DOMINGO 18 DE JUNIO DE 2000

Ť La revolución espiritual de Madero Ť

A continuación presentamos dos textos inéditos de las sesiones espiritistas de Francisco I. Madero:

Buena Vista, junio 14/901

Muy querido hermano:

Realmente quería hablar contigo para recomendarte varias cosas a fin de que tu adelanto moral sea realmente un hecho positivo.

Primero creo que todas las tardes debías estar en tu casa en San Pedro de 5 a 6 de la tarde, a fin de que socorrieras a todos los que te van a buscar. No temas nunca ser engañado por algún espíritu cuando te preguntes si realmente necesitan algo los que se dirigen a ti. Ya te he dicho que siempre estoy pendiente de ti y siempre que me evoques con un buen fin, sobre todo el de instruirte, instruir a los demás a traer la caridad, siempre estoy presente y soy quien te contesto. Puedes exponerte a ser engañado cuando sin elevar tu espíritu a Dios evocas a la ligera a mí, pues entonces no siempre estoy advertido de tu evocación porque Dios para castigarte de la falta de respeto hacia El y al mismo tiempo para probar que nada se puede hacer sin El, no me avisa, no tomes al pie de la letra esto pues no es que me avise, sino que me hace sentir que me evocas por medio de ciertos fluidos que son los que nos sirven a los espíritus desencarnados para entendernos a grandes distancias.

foto- MADERO Si con gusto te digo quiénes son los verdaderamente necesitados y quiénes no necesitan nada, es porque de ese modo soy para ti un auxiliar poderosísimo para ayudarte a hacer cuanto bien puedas. Si dejara que te engañaran los que vienen a pedirte socorro, resultaría que con la mejor buena voluntad y sin poderlo evitar, propagarías el vicio de la pereza en vez de hacer bien y muchas personas verdaderamente necesitadas no podrían ni acercarse a ti de tanta gente que habría cerca de ti

Es bueno que te empapes de la idea que nosotros venimos a comunicarnos con ustedes para ayudarles a que adelanten moralmente y al mismo tiempo nos servimos de ustedes y de su adelantamiento moral e intelectual, como instrumento para hacer el bien más adelante a personas a quienes más lo necesitan. Eso es provechoso para ustedes y también para nosotros.

Otra cosa que quiero recomendarte es que sigas empeñosamente en que no se vaya a disolver el círculo espírita, no te desanimes por nada. Invita como tenías pensado a don Luis de la O. Y a Modesto Hernández para que ingresen en el círculo y serán otros tantos elementos de estabilidad.

Aquí estoy aún. La tercera cosa que te quiero decir es que te levantes siempre un poco más temprano, para que con tu ejemplo acciones a todos y les hagas sentir menos su condición de subalternos. También tendrá eso la ventaja de que seguirás ejercitándote en dominar a la materia cual debe ser la mira principal.

Ahora estoy dispuesto a contestar a tu pregunta. La Nux. Tomando como te dije 2 o 3 glóbulos en seco todos los días de 5 a 6 de la tarde. Sigue este tratamiento por espacio de 8 días pues casi estoy seguro de que sanarás por completo.

Es bueno que todo lo que te pasa y te apena lo compares con los goces eternos que tendrás al desencarnarte, si acaso logras llevar todas las vicisitudes de la vida con calma y hasta con indiferencia. Es bueno que en cada acto de tu vida tengas siempre presente a Dios, a la vida eterna, y verás cómo todo te parece pequeño.

Raúl

San Pedro, noviembre 16/908

Queridísimo hermano:

Hace tiempo le ofrecí que al estar usted en buenas condiciones vendría a hablar con usted.

Ahora está usted en las condiciones deseadas y puesto que sus ocupaciones le han dejado un pequeño momento libre, lo apresuro para hablar con usted, cosa que hacía mucho tiempo deseaba.

Principiaré felicitándolo muy cordialmente por los triunfos que ha obtenido sobre usted, los cuales lo ponen en condiciones de emprender con éxito la obra colosal de restablecer la libertad de México.

Ardua es esa empresa, pero usted está a la altura de la situación para llevarla felizmente a cima.

El triunfo de usted va a ser brillantísimo y de consecuencias incalculables para nuestro querido México. Su libro va a ser furor por toda la República, como una corriente eléctrica que va a impresionar fuerte y profundamente a todos los espíritus, les va a dar una poderosa sacudida que los sacará del letargo donde están sumidos.

La obra consecutiva será de importancia suma pero la verdad es que todo descansa sobre la poderosa impresión que va a causar su libro.

Ya le hemos dicho que al General Díaz le va a causar una impresión tremenda, le va a infundir verdadero pánico y su pánico paralizará o desviará todos sus esfuerzos.

Usted ha de comprender que si trajo esa misión habíamos acordado desde antes que usted viniera al mundo con los medios necesarios para que la lleve a cabo con éxito.

Para este objeto hace tiempo que estamos trabajando y preparando todo, y ahora ya están los espíritus preparados, ya nomás falta la poderosa corriente eléctrica que producirá su libro, para entrar en actividad. Para que obtenga un resultado completo exponga todo su plan, inclusive la parte que ha de tener Coahuila en la fraguación a fin de que levante el entusiasmo de los coahuilenses y prepare la República a fin de que cuando ustedes la inviten formalmente por una proclama ya estén organizados muchos clubes y los espíritus bien preparados.

Yo creo a usted no le conviene otra táctica que el ataque de frente, leal y vigoroso. Con esa fuerza irresistible de la sinceridad atraerá usted a su derredor todos los elementos sanos del país.

Ya sabe usted que así como para el odio hay que oponer amor asimismo para la mentira hay que oponer la verdad y para la hipocresía la sinceridad, la franqueza.

Con estas fuerzas paralizará por completo las del enemigo que sólo son poderosas y pueden actuar en un medio semejante a ellas en un medio en que encuentran afinidad.

Usted tiene que combatir un hombre astuto, falso, hipócrita. Pues ya sabe cuáles son las antítesis que debe proponerle: contra astucia, lealtad; contra falsedad, sinceridad; contra hipocresía, franqueza.

Tenga usted una fe inquebrantable de la justicia de su causa, en la seguridad de que cumple con un deber sagrado y serán tan poderosas las fuerzas que se aglomerarán a su derredor que mucho le facilitarán su empresa y le permitirán prestar a su patria inmensos servicios.

Con gusto volveré a hablar con usted cuando me llame, pues formo parte del grupo de espíritus que le rodean, lo ayudan, lo guían para llevar a feliz coronamiento la obra que ha emprendido.

Que nuestro Padre Celestial derrame sobre su cabeza sus tesoros de amor y de bondad.

B.J.