JUEVES 22 DE JUNIO DE 2000

* Alrededor de 2.5 millones de personas han usado algún enervante: especialistas

En cinco años aumentó 40% el consumo de drogas en el país

* México se ubica entre los 18 países con mayores niveles de uso de estupefacientes en el mundo

* La creación de una dependencia para prevenir y tratar adicciones, insuficiente: investigadores

Angeles Cruz * El consumo de drogas en México aumentó 40 por ciento en cinco años. A la fecha, hay alrededor de dos millones y medio de personas que alguna vez en su vida han usado algún tipo de enervante, y "existe un riesgo real de que esta cifra aumente", principalmente entre la población adolescente, afirman investigadores del tema.

Información de los Centros de Integración Juvenil (CIJ) apunta que 87 por ciento de los pacientes atendidos en sus unidades en los últimos 10 años, reportaron haber iniciado el uso de drogas entre los 10 y los 18 años de edad.

Ante el incremento de este problema de salud pública, la Secretaría de Salud afina ųen medio de un gran hermetismoų los detalles de lo que será la nueva institución responsable de la prevención y tratamiento de las adicciones. Al frente de lo que hoy todavía se llama Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic), ya se encuentra Ernesto Enríquez, quien desde el pasado martes ocupa la oficina principal de esta dependencia, que dejó libre la maestra Haydeé Rosovsky, el 15 de junio.

María Elena Medina Mora, jefa de la División de Investigaciones Epidemiológicas y Sociales del Instituto Mexicano de Psiquiatría, consideró, en entrevista, que el principal obstáculo a vencer ųen materia de prevenciónų es la disponibilidad de las drogas a la que están expuestos principalmente los jóvenes.

Aun cuando los niveles de consumo en México son muy bajos con respecto a los que se registran en Estados Unidos, por ejemplo, el problema es que en los últimos años el uso de drogas se incrementó sensiblemente, explicó la especialista, y enseguida señaló que esto se debe a la falta de control del narcotráfico.

La demanda de drogas en el país se mantuvo con tasas bajas durante varios años, pero de repente comenzó a haber una mayor disponibilidad de enervantes en el mercado al menudeo, aparecieron drogas más peligrosas, en tanto, la respuesta de las autoridades se mantuvo sin modificaciones, indicó Medina Mora.

Al referirse a lo que la nueva dependencia debería plantearse como objetivos prioritarios, la investigadora mencionó la coordinación de esfuerzos, hasta ahora dispersos, así como el ofrecer los mejores tratamientos de rehabilitación.

De acuerdo con información de los CIJ y la Encuesta Nacional de Adicciones 1998, México está entre los 18 países con mayores niveles de consumo de drogas. En mariguana ocupa el lugar 14 y en cocaína está en el 10.

Entre 1993 y 1998, años en que se levantaron sendas encuestas nacionales, el número de usuarios de drogas ilícitas, por lo menos alguna vez en la vida, pasó de 1.5 millones a 2.5 millones. En 1998, poco más de cinco de cada 100 personas entre 12 y 65 años de edad estuvieron en esta situación.

Además de un incremento en la magnitud del fenómeno, se observó la ocurrencia de importantes cambios en su forma, indicativos de una creciente complejidad y de un probable proceso de "transición epidemiológica" que exigiría el desarrollo de atención más efectiva y de una amplia y coordinada participación de los sectores público, privado y social, señala un documento de los CIJ.

Las estadísticas señalan que el grupo más afectado es el de los hombres entre 18 y 34 años de edad, pues constituyen 15.61 por ciento del total (cerca de 1.3 millones de usuarios). Entre los menores de 18 años, el porcentaje se ubicó en 3.57.

A nivel nacional, la prevalencia de consumo de drogas ilícitas fue de 5.27 por ciento; sin embargo, en ciudades como Tijuana llega a 14.73 por ciento; en Ciudad Juárez, 9.23 por ciento; en Guadalajara, 7.5 por ciento, y en la ciudad de México, 7.28 por ciento.

Comisionado nacional para la prevención y tratamiento de adicciones

El martes pasado, Roberto Tapia, subsecretario de Prevención y Control de Enfermedades, presentó a Enríquez, quien tendrá el cargo de comisionado nacional, con los funcionarios y empleados de Conadic. Hasta ese momento los trabajadores no habían sido informados de los cambios que se realizarían. "Lo único que sabemos ųcomentaronų es lo que se publicó en los periódicos", cuando el secretario de Salud, José Antonio González Fernández, hizo el anuncio de la nueva dependencia durante la tercera Reunión Binacional México-Estados Unidos sobre Reducción de la Demanda de Drogas, en Phoenix, Arizona.

Durante más de 20 años, Enríquez se ha desempeñado como vicepresidente del patronato de los CIJ, por lo que su experiencia y conocimiento en materia de adicciones es reconocida por funcionarios e investigadores. Hasta la semana pasada, Enríquez ocupó el cargo de procurador nacional de la Defensa del Trabajo. Dentro de la administración pública, también ha sido oficial mayor de Agricultura, subsecretario de Ganadería y Agricultura; subsecretario en Trabajo y Previsión Social, entre otros.

Algunos investigadores consideraron que la creación de una nueva instancia ųcon el mismo nivel jerárquico de una subsecretaría de Estadoų es positiva, aunque "se quedó corta y no servirá de mucho" si no dispone de la estructura y los recursos económicos necesarios para su funcionamiento.

Estas dudas serán despejadas el próximo lunes, cuando el presidente Ernesto Zedillo haga el anuncio oficial sobre la dependencia y la designación de Enríquez al frente de la misma, durante la ceremonia en la que se conmemorará el Día Internacional contra el Uso Indebido y Tráfico Ilícito de Drogas.

Hasta ahora, los CIJ se han encargado de la atención de pacientes y el Conadic ha sido la instancia normativa en el área de adicciones, pero sin duda, comentaron fuentes de la Ssa, los resultados no han sido satisfactorios y más bien "hay enojo en el más alto nivel (de la Presidencia, incluso) porque el problema no ha podido controlarse".

De ahí que se haya decidido crear una nueva figura con capacidad para coordinar las acciones de prevención y control entre las diferentes dependencias involucradas: la Ssa, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Procuraduría General de la República (PGR).

Debido a que el Conadic tiene un nivel jerárquico menor, la Ssa tendrá que presentar a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público la propuesta de creación de la nueva dependencia y solicitar los recursos económicos necesarios para su operación.

Entre sus actividades, la nueva dependencia se encargará de supervisar el cumplimiento de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 028 para la prevención, tratamiento y control de las adicciones, cuya versión final se publicará en breve en el Diario Oficial de la Federación, y la cual establece los principios y criterios en materia de prevención, detección temprana, referencia de casos, tratamiento, investigación, vigilancia epidemiológica, seguimiento y evaluación, capacitación y enseñanza, así como de los derechos de los usuarios.

De la aplicación de la NOM, la autoridad sanitaria espera conseguir una mejoría en la calidad de atención de todos los sectores, e indirectamente, una reducción en la incidencia de las adicciones, así como una reducción en la morbilidad y mortalidad asociadas al uso y abuso de sustancias.