacidad de ninguno de los propuestos, sino la manera en que se les pretendía imponer. "Hay que estar unidos, no nos fracturemos más. Ya basta de que tengamos otro 90 a 0", pidió.
Jazmín Esquivel Mossa, ex candidata a diputada local, sentenció que esa comisión carecía de toda representatividad y pidió que se reconsiderara la decisión. En el mismo sentido se pronunció Juan José Castillo Mota, diputado local electo.
Cuauhtémoc Gutiérrez, del Movimiento Territorial, instó a Sauri Riancho a retomar la propuesta de Levín Coppel e integrar una comisión de transición con 20 personas, en vez de cuatro.
Sin poder ocultar su molestia, Dulce María Sauri volvió a hablar para anunciar que retiraba su propuesta, salvo la de Camacho Quiroz, quien será el enlace entre el Comité Ejecutivo Nacional y el Revolucionario Institucional en el DF, y añadió que los dejaba en libertad para definir quiénes debían integrar el comité directivo, junto con Murillo Karam. Luego, rodeada por sus colaboradores, Sauri salió del auditorio.
"Así no me quedo"
Desde el presidium, Oscar Levín Coppel seguía con la vista cada uno de los movimientos de la masa de priístas que al frente exigían no ser excluidos de la comisión de transición. Cauto, espero cerca de 20 minutos, para luego aclarar que la propuesta presentada por Sauri Riancho nada tenía que ver con el equipo que se estaba integrando con los ex candidatos, los dirigentes distritales y los sectores.
"La otra ya está conformada casi en 75 por ciento, mientras que la que se propone ahora es para apoyarme en el comité directivo", acotó.
Luego vino la advertencia: "yo no me quedo bajo estas circunstancias, a partir de ahora hago efectiva esta renuncia". En los pasillos, se oían comentarios irónicos: "Uuuy, qué miedo", "Que se vaya, si bien que nos engañó con el programa de promoción del voto".
La diputada María Angélica Luna Parra intervino: "Es legítimo que se quede y que quiera nombrar a su comité ejecutivo, dejémoslo que lo haga, pero todas las decisiones que se tomen deberán ser ratificadas por el Consejo Político del Distrito Federal".
Murillo Karam interrumpió: "creo que es una propuesta clara, dejemos que él nombre su comité".
En entrevista posterior, Levín Coppel admitió que las condiciones en las que se queda no son las óptimas. "Se rebelaron y no, porque al final de cuentas terminaron dándome su apoyo para que nombrara a quien quisiera", manifestó.
Adelantó que Florentino Castro será el secretario general; Luis Miguel Ortiz Haro el de Operación Política, y Alfonso Rivera, de Elección.
En corto, trascendió que Levín Coppel había asegurado a la dirigente nacional y a los nuevos integrantes de su equipo que había consenso de los militantes ante su propuesta. Sin embargo, no tomó en cuenta que habría quien le diera la espalda. Al salir del auditorio, Levín increpó: "a ver si controlas a Castillo Mota", a quien minutos después le recriminó a la cara.
Mientras, Cuauhtémoc Gutiérrez, líder del Movimiento Territorial, dos horas antes se reunió con Murillo Karam, a quien condicionó su aceptación de la propuesta a cambio de que se le otorgaran cinco lugares en la comisión de transición. El ex gobernador de Hidalgo no aceptó.