SABADO 8 DE JULIO DE 2000
* El senador Porfirio Camarena exige respeto a los derechos laborales
La CTM revisará la alianza obrera con el Ejecutivo
Andrea Becerril * El movimiento obrero no refrendará la alianza que mantuvo durante décadas con el PRI; lo que debe hacerse es replantear "una nueva forma de diálogo político" con el gobierno que encabezará Vicente Fox a partir del primero de diciembre, basada en el respeto absoluto a los derechos de los trabajadores y sus conquistas laborales, advirtió el senador cetemista Porfirio Camarena Castro.
"Sabemos quién llega al poder, eso no lo podemos desconocer"; por ello, tanto la CTM como las demás centrales y sindicatos del país tienen que estar preparados para enfrentar una embestida contra los trabajadores y sus organizaciones, toda vez que "las derechas siempre han tenido la intención de debilitar e incluso desaparecer al sindicalismo".
Agregó que ayer mismo se publicaron declaraciones del dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena, en las que alude a la oportunidad de modificar la Ley Federal del Trabajo. "Quiere decir que están pensando en rescatar el proyecto de reforma laboral que está en el Senado, que es absolutamente antisindical, contrapuesto a los intereses y las conquistas de los trabajadores".
El sector obrero, añadió, tiene el deber de reafirmar sus posturas de lucha, "hasta que el nuevo gobierno demuestre en la práctica que respetará los derechos de las mayorías trabajadoras del país".
Cuestionado por la postura inicial del dirigente de la CTM, Leonardo Rodríguez Alcaine, el legislador sostuvo que no significó en forma alguna pactar con Fox y que la postura inicial de la central es asumir la defensa "de sus intereses históricos".
Dijo que la directiva sindical sabe perfectamente quién llega al poder. "Eso no lo podemos desconocer, sería ingenuo pensar que arriba una fuerza social suficientemente representativa de un interés superior, como lo es la justicia para los trabajadores. Sabemos perfectamente que esos no son sus intereses, sabemos dónde está el origen del PAN y de la ideología que anima al candidato que ganó la Presidencia". Consecuentemente, "tenemos que estar muy bien preparados, revisar las estrategias del movimiento obrero, sobre todo las de la unidad", pero con la certeza de que la tradicional alianza con el gobierno "no se refrendará".
Y no lo harán, explicó, porque esa alianza tan criticada "surge primero con el gobierno revolucionario, cuya fuente histórica es el gran pacto de la Casa del Obrero Mundial con el gobierno de Carranza, después se dan compromisos ya con el PRI y hoy que llega al poder un candidato que no es del mismo origen, la relación debe replantearse". En lugar de alianza con el gobierno foxista, lo que se hará es replantear las formas de diálogo político, en un marco de "respeto a la legislación laboral en todos sus niveles y sobre todo, respeto a las aspiraciones de los trabajadores".