LUNES 10 DE JULIO DE 2000

Ť Una lucha con las autoridades, antes que con la empresa


La buena voluntad del GDF se topó con los criterios de Pascoe: Téllez

Ť La fiesta de toros, sumida en la anarquía Ť Por evitar problemas, éstos se multiplicaron

Lumbrera Chico Ť "Desde el principio de su gestión en el Gobierno del Distrito Federal (GDF), Cuauhtémoc Cárdenas marcó lineamientos en lo referente al espectáculo taurino: hacer cumplir lo dispuesto en el reglamento vigente. Incluso consideró que en la composición de la anterior Comisión Taurina del DF no estaba representada la afición del tendido, por lo que propició la creación de una comisión más incluyente y representativa de esa afición, sin que el ingeniero preguntara por la filiación política de los integrantes de la nueva comisión ni menos exigiera que fuesen miembros del PRD. Simplemente pidió que fueran auténticos representantes de los aficionados y espectadores".

Habla Julio Téllez, actual presidente de la Comisión Taurina del DF, órgano de consulta y apoyo del jefe de GDF, y conductor del decano mundial de los programas taurinos por televisión, Toros y toreros, que en infame horario trasmite los domingos el canal Once.

-ƑQué sucedió entonces con los buenos propósitos del jefe de Gobierno capitalino en materia taurina?

-Por lo que se refiere a la comisión, quiero pensar que tal vez hubo el escrúpulo por parte de algunos miembros de que se les identificara como perredistas sin serlo. Por otra parte, está la cultura política mexicana de la mediatización de conciencias y de opinión, de no actuar por temor a la reprimenda y a la censura. De esta manera, la ciudadanía perdió capacidad de ser y de actuar, incluso en los toros, donde su manifestación más ruidosa es la indiferencia.

-Si Cuauhtémoc -añade el también economista por el IPN- fijó como línea observar la ley y vigilar su aplicación, lo demás ya no fue responsabilidad directa suya, sino de quienes estaban en la delegación Benito Juárez, encargada de operar esta política taurina, así como de cuidar la observancia del reglamento por parte de la empresa de la Plaza México. Ahora, desde la primera cita que los miembros de la Comisión Taurina tuvimos con el delegado perredista Ricardo Pascoe Pierce, supimos que nuestra lucha no iba a ser con el empresario, sino con las autoridades encargadas de meter a éste en cintura.

Funcionarios volubles

-Pero al principio la Benito Juárez actuó con energía y ordenó realizar en la UNAM los exámenes post mortem de las reses lidiadas, Ƒno?

carton toros -Cierto. Al principio, con el entusiasmo del que comienza, las autoridades delegacionales fueron congruentes con la línea fijada por el jefe de Gobierno de la ciudad, confrontando incluso a la empresa y haciendo públicos los resultados de esos exámenes, que mostraron la falta de edad reglamentaria en las reses. Sin embargo, al poco tiempo, la delegación acabó poniéndose al servicio de la empresa, otorgándole incluso una licencia para dar corridas de toros después de haber comprobado los innumerables ilícitos cometidos por aquélla, y dándole toda clase de facilidades. Repito: primero hubo congruencia, después temor y finalmente estrecha colaboración de la autoridad con los criterios de la empresa de la Plaza México.

-Hay una larga lista -abunda Téllez- de comunicados, protestas, peticiones y sugerencias de la Comisión Taurina que nunca fueron atendidas por la delegación Benito Juárez, en cuyos funcionarios percibí una nula preocupación por defender los intereses del público. Entre otros puntos, nunca han sido confiables los exámenes post mortem por la falta de un equipo calificado de veterinarios, nunca se ha cumplido el reglamento en cuanto al registro de contratos de matadores y ganaderías para autorizar las temporadas grandes, nunca se pensó en el público al autorizar a la empresa aumentos desorbitados en los precios, por lo general sin corresponder a la categoría de los festejos, y otras muchísimas contravenciones que nunca han tenido la sanción correspondiente.

-ƑA qué atribuir esta actitud de las autoridades?

-Supongo que a querer llevar la fiesta en paz sin causar más problemas al manejo del buen gobierno, pero todo resultó al revés y los problemas se han multiplicado. La gente dejó de asistir al espectáculo y, a la vez, dejó de votar por Pascoe Pierce, candidato del PRD a delegado en Benito Juárez después de haber ocupado el cargo hasta hace pocos meses. En los demás sectores, de una actitud inicial de franca rebeldía en la que exigían la autorregulación de la fiesta, acabaron reconociendo que si existía un reglamento había que cumplirlo, no así el empresario de la Plaza México que, apoyado por la delegación Benito Juárez, veía toros con cuatro años donde había novillotes despuntados.

-ƑSe puede hacer algo en serio a favor de la fiesta?

-Nosotros hemos buscado la discreción, que no la inacción, por lo que seguiremos trabajando con el mismo cariño y compromiso por la fiesta de toros con el nuevo jefe de Gobierno perredista y el delegado electo panista en Benito Juárez. ƑCómo? Tomando en cuenta que tenemos algo en común: la ley, que no ve partidos ni credos. Si López Obrador insta a recuperar la fe en la autoridad, yo añadiría recuperar la esperanza en la legalidad de nuestra vida comunitaria, incluido el hoy degradado espectáculo taurino.