VIERNES 14 DE JULIO DE 2000
* Debe dejar el cargo antes de tomar posesión como senador, argumentan
Exigen en el SNTE la renuncia de Vázquez Vigil
* Se adelantaría para noviembre el congreso nacional en el que se nombraría al nuevo líder sindical
Alma E. Muñoz * Al interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), algunas fracciones de las llamadas democráticas pugnan por adelantar el congreso nacional de la organización, previsto para marzo del año próximo, a fin de elegir al sustituto del dirigente Tomás Vázquez Vigil, quien, como estipula el artículo 43 de sus estutos, debe renunciar al cargo antes de tomar posesión como senador de la República.
También buscan reformar los lineamientos del sindicato para evitar que en adelante se mantenga como una agrupación favorable a los intereses de determinado partido político o responda a los requerimientos gubernamentales.
Frente a los resultados desfavorables al Partido Revolucionario Institucional en la jornada electoral del 2 de julio, en el gremio magisterial se impulsa la conformación de un frente que lo unifique y evite su fractura para que no desaparezcan las organizaciones sindicales y haya la posibilidad de que las contrataciones labores se realicen de manera individual, tal y como definen los mecanismos neoliberales, según Emma Rubio, coordinadora de la corriente Nuevo Sindicalismo.
"Requerimos fortalecer la autonomía sindical, buscar la centralidad del SNTE en defensa de los derechos laborales, independientemente de los partidos políticos. Incluso, la corriente hegemónica, los institucionales (vinculados al PRI) deben dar pasos en esa dirección. Después del 2 de julio se abrieron muchas posibilidades para la construcción y respeto al proyecto sindical".
Para ello, añadió la también secretaria de Asuntos Profesionales del SNTE, es necesario discutir sobre los estatutos que rigen al gremio, más allá de la realización de un congreso nacional.
No obstante, Emilio Mejía Mateos, secretario de Estadística y Planeación del sindicato magisterial, se pronunció por adelantar la realización del congreso ųantes de noviembreų para, además de hacer cumplir el artículo 43, en su fracción II, que impide a los dirigentes del SNTE, a nivel seccional y nacional, ser candidatos o desempeñar cargos de elección popular, determinar cómo "responder al reto que nos implica el nuevo gobierno, para que se respete el principio de educación pública, gratuita y laica".
Las reuniones que desde el martes pasado sostienen algunos miembros del Comité Ejecutivo Nacional, de acuerdo con los dos secretarios del SNTE, no responden a una convocatoria abierta, pues únicamente se trata de un encuentro entre la parte institucional para analizar cuál debe ser el camino del órgano sindical. Las corrientes democráticas coinciden en que el control no debe recaer en un solo grupo, y por ello es necesario reforzar los estatutos y hacer entrar al organismo a la etapa de transición democrática que vive el país.
"Para cualquier organización corporativa, los peligros vienen de atrás. Los sindicatos estorban en el proyecto que domina el fenómeno de la globalización, y se busca su fragmentación para realizar contrataciones individuales. Ahora se trata de defender la presencia del gremio magisterial. Por ello es necesario analizar la postura de cada una de las corrientes para cumplir este fin", dijo Emma Rubio, quien adelantó que del 28 al 30 de julio, Nuevo Sindicalismo realizará su asamblea para definir sobre este rumbo.
De parte de las fracciones disidentes el llamado es para integrar un frente amplio que, entre otros puntos, evite la violación a los estatutos y dé un cauce democrático al SNTE. Por lo pronto, dentro del sindicato magisterial se comienza a exigir la renuncia de Tomás Vázquez Vigil y la realización de nuevas elecciones en las secciones cuyos dirigentes obtuvieron un cargo de representación popular durante la jornada electoral pasada, como ocurrió en la 12 y 27 de Durango y Sinaloa, respectivamente.