JUEVES 22 DE JUNIO DE 2000
* Antorchistas interfirieron su gira en Iztapalapa
Trabajadores impidieron una agresión a Rosario Robles
* Los manifestantes eran encabezados por la lideresa Celia Torres
Laura Gómez Flores * La presencia de alrededor de 200 integrantes de Antorcha Popular, armados con palos y piedras, provocó que la jefa de Gobierno del Distrito Federal, Rosario Robles Berlanga, acortara su gira de trabajo por la delegación Iztapalapa, donde señaló que la realización y entrega de obras no está condicionada al voto de nadie.
El arribo de los manifestantes, encabezados por Celia Torres y Stanislao López, a la explanada de la demarcación fue detenido momentáneamente en la calle de Victoria, por más de cien trabajadores, que portaban cascos color naranja y maderos en la mano, lo cual exacerbó los ánimos.
Al grito de "šRamón Sosamontes, amarra a tus perros!", y "šEste es un gobierno represor!", los inconformes se abalanzaron contra los empleados de la delegación, quienes se encontraban apostados en el lugar desde las 7 horas, con un saldo de siete funcionarios lesionados, entre ellos Saúl Torres Maya, subdelegado de Participación Ciudadana.
La acción protagonizada por el grupo priísta fue calificada por el delegado como un "claro acto de provocación y una forma de presionar a las autoridades para obtener apoyos con fines partidistas, sobre todo cuando se les ofreció atender sus demandas en una reunión programada a las 13 horas", 20 minutos después de que aparecieron en el escenario.
Exhortó a las organizaciones sociales y partidos políticos a utilizar el diálogo y no la violencia como vía de solución a sus demandas, y reiteró que no permitirá acciones que pongan en riesgo la tranquilidad de los iztapalapenses antes, durante y después del proceso electoral del 2 de julio.
Luego de confirmar la presencia de la mandataria capitalina en la explanada de la delegación, donde develó una placa en la estatua de Cuitláhuac, "señor de Iztapalapa, cuando llegaron los conquistadores españoles a nuestro país", la mandataria iba a presenciar unas danzas prehispánicas cuando el contingente encabezado por Celia Torres marchó hacia donde estaba en una actitud beligerante.
Las peticiones del subdelegado de Participación Ciudadana y el coordinador de Seguridad Pública, Pedro Velázquez, de exponer sus demandas sin recurrir a las agresiones físicas o al bloqueo vehicular resultaron infructuosas y los antorchistas se abrieron paso con banderas de mango de madera.
La situación obligó a Rosario Robles a abordar su camioneta y abandonar el lugar en unos segundos. Cuando los manifestantes se percataron de su ausencia realizaron un mitin y bloquearon las calles de Aldama y Ayuntamiento, bajo la vigilancia de los empleados de la delegación, que, en su mayoría, hacen labores de bacheo y pavimentación, según comentaron en entrevistas por separado.
A través de un comunicado, la delegación rechazó que haya contratado "golpeadores" para reprimir la marcha de Antorcha Popular y aclaró que sólo estuvieron en el lugar dos unidades de la Secretaría de Seguridad Pública, que protegieron la integridad física de los asistentes, así como una docena de funcionarios y algunos trabajadores.
La mandataria inició su gira con la entrega de una estación de policía en la colonia Ampliación Emiliano Zapata, donde 105 elementos recién egresados del Instituto Técnico de Formación Policial de la SSP, divididos en tres turnos y apoyados con 15 patrullas, estarán al servicio de 80 mil habitantes. La obra, con un costo de 850 mil pesos, propiciará la seguridad de los habitantes de 28 colonias de la sierra de Santa Catarina.
Posteriormente, en la inauguración del corredor ecológico ubicado en avenida de Las Torres, con una inversión de 400 mil pesos, Robles Berlanga reconoció que los rezagos que presenta la delegación no se pueden abatir en dos años y medio, pese a que el mayor monto de recursos para las demarcaciones se concentró en esta zona, pues datan de hace varias décadas.
Sin embargo, confió en que el esfuerzo de cambio iniciado en 1997 evitará que la ciudad sea nuevamente un botín para unos cuantos, y permita consolidar el objetivo democrático de mayores espacios para los partidos políticos.
Se comprometió a trabajar hasta el último día de su gestión en la solución de las demandas de la población, sin que ello represente un condicionamiento del voto el 2 de julio. "Su dinero se lo estamos regresando en obras, sin coacciones, sino con plena libertad de conciencia", afirmó.