LUNES 17 DE JULIO DE 2000
* Procuraduría Agraria
Los beneficios de Procampo, escasos o inexistentes
Mayela Delgadillo * La mayor parte del subsidio otorgado por el Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo) se concentra en los estados de Tamaulipas, Sonora y Sinaloa, y pese a que tiene una cobertura muy amplia (13 millones de hectáreas), la evaluación de beneficios es que han sido reducidos o inexistentes, señaló Francisco Ibarra Romero, director de diseño estratégico de la Procuraduría Agraria.
El apoyo de Procampo no ha podido compensar en los ingresos de los productores la disminución de los precios de sus productos, lo cual fue resultado de la decisión gubernamental de alinearse a los precios internacionales; y en términos reales, el subsidio cayó en 45 por ciento desde su inicio en 1994, y hasta 1999.
Mientras participa en los precios internacionales, en aspectos como el precio de venta, la oportunidad de venta, la utilización de insumos, rendimientos, conversión productiva y la legalización de la propiedad, el programa se mantuvo al margen.
"En cambio, ha sido determinante en la decisión que asumen los beneficiados que poseen más tierra, o que toman más predios en renta, y esto equivale a concentrar aún más la producción y el ingreso", indicó el funcionario en el estudio Los instrumentos de la nueva política agrícola, elaborado en conjunto con la investigadora de la UNAM, Rosario Pérez Espejo.
Procampo no ha presentado modificaciones en los siete años de existencia, la superficie real pagada siempre se ha ubicado en los 13 millones de hectáreas, su cobertura en número de beneficiados se ha incrementado de 2 millones a 3.8, e incluye a los beneficiados de Alianza para el Campo y el Programa de Apoyos a la Comercialización.
Además de la siembra de maíz en zonas de riego, el plan ha generado otras reconversiones nocivas para la agricultura como que en 80 por ciento de la superficie agrícola de Sonora se siembre trigo, cultivo que requiere de un paquete tecnológico altamente depredador del medio ambiente, con lo que se agudizan los problemas de contaminación de suelo y agua en los distritos de riego.
Reconocida la heterogeneidad del sector en México, donde coexisten "todos los tipo de agricultura, todos los tipos de ganadería, y quizá todas las formas de organización social y de condición económica, y por lo tanto, el tratamiento tiene que ser diferenciado, Procampo otorga el mismo subsidio al productor de menos de 5 hectáreas de temporal que al empresario de más de 200 en un distrito de riego", apuntó.