VIERNES 14 DE JULIO DE 2000

* Demandan a la ALDF un periodo extra para profundizar en lo alcanzado


Ni un paso atrás a reformas al Código Civil: grupos feministas

* Censuran la doble moral de agrupaciones afines al PAN * Buscan que mujeres continúen sometidas

Bertha Teresa Ramírez * Agrupaciones feministas de la Campaña de Acceso a la Justicia para las Mujeres, quienes impulsaron las reformas al Código Civil para el Distrito Federal, advirtieron que no debe darse ni un paso atrás en las reformas al ordenamiento y solicitaron ayer al coordinador parlamentario del PRD en la Asamblea Legislativa, Martí Batres Guadarrama, que se abra un periodo de sesiones para que se profundice aún más en los avances logrados y se pueda perfeccionar la técnica jurídica que haga efectivo el goce de las conquistas alcanzadas.

Orfe Castillo y Ana María Hernández, fundadoras de la asociación Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, señalaron que esto es muy importante para consolidar los adelantos en materia civil y no al contrario, "retrocesos que no vamos a permitir en relación a las conquistas ganadas durante el periodo de la actual ALDF".

En entrevista, las feministas respondieron a las propuestas planteadas por la Asociación Nacional Cívica Femenina (Ancifem) y Pro Vida, agrupaciones de corte conservador afines al PAN, al secretario de Gobierno del DF, Leonel Godoy, para demandar una contrarreforma al Código Civil aprobado en mayo pasado.

Señalaron que la realidad que viven las familias en la ciudad de México obliga a llevar a cabo modificaciones a las normas civiles porque el concepto de familia en la capital no se ajusta exclusivamente al de las familias tradicionales conformadas por "un papá, una mamá y los hijos, pues cada vez más se dan otro tipo de familias, como las compuestas por una pareja que conforma una nueva familia con los hijos de ambas partes".

La doble moral

En respuesta a los grupos conservadores que reclaman que se haya eliminado el término adulterino de las actas de nacimiento para señalar a los niños producto de adulterio, Julia Pérez, abogada de la asociación Defensa Jurídica y Educación para Mujeres, quien forma parte de la Campaña de Acceso a la Justicia, dijo que el haber suprimido de las actas de nacimiento los términos ilegítimo, natural, expósito, hijo de concubinato o adulterino, constituye un avance porque esos adjetivos fomentaban la discriminación en contra de ese grupo infantil.

Dijo que en la interpretación de las agrupaciones conservadoras en torno a las reformas que suprimen esos adjetivos, se nota una doble moral con la que intentan salvar el honor que ya no existe en una familia, evitando que salga a la luz pública la realidad de las relaciones humanas. Indicó que esto daña el ánimo porque elimina de un plumazo el derecho del menor a conocer su origen, lo cual evita en muchos casos que el menor goce de una familia que a lo mejor es más beneficiosa para él y desde luego se le cercena la parte de afectividad que un verdadero padre le podría dar a su hijo, sobre todo cuando se le pone como padre, a veces a la fuerza, a otro que no lo quería, sólo para salvar ese supuesto honor.

Orfe Castillo agregó que al oponerse a la prohibición de esto, los grupos conservadores manifiestan "un interés supremo por conservar una imagen familiar falsa".

Julia Pérez, a su vez, se refirió a la disposición que amplía de 14 a 16 años la edad para que una menor, en caso de resultar embarazada, se pueda casar; asentó que cuando una menor de 13 o 14 años queda embarazada, lo más fácil para los padres es que se case, pero con ello en ningún caso están protegiendo a la menor.

Cuestionó que se obligue a estas chicas a realizar una unión que tiene pocas posibilidades de sobrevivir, sobre todo si se considera que está prohibido trabajar a los 14 años. Dijo que "más bien la posición de Ancifem y Pro Vida es condenar a las menores que tengan la desgracia de quedar embarazadas a esa edad a una relación y a una obligación con respecto a un menor".

Orfe Castillo planteó que esta reforma es importante para desalentar los embarazos y matrimonios entre adolescentes, pues esto las lleva a situaciones que limitan las posibilidades de desarrollo de las adolescentes, lo cual no impide que quienes quieran casarse a esa edad se puedan casar y mucho menos que el padre asuma la responsabilidad que le toca con respecto de los hijos.

Divorcio

En torno a que el divorcio se pueda conceder en un año, y no en dos como antes establecía el Código Civil, es premiar y facilitarle las cosas a un cónyuge "culpable" de haber provocado el divorcio, sea por abandono o por adulterio, y que normalmente es el varón, según los grupos conservadores. Castillo respondió: "estamos absolutamente de acuerdo con facilitar las cosas para tener relaciones sanas, armónicas, solidarias, de responsabilidad y consentimiento mutuo". Añadió que están absolutamente en contra de conservar matrimonios que no funcionan y que no solamente dañan a los integrantes del matrimonio, sino a la familia en su conjunto".

Trabajo doméstico

Orfe Castillo señaló que en materia de trabajo doméstico están de acuerdo con los grupos conservadores en que se tiene que profundizar aún más en los avances para las mujeres que realizan este trabajo en los hogares y es necesario revisar los criterios para "tasar" el trabajo doméstico.

Violencia intrafamiliar

Con respecto a que las relaciones adulterinas o poligámicas también pueden estar consideradas dentro de la definición de violencia intrafamiliar, Ana María Hernández dijo que "no necesariamente es darles un reconocimiento de legalidad a las relaciones fuera del matrimonio, sino reconocer que la violencia intrafamiliar también se puede ejercer contra otro tipo de personas que no necesariamente tienen un vínculo legal. Lo que les preocupa a los grupos conservadores es la legalización de un relación no aceptada socialmente, pero que de todas maneras existe y donde la violencia también se ejerce".

Fecundación asistida

Hernández agregó que al oponerse a la fecundación asistida, Ancifem, Pro Vida y la Red Familia pretenden negar a las mujeres solteras la posibilidad de recurrir a estos avances científicos en los casos de que no deseen casarse pero sí tener hijos.

Orfe Castillo dijo que en el fondo estos grupos quieren hacer una contrarreforma al Código Civil en este punto porque "intentan seguir sometiendo a las mujeres a un régimen institucional como es el matrimonio, que finalmente tiene muchas limitaciones para el desarrollo personal, profesional y afectivo, y reafirmar que la familia sólo debe ser nuclear: padre, madre, hijos y donde la mujer está restringida en su desarrollo y capacidades, situación con lo que por supuesto estamos en contra", concluyó.