LUNES 3 DE JULIO DE 2000

* En las casillas especiales, la carencia de material


La falta de boletas causó al menos 10 bloqueos en el DF

* Ciudadanos quemaron propaganda y credenciales de elector

bloqueo-electores-jpg Alma E. Muñoz, Gustavo Castillo, Angélica Enciso y Karina Avilés * Ante el limitado número de boletas en las casillas especiales que se instalaron en el Distrito Federal, ciudadanos de diversos puntos del país realizaron por lo menos diez bloqueos de avenidas, así como manifestaciones y confrontaciones; además, quemaron propaganda y credenciales para votar.

Los inconformes exigían al Instituto Federal Electoral (IFE): "Ni madres, que me den mi boleta, yo quiero el cambio".

En el resto de los centros de votación, los comicios se desarrollaron sin incidentes graves. Desde antes de las 8 de la mañana se observó una gran afluencia de ciudadanos. No obstante, en la mayoría de las 11 mil 131 casillas hubo retraso en la apertura por falta de mobiliario, funcionarios e instalaciones adecuadas. Pasadas las 9 horas, la votación se generalizó.

Los problemas en las casillas especiales empezaron alrededor del mediodía, cuando se evidenció que las 750 boletas entregadas a cada uno de los centros resultaron insuficientes. La gran afluencia de personas rebasó la oferta.

Centenares de ciudadanos se quedaron sin emitir su voto y, de manera casi simultánea, se realizaron diversas manifestaciones de inconformidad.

Casi a la una de la tarde, cuando sólo quedaban unas 300 boletas para la elección federal, en las filas había más de 500 personas. Los presidentes de casilla repartieron pedazos de papel numerados, lo que incendió los ánimos de quienes no alcanzaron a sufragar.

En el aeropuerto capitalino se anunció a última hora que se instalaría una casilla especial, pero los representantes del IFE no se presentaron, lo que provocó que unos 200 concurrentes a la terminal, azuzados por Víctor Franco, enlistaran sus nombres y número de folio de credencial de elector "para presentarlas" ante las autoridades competentes "como protesta porque no se nos deja ejercer un derecho".

Desde las 6 de la mañana, indicó un funcionario del aeropuerto que pidió no ser identificado, se esperaba la instalación de la casilla 5501, pero sólo para votaciones relacionadas con los comicios locales; "nunca se nos informó que habría una casilla especial federal".

Cuando se aseveró que únicamente se votaría para elegir a representantes locales, los manifestantes se opusieron a la instalación y, ante los sucesos, los funcionarios electorales se retiraron del lugar.

Observadores electorales tomaron nota de los hechos, y uno de ellos, Alejandro Olivieri Bernal, de Ecuador, consideró que en ese lugar se evidenció "una falta de eficiencia porque no se ha cumplido por lo menos en esta casilla con el compromiso del voto". De los hechos se informó a la agente del Ministerio Público Federal Mirna Ríos y al notario público 83.

En distintas partes de la capital, donde se ubicaron las especiales, los ciudadanos tardaron hasta cuatro horas para sufragar. Por ejemplo, en la Terminal de Autobuses del Sur, la fila alcanzó 800 personas. Para entonces, alrededor de 50 por ciento de las boletas ya habían sido cruzadas.

Por los hechos, a los funcionarios de casilla se les exigió levantar un acta y acudir al IFE por más papelería, lo cual resultó infructuoso.

Al paso del tiempo, las protestas subieron de tono. Las inconformidades se fueron generalizando. A las 15 horas el primer bloqueo ocurrió en avenida Cuauhtémoc y Luis Pasteur, donde unas cien personas exigían su derecho al voto.

Como en cascada fueron sucediéndose las inconformidades. A la hora del cierre de casillas ya había bloqueos en por lo menos tres vialidades importantes. En el centro ubicado en Eje 8 Sur y avenida Rojo Gómez, cerca de 200 personas se metieron violentamente al inmueble, ante la imposibilidad de emitir su sufragio.

En Viaducto Tlalpan, a la altura del Metro Xola, unos 150 ciudadanos quemaron propaganda, consistente en pendones, carteles y banderines, especialmente del tricolor.

Situaciones similares ocurrieron en Félix Cuevas, a un costado del hospital 20 de Noviembre; en Churubusco y División del Norte ųfrente a la Alberca Olímpicaų; en Montevideo e Insurgentes ųdonde los manifestantes cerraron la arteria con un camiónų; en Plaza San Jacinto, en San Angel; en Periférico, a la altura de Santa Mónica; en Miramontes y Las Bombas; en Río Mamba, en la colonia Juárez.

En el Zócalo capitalino, en la casilla especial, a pocos minutos de su instalación, comenzó a haber problemas cuando unos 500 electores, al ver que no alcanzarían las boletas, empezaron a gritar y empujarse. Agentes de la Secretaría de Seguridad Pública intervinieron para calmar los ánimos durante unas horas.

Casi a las 6:30 de la tarde, los ánimos se encendieron. Un grupo comenzó a emitir vivas al candidato de la Alianza por el Cambio, Vicente Fox. Los policías aparecieron nuevamente pero para resguardar a los funcionarios electorales y las urnas.

Los jaloneos fueron creciendo. Algunos reporteros trepados en una mesa de casilla se cayeron, ya que sus movimientos provocaron que se venciera. Los elementos de seguridad cercaron el lugar y tuvieron algunos roces con los inconformes. Estos les comenzaron a lanzar botellas de plástico. Varias personas quemaron credenciales, propaganda y gorras del candidato del PRI, Francisco Labastida Ochoa.

"šQueremos un juego limpio, arriba la oposición! šLabastida: déjanos votar! šEl pueblo despertó, queremos el cambio!", gritaban molestos.

Desde el inicio de la jornada, el interés por participar en los comicios se hizo manifiesto. Algunos electores externaron que ya era tiempo para la transformación democrática del país. "Confío en el proceso. Creo que ahora sí será respetado mi voto", señaló Carlos Quintero. Otros más coincidían en la importancia por alcanzar una transición. "Vengo a votar porque ya estoy cansado del PRI", señaló el señor Luis Martínez.

Tranquilidad en las básicas

En las casillas básicas que se instalaron en el Distrito Federal se detectaron como problemas, falta de funcionarios, espacios pequeños para sufragar y retraso en el inicio de la jornada.

Por ejemplo, en la casilla 4325, localizada junto a la estación del Metro Eugenia, la movilidad de los electores se vio casi reducida porque el local resultó estrecho para cuatro mesas, cuatro mamparas y ocho urnas.

Entre las irregularidades observadas durante el proceso, se encontró que en dos mamparas de la casilla 4295 se escribió el nombre de los candidatos del PRI y del PAN a la Presidencia de la República.

María Angela Hermosillo alertó a los funcionarios electorales acerca del hecho: "No es justo que en este momento se hagan estos llamados porque cada ciudadano tiene que decidir por sí solo por quién votar".

En la casilla 3068, en la delegación Magdalena Contreras, hubo un enfrentamiento entre el representante de la Alianza por México y el señor Alfredo Gallegos Aguilar, ya que éste pretendió votar con una credencial cuya fotografía no correspondía a su aspecto físico. Gallegos fue puesto a disposición de la agencia 25 del Ministerio Público.

También en la casilla especial 1482, localizada en Fortuna y Río Bamba, unas 500 personas del interior del país, que se encontraban de paso en la ciudad de México, se quedaron sin votar.

En protesta, bloquearon la circulación vehicular en la avenida Insurgentes Norte durante más de tres horas. La protesta terminó cuando el delegado en Gustavo A. Madero, Víctor Manuel Quintana, medió con los manifestantes y les proporcionó un microbús del servicio público para que los llevara al IFE a manifestar su inconformidad.

Los ciudadanos manifestaron que los funcionarios de casilla nunca les proporcionaron información ni les dieron las boletas electorales, a pesar de que muchos de ellos llegaron a tratar de sufragar desde las 11 horas y hasta las 20:35 ningún representante del IFE se presentó para darles alguna explicación.

Al lugar del bloqueo se presentaron unos 150 elementos del Agrupamiento Vial y uno de ellos, se denunció, manoseó a una menor de edad que se encontraba entre el grupo de manifestantes, lo que provocó manotazos por parte de las personas que se encontraban ahí. El delegado Quintana ordenó el repliegue de los elementos policiacos para evitar que la situación se agravara.

Las protestas que ayer se presentaron no trascendieron más allá de los bloqueos a las vialidades y los mítines de inconformidad. El IFE no hizo eco a la exigencia de más boletas para los electores en tránsito, ya que la ley así lo estipula.