MARTES 27 DE JUNIO DE 2000

* EH no participó


Marcha silenciosa contra el atentado de ETA en Getxo

Armando G. Tejeda, corresponsal, Madrid, 26 de junio * Miles de habitantes de la ciudad de Getxo hicieron una manifestación silenciosa en protesta por el atentado con coche-bomba que estalló la madrugada del domingo pasado en un lujoso barrio de esa localidad vasca, aunque sin provocar víctimas.

La marcha, convocada por todas las facciones políticas del Ayuntamiento, con excepción de Euskal Herritarrok (EH, marca electoral de Herri Batasuna, considerada brazo político de ETA), estuvo encabezada por el alcalde nacionalista Iñaki Zarraoa, quien fue abucheado por el contingente.

Aunque EH integra la coalición de gobierno en el ayuntamiento de Getxo junto con el Partido Nacionalista Vasco (PNV, en el gobierno regional), y Eusko Alkartasuna (EA), se abstuvo de suscribir la declaración de condena por el atentado ocurrido en el barrio Las Arenas.

Desde que ETA anunció a fines del año pasado la suspensión de una tregua unilateral de 14 meses, han ocurrido cinco atentados; en el último no hubo víctimas, pues el grupo armado alertó sobre la inminente explosión en una llamada al diario Gara.

Javier Balza, responsable de Interior en el País Vasco, señaló que se desconoce qué comando perpetró la acción, si bien apuntó que ETA cuenta con infraestructura en las provincias de Vizcaya, Guipúzcoa y Alava.

Desde Pekín, el presidente del gobierno español, el conservador José María Aznar, criticó nuevamente el Pacto de Lizarra, un foro abierto formado por partidos políticos, agentes sociales y sindicatos de vocación nacionalista. Aznar insistió en que en el País Vasco hay una "necesidad de cambios profundos y serios en la vida política", en referencia a unas hipotéticas elecciones anticipadas que Madrid ha venido exigiendo desde la ruptura de la tregua de ETA.

En tanto, el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, consideró que ETA ha actuado como "las organizaciones mafiosas" al "intimidar a distintos sectores de la sociedad"; en tanto, el diario La Vangaurdia refirió que el atentado de Getxo pudo haber sido ejecutado para intimidar a una acaudalada familia que no pagó por el rescate de un secuestro en 1996.

Por último, en el Congreso local vasco, los diputados del PP y del PSOE abandonaron el pleno cuando se votaba una iniciativa del PNV a favor de los derechos carcelarios y penitenciarios de los presos vascos, dispersos en cárceles de España y Francia, y una de las reivindicaciones mas emblemáticas del movimiento nacionalista, el radical y el moderado.

A juicio del PP y del PSOE, los nacionalistas se "preocupan más por los verdugos que por las víctimas".

En esta polémica sesión el vocero de EH José Goirizelaia criticó "la política penitenciaria desarrollada por el PP", y pidió una aplicación igualitaria de la ley general correspondiente, al exigir el acercamiento de los presos a cárceles cercanas a sus casas y la salida de prisión de aquellos que hayan cumplido tres cuartas partes de su condena, tal y como lo establece la citada ley.