DOMINGO 9 DE JULIO DE 2000
Ť El espectáculo es una amalgama de música y canto en vivo con danza
Trazos de nostalgia, una invocación al pasado para celebrar el porvenir
Ť Tomo al mambo y el danzón como inspiración para desarrollar un discurso fresco: Cecilia Lugo
Ť Lila Downs: se dan matices apegados al jazz y el blues en temas casi míticos, como Bésame mucho
Angel Vargas Ť En Trazos de nostalgia, la danza de Cecilia Lugo y el canto de Lila Downs se sincretizan en una invocación escénica que transmuta la remembranza en una celebración del porvenir.
Estrenado en el reciente XVI Festival del Centro Histórico de la Ciudad de México, este espectáculo dancístico fue concebido con un doble propósito: despedir al segundo milenio y dar la bienvenida al tercero.
Luego de esa primera presentación, ha sido montado varias ocasiones más en diversas regiones de la República, pero con la salvedad de que la coreógrafa y la cantante lo han hecho por su propia cuenta. Compromisos de índole laboral no les habían permitido coincidir otra vez. Y así, la primera lo presentaba con música grabada y la segunda sólo con el acompañamiento coreográfico de una pareja de bailarines.
Las circunstancias reúnen de nuevo a este par de artistas y la obra volverá a tener este domingo 9 la magia de su estreno: la amalgama entre la música y el canto en vivo con la estética dinámica de una agrupación dancística. La cita es en el Foro Lindbergh (Sonora y México, colonia Condesa), a las 13 horas.
Directora de la compañía Contempodanza, Cecilia Lugo platica que su creación conjuga la nostalgia y la contemporaneidad tanto a nivel dancístico como sonoro, al ofrecer una síntesis del repertorio musical popular de la última centuria con arreglos nuevos.
"La idea fue recuperar lo más escuchado en el transcurso del siglo. Son piezas representativas de diversas épocas y que todavía son las consentidas de la gente; están el corazón del pueblo de México. Las cantaron los abuelos, los padres y nosotros. Quizá las nuevas generaciones no las ubiquen del todo. Aún así, son melodías que están en este siglo y que las llevamos al que viene", explica.
"Soy melancólica, tremendamente nostálgica. Con Trazos de nostalgia trato de llevar ese gusto, ese placer por las épocas y la música pasadas. Es una forma de entrar al siglo con una sonrisa, pero también con una añoranza de lo vivido, de lo que se lleva puesto en el corazón. Porque esas melodías son hitos en el corazón, algo que traemos siempre con nosotros. No se trata de anclarse al pasado, sino de caminar a través de él con dirección al futuro".
Acerca del discurso escénico, la coreógrafa apunta que se retoman elementos tradicionales del baile para reinventarlos en un propuesta contemporánea, de la cual se encargan nueve bailarines, aunque originalmente fueron 12.
"No bailo ni mambo ni danzón, porque el lenguaje tradicional de esos géneros me rebasa. No pretendo competir con ellos, sino que los tomo como inspiración para desarrollar un discurso fresco. No hay una gran historia, simplemente se trata de un discurso amoroso que, mediante las melodías, va tejiendo historias particulares de varias parejas; sus encuentros y desencuentros", apunta Cecilia Lugo, quien estrenará a mediados de agosto un espéctaculo basado en la obra Espejo de linces, del poeta chiapaneco Oscar Oliva, en la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario.
Recién llegada de una gira por Estados Unidos, Lila Downs destaca los arreglos musicales de esos temas casi míticos de la tradición popular que se utilizan en Trazos de nostalgia, como Bésame mucho, Quinto patio, La Malagueña, Un poco más, Estrellita y Almendra, entre otros. Especifica que se les imprimió matices apegados al jazz y al blues.
La cantante mixteca-estadunidense realizó un disco compacto de edición limitada con las piezas utilizadas en la coreografía de Lugo, cuyo título es Trazos. Entre sus planes próximos destacan sus presentaciones en la Expo Mundial de Hannover a finales de julio, así como la grabación de su álbum Border, cuya temática es la migración. Incluirá canciones en inglés, español y hasta una cumbia en maya.
Allende lo musical, Lila tiene una breve participación escénica en Trazos de nostalgia, la cual se presentará los fines de semana siguientes a éste en algunas de las delegaciones políticas del DF. Cabe precisar que sólo la de este domingo será con música y voz en vivo.