JUEVES 15 DE JUNIO DE 2000
* Amores perros se estrenó con todo el glamour en el teatro Metropólitan
Diálogo y tolerancia evitarán que el país se fragilice: Arriaga Jordán
* La alusión a Marcos es un juego para vincular a la guerrilla con las injusticias irresueltas, dice
* El filme busca que nos preguntemos quiénes somos como seres humanos, afirma el guionista
Mónica Mateos * Martes 13 de junio: exactamente un mes después de su estreno en el Festival Internacional de Cine de Cannes, Francia, la película Amores perros llega a su terruño, la ciudad de México. Arribó con premio bajo el brazo y una agresiva campaña publicitaria de lanzamiento que la pone, este verano, al tú por tú con cintas como Misión: Imposible 2, así como con el glamour suficiente para convocar a todo tipo de adictos a los reflectores y al voyeurismo de pasarela. La cinta dirigida por Alejandro González Iñárritu se tornó, durante la noche de su estreno para la prensa en la capital mexicana, espejo poliédrico que dejó a cada quien con el sabor de alma y el apretón de vísceras que quiso ųo pudoų atrapar.
Reincorporar a los grupos indígenas
Nadie deseó perderse la función de gala del filme ganador del Gran Premio de la Semana de la Crítica de Cannes, efectuada en el teatro Metropólitan. Ni los 60 minutos de estar viendo desfilar stars, actores y varias decenas de desconocidos por la alfombra roja de rigor, ni la proyección de casi tres horas de esa obra cinematográfica, cuyo guión fue escrito por Guillermo Arriaga Jordán que, entre anécdotas del corazón y otros demonios, hace infinidad de referencias, concretas o sutiles, de situaciones críticas de la realidad nacional como la ''guerrilla" zapatista.
''ƑEl personaje de El Chivo, interpretado por Emilio Echevarría, es tu alusión a Marcos?", se le pregunta al guionista, quien se desprende de abrazos y besos de felicitación para responder: ''Es una referencia un poco de juego porque la película está vinculada a lo que es el país actual. En este sentido, la tradición de la guerrilla no empezó con Marcos, ya tiene rato; lo cual significa que hay una injusticia que no se ha logrado solventar".
ųƑReivindicas el movimiento zapatista con ese personaje, de quien se dice en una escena de la cinta que ''cuando fue guerrillero, hace 20 años, sí era un verdadero hijo de la chingada, nada que ver con el actual EZLN''?
ųClaro. Creo que Marcos y el EZLN nos abrieron los ojos a una serie de situaciones. Espero que el problema de Chiapas y el de todas las etnias del país se resuelva ya. Hay que regresar a los grupos indígenas a la realidad mexicana, incorporarlos, con respeto absoluto a lo que ellos son.
ųƑPretendes una reflexión acerca de los dos momentos históricos que ha vivido la lucha armada clandestina al hacer mención en Amores perros de los guerrilleros de los años setenta en comparación con los actuales?
ųMira, pertenezco a una generación que siente profunda tristeza e incluso culpa porque no ayudó a trasformar radicalmente al país. Experimentamos la sensación de la necesidad de cambiar al mundo y nos vimos tentados por fuerzas que pretendían ese cambio. Pero no siempre se tiene el valor y la convicción de hacerlo, entonces, queda la idea de ''Ƒy si yo hubiera podido?". Por eso, el personaje de El Chivo refleja preocupaciones que en algún momento pensé. Es un hombre que luego de la caída del muro de Berlín pierde todo, hasta el sentido de la utopía.
''En este mundo de tanto pragmatismo y de tanta dureza económica es importante plantear nuevos proyectos sociales, pues no podemos quedarnos sin ellos. La globalización y el neoliberalismo no son la solución al problema de la humanidad, al contrario, están ahondando las diferencias y tenemos que buscar nuestra identidad lo más pronto posible. Por ello, pretendo que esta película abra el diálogo para que nos preguntemos no sólo quiénes somos como mexicanos, quiénes somos como sociedad o como país, sino quiénes somos como seres humanos.''
De perspectivas y prismas
''En Amores perros están ausentes los padres, pues de alguna manera la autoridad se ha perdido y desaparece el poder para dar paso a un sistema más vertical y autoritario. Debemos recuperar el sentido de fraternidad. Esta película no es más que una metáfora de Caín contra Caín, pues en el país vivimos una especie de guerra civil que se refleja lo mismo en la inseguridad que en casos como la masacre de Acteal. Entonces, es importante que rediseñemos nuestra identidad como país y como seres humanos.
ųƑPodrías esbozar una observación global de este buen momento que vive el cine mexicano?
ųQuiero reiterar que somos un país que necesita verse, desde diferentes perspectivas y prismas. Es necesario que haya filmes que cubran todas esas perspectivas, como Sexo, pudor y lágrimas, Todo el poder, La ley de Herodes, En el país de no pasa nada y, ahora, Amores perros. El cine nacional tiene que cubrir todas las facetas de lo que somos como país. Amores perros abre la posibilidad de un cine más arriesgado, más comprometido, más vinculado con los problemas humanos y sociales. Y en este punto quiero decir que la iniciativa privada está ayudando mucho a fortalecer la industria fílmica. Por ejemplo, Altavista Films lo hizo sin miedo.
''El cine mexicano necesita historias que nos ayuden a entender cuál es nuestra problemática como país, de cara a las elecciones que se advierten muy complicadas; es un momento en el que necesitamos dialogar muchísimo y ser tolerantes. El respeto tiene que ser la tónica social. No podemos dejar que se fragilice este país, tenemos que hacer un nuevo contrato social.
''En este sentido, el cine y la literatura son los medios a través de los que podemos empezar ese proceso. Amores perros es una película difícil y arriesgada, no sólo en cuestiones formales sino también temáticas. Sin embargo, el cine actual ya no puede ser un mero acto cultural, tiene que implicar reflexión y recuperación económica", concluyó el creador.
Desbanalizar la muerte y la violencia
Amores perros se estrena mañana en 231 salas con lo cual, por vez primera, una producción mexicana se pone ''al tú por tú" con las majors hollywoodenses en cuanto a lanzamientos veraniegos.
Martha Sosa, productora ejecutiva del largometraje avalado por su triunfo en Cannes, consideró, en conferencia de prensa, que la cinta confirmará que ''la libertad creativa también es un negocio que redituará, principalmente, en la llegada de más historias y más directores" que entusiasmen al público como este filme dirigido por Alejandro González Iñárritu y fotografiado por Rodrigo Prieto (ganador de la Concha de Plata en el Festival Internacional de Cine de San Sebastián 1998, por su trabajo en Un embrujo, de Carlos Carrera).
Amores perros tuvo un costo de producción de 20 millones de pesos, cantidad que en los próximos meses, además de recuperarse, se multiplicará debido a que la película fue ya comprada para ser exhibida en más de 10 países.
Altavista Films confió en esta ''historia arriesgada'', pues pretende buscar y producir argumentos que interesen, principalmente, al público hispano; forma parte de la Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE), que pertenece al conglomerado comercial y de telecomunicaciones Sinca Inbursa-Grupo Carso.
Convencidos de que el público mexicano ya no necesita ''películas de evasión", esa especie de dream team en el que se ha convertido el grupo de actores que hizo posible la realización de Amores perros, que comanda González Iñárritu, apoyó los comentarios del director en el sentido de que la cinta ''pretende desbanalizar la muerte y la violencia en la pantalla, y hacer patente que lo importante es el ser humano". (Mónica Mateos)