VIERNES 14 DE JULIO DE 2000
* Decimocuarto trabajo cinematográfico del director Bruno Barreto
Bossa nova es una carta de amor al Río de Janeiro de los años sesenta
* Analiza el vaivén de las relaciones humanas y los conflictos afectivos en la era del Internet
* La película está dedicada al cantautor Tom Jobim y al realizador François Truffaut
Miryam Audiffred * Más allá de los encuentros y desencuentros amorosos que integran la trama de Bossa nova, la más reciente película del director brasileño Bruno Barreto, ''es una carta de amor al Río de Janeiro de los años sesenta'', a la ciudad que por sus tiempos afables y sus paradisiacos paisajes se hizo célebre en la voz de Tom Jobim y en los renglones escritos por incontables compositores pop.
Las imágenes capturadas en esta cinta que se estrena hoy en varios cines comerciales del país son las de un Río de Janeiro idealizado, tal vez inexistente, en el que es imposible ser feliz por sí solo porque ųen palabras de su creadorų ''el lugar es tan impresionante que hay que estar enamorado para disfrutar por completo de toda su belleza".
Pero la película también es el regalo que el autor de One tought cop (1998) quiso darle a su compañera, la actriz Amy Irving, quien en este filme interpreta a Mary Ann, una maestra de inglés que redescubre su capacidad de amar y ser amada al tiempo que se erige como punto de encuentro de los nueve personajes que se entrecruzan en un ambiente carioca donde el futbol es algo omnipresente.
Al igual que en otras de sus producciones, Barreto explora en Bossa nova el vaivén de las relaciones humanas y los conflictos amorosos que la era del Internet ha generado. De hecho, en esta comedia romántica ųcomo el realizador la defineų los malentendidos lingüísticos y los choques culturales juegan un papel importante.
Podría decirse que esta cinta es totalmente distinta a Four days in september (1997), película que dirigió en su reencuentro con Brasil después de vivir diez años en Estados Unidos. La razón de tal diferencia bien puede hallarse en las palabras del cineasta: ''Mi intención fue crear una película que hiciera más ligeras las almas de sus espectadores y pusiera una sonrisa en sus rostros cuando dejaran la sala del cine".
Retorno a la comedia romántica
Adaptada de la novela Miss Simpson, de Sérgio Sant'Anna y escrita por Alexandre Machado y Fernanda Young, Bossa nova está dedicada a Tom Jobim y al realizador François Truffaut ųcreador de The bride who wore blackų a quien el director brasileño considera uno de sus grandes maestros.
''Esta película representa para mí lo que la canción Airplane samba significa para Tom Jobim o lo que Manhattan es para Woody Allen", ha dicho Bruno Barreto en varias entrevistas. Tal vez por eso, el director de Story of Fausta (1987), The rising star (1974) y A show of force (1990) incluyó en sus locaciones la Playa de Ipanema, el histórico edificio del hotel Copacabana Palace, la Bahía de Botafogo, múltiples edificios art decó y algunos ejemplos de la labor arquitectónica de Lúcio Costa y Oscar Niemeyer.
Como la música cumple un rol fundamental en el largometraje, Barreto invitó al pianista y compositor Eumir Deodato ųuno de los productores musicales más prolíficos y respetados de la industria musical de Brasilų a componer la partitura de la cinta y a realizar una nueva orquestación para diez canciones de Tom Jobim. Así, la pista incluye piezas como How insensitive, Useless landscape y Quiet night, quiet stars, así como nuevas grabaciones hechas por artistas contemporáneos en inglés y portugués.
En su decimocuarta producción cinematográfica, Bruno Barreto regresa a la comedia romántica ųgénero que en los años setenta le brindó un gran éxito con Doña Flor y sus dos maridosų con ayuda de los actores Amy Irving, Antonio Fagundes, Alexandre Borges, Débora Bloch, Drica Moraes y Giovanna Antonelli, entre otros.