MIERCOLES 28 DE JUNIO DE 2000

PAGINA 9

* Lourdes Galaz *

Votos que sí cuentan

* Por lo menos tres millones de mexicanos vigilarán de cerca los comicios... el resto cuidará que su voto cuente... * Y, con todo, los electores condenados a sufragar por presuntos delincuentes... *

Hoy concluye el tiempo legal para hacer campañas políticas. Todo está listo para la jornada electoral del 2 de julio. Ni la logística del operativo electoral, ni la infraestructura y la papelería requerida para los comicios, ni la seguridad del sistema cibernético del IFE quitan el sueño a José Woldenberg, el presidente del consejo general del organismo que legal y socialmente es responsable de organizar, vigilar y ofrecer resultados de las elecciones. Y es que, como bien dice el maestro Woldenberg, la jornada eleccionaria próxima es el resultado de un proceso democratizador que comenzamos hace años en México, transitando de comicios prácticamente sin competencia que hacía el gobierno, a elecciones cada vez más competidas como las que tendremos el domingo. Es más, hay quienes afirman que el sistema electoral mexicano pasó a manos de la ciudadanía. Bueno, se presume la autonomía del IFE porque un consejo de ciudadanos, aceptados por mayoría en el Congreso (a propuesta de los partidos y con acuerdos tácitos con el gobierno) toma las decisiones en el instituto y, por lo mismo, se estima que la causa del IFE no esta alineada a la de un partido o coalición política... aunque, lo más interesante es que ahora sí --asegura el mismo Woldenberg-- en las 113 mil casillas de votación que se instalarán en todo el país, los 800 mil ciudadanos que fueron seleccionados para ser funcionarios de las mesas electorales dicen que lo serán por primera vez (jamás los había designado el gobierno ni sus partidos) y habrá un verdadero ejército de dos millones o más --muy seguramente-- de militantes políticos que representarán a los partidos y los candidatos en contienda. Por si fuera poco, más de 35 millones de electores iremos a las urnas y, además de votar, con toda seguridad que estaremos muy pendientes de que cuenta y se cuenta bien el sufragio que usamos para favorecer o castigar a un candidato y su grupo político, o bien para mostrar que razonadamente queremos la democracia.

Si socialmente existe la convicción de que vivimos un proceso eleccionario inédito en este país que setenta años ha sido gobernado por un mismo partido político, aunque sexenalmente se reciclen los grupos en el poder, la duda cabe -- o las dudas crecen-- en el electorado estas últimas semanas. Ya en la recta final de las campañas, la mercadotecnia, la propaganda, el debate en los medios de comunicación (más actores que nunca) cambian los escenarios, y los ciudadanos igual cambian la apreciación que tienen de los candidatos y las autoridades electorales. Más aún cuando las tácticas de los contendientes con mayores posibilidades de triunfo llevaron la acción política de la queja ante la autoridad electoral a las denuncias de presunción de delitos ante la barandilla del Ministerio Público. Y habrá qué ver lo que pasa y hasta dónde llegan. Por lo pronto, está abierta la averiguación en la PGR contra los hermanos Fox Quesada por presunto lavado de dinero, y en el IFE está la queja que presentó el PRI por presumibles transferencias financieras ilegales a la campaña de Vicente Fox. Estos pendientes quedarán para después del 2 de julio: la justicia en la PGR es lo que usted quiera, menos expedita. Y en el IFE, el trámite de fiscalización de los fondos de campañas lleva por lo menos 30 días...

Y para salvar en la honra, Vicente Fox anunció que hoy (último día para hacer propaganda dentro de la ley) presentará denuncias penales por difamación y calumnias contra sus adversarios Francisco Labastida y Cuauhtémoc Cárdenas. Lo menos que han dicho de su adversario es que es "un mentiroso antipatriota"... Aunque aceptaron que recibieron fondos del extranjero, también, los Amigos de Fox, con Lino Korrodi (el experto en ingeniería financiera), demandarán a priístas como Enrique Jackson por violación al secreto bancario, pues el diputado mostró copias de cheques y de transacciones financieras. Sin ser abogada, es obvio suponer que será difícil probar ese delito en los tribunales. En tod o caso, Korrodi y sus Amigos deberán denunciar a los bancos con los que hicieron las transacciones ilegales, puestas al descubierto por los diputados del PRI. Todavía habrá que ver si los diputados priístas deciden llevar el asunto hasta la Procuraduría de la República. Entre tanto, tal cúmulo de quejas y denuncias servirán a Fox y sus amigos, también a los adversarios por supuesto, para seguir en campaña fuera del plazo legal... Créalo o no, con estos litigios los indefensos electores ya estamos condenados a votar por puro presunto delincuente.

Y como bien dice Marco Rascón, el tiempo de los candidatos se acaba--afortunadamente-- el 2 de julio. Los políticos en contienda hicieron lo posible --y lo imposible-- por ganar la elección. Ahora vienen los tiempos de los partidos. Y serán las directivas, los aparatos partidistas, los que impugnen o acepten con todo los resultados electorales. Ciertamente la clase política mexicana (que está en todos los partidos, no únicamente en el PRI) sabe cómo hacer las cosas, sobre todo si los candidatos que postularon tienen poco o casi nada en común con la alta burocracia y los grupos de poder partidistas... Los litigios pendientes quedarán en manos de las burocracias de los partidos. Habrá qué ver si continúan o se desisten de las denuncias. Un ejemplo: Si resulta perdedor el candidato de la Alianza por el Cambio, muy seguramente las denuncias por el financiamiento presumiblemente ilegal de la campaña de Vicente Fox irán al baúl de las concertacesiones del PAN. Los panistas tradicionales no se juegan la vida de 60 años de Acción Nacional en un día de elección. Y para el equipo y los asesores de Fox lo más cómodo será acusar de traidor al PAN y retirarse a su casa... Si gana Fox la elección, la clase política hará lo conducente: una buena concertacesión ... ƑAlguien piensa que las denuncias relacionadas con el financiamiento ilícito a la campaña foxista y contra Labastida y Cárdenas van a prosperar?...Con todo, los votos cuentan.