MIERCOLES 28 DE JUNIO DE 2000

* Ponderó la ''hazaña'' educativa nacional


Reciben a Zedillo en Ecatepec entre vivas al PRD y a Fox

* Destaca logros de su administración en política social

Rosa Elvira Vargas, enviada, Ecatepec, México, 27 de junio * Silbidos y rechiflas aisladas, vivas al PRD y gritos esporádicos de ''presidente Fox, šya ganamos!'', se escucharon durante el arribo, la lectura del mensaje y la despedida del presidente Ernesto Zedillo en la ceremonia con la que el Infonavit celebró la entrega de su crédito número 2 millones.

Al mandatario le interesaba hoy, sobremanera, decir que durante este gobierno cada día se ha financiado la construcción de más de 600 viviendas en promedio, y que el 40 por ciento de esos créditos que ha otorgado el Infonavit ha sido entregado durante la actual administración federal. Pero también quiso destacar otros aspectos de la política social vigente.

Eso alargó el discurso, y de pronto, de entre la multitud de seis mil personas convocadas, empezaron a escucharse algunos silbidos similares a los que se lanzan en un partido de futbol cuando a los aficionados les entra el apremio por el silbatazo final del árbitro.

Ciertamente, desde el momento en que el mandatario llegó a la explanada de la unidad habitacional ''Los héroes de Ecatepec'', se oyeron abucheos y gritos directos de reprobación al gobernador mexiquense Arturo Montiel y otros al propio Zedillo. La heterogeneidad del auditorio ųtrabajadores del Infonavit y colonos ecatepenses, entre otrosų era evidente, y por lo mismo resultaron inútiles las explicaciones que para justificar lo obvio tejieron más tarde los voceros presidenciales.

Pero el único que al parecer no se inmutó por el incidente fue el propio Jefe del Ejecutivo. Mantuvo su determinación de ponderar que esta administración ha creado más opciones de educación superior que ningún otro gobierno; que al terminar este año, 99 de cada cien mexicanos tendrán acceso a los servicios básicos de salud y que en este sexenio 18 millones más se han incorporado a los servicios médicos, se han construido 192 hospitales y más de tres mil cien clínicas y centros de salud.

De ese modo, Zedillo consideraba importante exponer ahí que si bien el campo ''desgraciadamente'' sigue siendo el lugar con los mayores índices de pobreza, se ha instrumentado para ello el programa Progresa, que atiende a tres de cuatro familias en situación de miseria. En su discurso habló de la Alianza para el Campo, pasó al tema de la electrificación y justo ahí, cuando ya los silbidos eran más que audibles, el mandatario dio un giro a su mensaje.

Habló entonces de unidad, del trabajo y la voluntad de los mexicanos para alcanzar las metas trazadas. Elogió con frases cortas y en forma breve la madurez democrática del país y exhortó a continuar en pos de los avances nacionales con respeto, civilidad y ''con esta democracia que es nuestra y que nadie nos va a quitar''.

A su salida, y como es habitual entre la gente que ha escuchado del propio Presidente decir que este es su municipio favorito, que lo adoptó como su ''segunda casa'', la gente se arremolinó para saludarlo, para hacerle solicitudes, pedirle fotos, presentarle a sus hijos.

Atrás, Leonardo Rodríguez Alcaine, líder obrero, y el obispo Onésimo Cepeda concedían entrevistas. Caminando con dificultad entre los apretujones, hacia lo propio el secretario de Hacienda, José Angel Gurría, insistiendo en que ''todo está bien'' y que la devaluación del peso, el nerviosismo de los mercados y demás manifestaciones de alteración financiera no son motivo de preocupación, porque la economía marcha bien.

Más adelante, en Jilotepec, el mandatario inauguró un Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos, donde ejemplificó con su propia experiencia de juventud las dificultades que había antes para acceder a la educación media superior. Hace como 34, 35 años ų''šuf!, no había nacido ni tu papá'', dijo dirigiéndose a la estudiante que le había dado la bienvenida al plantelų ''me tuve que trasladar más de 2 mil kilómetros para tener lugar en una escuela pública''.

Entonces, continuó, ''el que quería estudiar universidad tenía que separarse de su familia... yo salí de mi casa a los 14 años tuve que separarme de mi familia, de mis padres, de mis hermanos, porque no tenía posibilidad de estudiar en el lugar donde viví, donde crecí. Tuve que trasladarme esos más de dos mil kilómetros para luchar por un sitio en una escuela pública, en un bachillerato público''.

Antes de partir, el Presidente ponderó la ''hazaña'' educativa nacional y más tarde, en Villa Victoria, en la inauguración de una maquiladora, elogió al gobernador Montiel como promotor de la inversión productiva y a los industriales como creadores de empleo.

Por último, en Toluca, Zedillo inauguró el recinto fiscalizado de la empresa de mensajería Federal Express.