LUNES 10 DE JULIO DE 2000
* Compiten Madrazo Pintado, Labastida Ochoa, Bartlett Díaz y varias corrientes
Cinco grupos buscan hacerse del timón priísta
* La tormenta de movimientos amenaza con hacer naufragar la nave del partido tricolor
José Gil Olmos * A una semana de que el presidente Ernesto Zedillo dejó el liderazgo natural en el PRI, tras el revés del 2 de julio, se ha observado que hasta el momento cinco grandes grupos intentan tomar el timón de la nave priísta en medio de la tormenta de movimientos: Roberto Madrazo y un grupo de gobernadores del sureste; Francisco Labastida y su equipo; el ex secretario de Gobernación, Manuel Bartlett; diversos grupos y corrientes ųentre ellas la Corriente Democrática, Democracia Nueva y Críticaų, y un conjunto de personajes y agrupaciones que aún falta por mostrarse entre los cuales estaría el grupo Atlacomulco.
Durante la semana pasada, en la disputa por apoderarse del Revolucionario Institucional, otros personajes también aparecieron en el escenario, como los ex gobernadores de Hidalgo, Jesús Murillo Karam, y de Sonora, Manlio Fabio Beltrones, así como el veracruzano Gustavo Carvajal Moreno, pero quienes más empujan son los madracistas y labastidistas con la intención de manejar la agenda para la 18 Asamblea Nacional a efectuarse, previsiblemente, el 20 de noviembre próximo.
El ''salinismo'', principal beneficiado, considera la Corriente Crítica
En medio de la disputa, los de la Corriente Crítica aseguran que el ''salinismo'' será el principal beneficiado, porque le apostó a Vicente Fox y a la caída del PRI, del que ahora se quiere apoderar a través del tabasqueño Madrazo.
Dolidos por la derrota, Fausto Félix y Juan Carlos Grajeda, dirigentes de dicha corriente, sostienen que los ''salinistas'' son los más fuertes para apoderarse del partido tricolor, porque además de apoyar a Fox y a Madrazo, estuvieron en contra del presidente Ernesto Zedillo, de Francisco Labastida, y ahora con la derrota tienen el camino libre, allanado.
Desde temprano, el lunes 3 de julio los primeros grupos se manifestaron por retomar las riendas del priísmo y sustituir a Dulce María Sauri Riancho de la presidencia, y todo el equipo labastidista del Comité Ejecutivo Nacional (CEN). El primero en hacerlo fue Murillo Karam ųaunque después lo negóų al solicitar un cambio en la directiva.
Al día siguiente ųluego de una reunión de los gobernadores priístas con el presidente Zedilloų emergió a escena la principal corriente que busca la directiva priísta, la de Roberto Madrazo, encabezada por los oaxaqueños José Murat y Ulises Ruiz, y apoyados por el sinaloense Juan S. Millán, el yucateco Víctor Cervera y el campechano José Antonio González Curi, quienes exigieron la salida de Sauri y los labastidistas.
Ayer, en una nueva carta, insistieron en convocar a una sesión extraordinaria del Consejo Político Nacional ųencabezada por Emilio Gamboa, uno de los principales colaboradores de Labastidaų para elegir a una directiva provisional. Asimismo, elegir a los coordinadores parlamentarios y definir las alianzas. En resumen, los ''amigos de Madrazo'' intentan preparar terreno para la próxima sucesión, dentro de seis años.
Como en el proceso interno para la elección del candidato madracistas y labastidistas volvieron a confrontarse. Sauri Riancho y el dream team se reagruparon después de que varios gobernadores ofrecieron su respaldo para que continuaran al frente del CEN, hasta que se efectúe la 18 Asamblea Nacional.
Reforma o refundación, el dilema
Para atajar las intenciones de los madracistas, desde el miércoles pasado los labastidistas iniciaron los trabajos para integrar una comisión especial que se encargaría de agendar los temas y los tiempos de la reforma o ''refundación'' del PRI. El pleno del equipo de campaña y algunos gobernadores ųcomo el de Guerrero, René Juárez Cisnerosų lanzaron la iniciativa de hacer a Francisco Labastida Ochoa el ''líder moral'' para restructurar al PRI.
Su intención es hacer valer los más de 13 millones de votos que el sinaloense consiguió en el proceso electoral y tomarlos como punta de lanza para mantener la directiva nacional del tricolor. Sin embargo, para los madracistas esto significaría poner en manos de un ''derrotado'' el futuro del Revolucionario Institucional.
Manuel Bartlett asomó sus posibles intenciones de participar en la directiva luego de hacer severas críticas al presidente Zedillo, de quien dijo ha dejado de ser el líder nato del tricolor. No ha expresado abiertamente su deseo por encabezar a su partido, pero entre los círculos priístas ya se le menciona como el líder fuerte que necesitarán como partido de oposición frente a un gobierno de derecha.
En medio de la disputa, también salieron a relucir algunos de los movimientos que durante años han sido marginados de la vida interna del PRI. Fausto Félix, coordinador nacional de la Corriente Democrática, presentó ayer un documento de siete puntos dirigido al CEN en el cual demandan la salida de Sauri Riancho, un presidente interino y la integración de una ''comisión de transición'' en la que estén incluidas todas las organizaciones representativas del partido.
Aunque no intentan llegar a la directiva, sí piden un espacio de participación en lugar de los ''priístas de la vieja guardia''. Inclusive, solicitan que éstos, por estrategia, ya no den la cara ante la opinión pública y se impulse a los nuevos cuadros.
Tres ejes principales proponen para hacer del PRI ''un partido de ciudadanos: hacer de la democracia la práctica común en la toma de decisiones; desaparecer los sectores popular, campesino y obrero ''para convertirnos en un partido de organizaciones'', y la eliminación de las ''etiquetas ideológicas'' para retomar los principios que le dieron origen como partido.
Los polleros también se hacen oír
En tanto, otras agrupaciones que poco se conocen, como Democracia 2000, Fuerza Indígena Nuevo Milenio, Coalición de Ferrocarrileros y hasta la Alianza Nacional-Internacional de Detallistas de Pollo, también se lanzaron con un comunicado conjunto exigiendo la elección democrática de la directiva nacional del PRI, la renuncia de la actual y la aplicación de una auditoría.
Esta semana, según señalaron algunos miembros del Comité Ejecutivo Nacional, se podrían presentar más grupos con la idea de encabezar la ''refundación'' del PRI. Sin embargo, ya quedó en claro que la batalla por el timón ya se la disputan viejos y nuevos priístas, tecnócratas y políticos de la vieja usanza, labastidistas y madracistas.