MIERCOLES 7 DE JUNIO DE 2000
Ť De Lara habla de En el país de no pasa nada, filme que estrenará el día 9
La caricatura que somos impide advertir cuán inmersos estamos en la corrupción
Ť ''Me propuse retratar ese cinismo casi adolescente que pueden tener los políticos mexicanos''
Ť No se trata de una historia panfletaria ni de puño en alto, señala la egresada del CUEC
Mónica Mateos Ť En el país de no pasa nada, película dirigida por María del Carmen de Lara, se estrena este viernes en cines comerciales como parte de una involuntaria pero afortunada trilogía. Por la anécdota que narra, se suma a La ley de Herodes y Todo el poder. Ahora, la corrupción cotidiana se aborda sin solemnidades, con un tratamiento de comedia ligera.
''Es una caricatura política", asegura De Lara, cineasta egresada del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), con dos décadas de trabajo en la realización de videos y documentales que denuncian diferentes problemáticas sociales que enfrentan las mujeres.
''Llevo mucho tiempo filmando temas que para mí son muy dolorosos, entonces, En el país... fue un gran reto; traté de reunir esa formación que se va adquiriendo al leer, por ejemplo, todos los lunes la columna Por mi madre bohemios, de Carlos Monsiváis, así como la preocupación social y una propuesta que contara una historia y me hiciera crecer en el plano profesional", agrega la directora de Nosotras también (1994).
Inspirada por el quehacer escénico de Julio Castillo y Jesusa Rodríguez, María del Carmen se dio a la tarea (con Laura Sosa) de escribir un guión en el que mediante el humor se retratara ''la caricatura que somos todos los días, pues nos educamos y deformamos tanto en el priísmo que de pronto ya no advertimos que estamos inmersos en la dinámica de la corrupción".
Retrato del cinismo de los políticos
Protagonizada por Julieta Egurrola y Fernando Luján, En el país de no pasa nada cuenta la historia de una acaudalada mujer que vive en un mundo de fantasías, ya que se manda hacer videorrealidades, en donde ella es la heroína. En una ocasión recibe un video con escenas de la realidad que nunca ha querido enfrentar: la infidelidad de su marido, un importante político, inmiscuido en diversos fraudes, quien es secuestrado por una pareja que necesita el dinero para pagar las placas de su taxi.
El presupuesto del filme fue de un millón 200 mil dólares y refleja ''que todos somos corruptos, a la manera de la carpa, del trabajo que hacían Manuel Medel o Mario Moreno Cantinflas. Tocamos los contrastes de la ciudad de México. De alguna manera mi trabajo documental y los años de estar metida en historias sociales hizo posible que retratara ese cinismo casi adolescente que pueden tener los políticos mexicanos".
-ƑCuáles son los riesgos de abordar en cine la comedia?
-En este caso, fue difícil a nivel de tiempo y tono actoral. Tuve terror porque fue un trabajo muy fragmentado. Fueron 35 días de filmación, con 34 locaciones y 70 personas trabajando alrededor. Esa planeación previa y el control que debe haber durante el rodaje se transformaron en la preocupación de buscar cómo enlazar a los personajes y que toda la experiencia actoral no se botara, que se mantuviera una unidad. No es una historia panfletaria ni de puño en alto, tampoco se trataba de abordar los conflictos del país desgarrándonos las vestiduras, sino de retomar el género de la comedia, al estilo de Joaquín Pardavé.
-En 20 años de trabajo, Ƒpodrías definir cuál es tu estilo o la huella digital que procuras dejar en tus realizaciones?
-Las mujeres, porque creo en el buen sentido del feminismo. Busco contar historias que se refieran a este movimiento. Cuando el feminismo estuvo vinculado con una parte más interior de la mujer, cuando la bronca era más interior, hice Desde el cristal con que se mira (1984, Premio Nacional de la Juventud). La cinta No es por gusto (1982) fue contar la historia más allá de esa imagen que teníamos de las prostitutas en la época lopezportillista. A partir de que el feminismo se relacionó con movimientos sociales, filmé Costureras, que habla de ese tiempo en el que a las feministas nos cae el veinte de la importancia de participar del movimiento.
''Nosotras también (1994) es acerca de las mujeres y el sida, problema que hasta ese momento nadie había atendido. En el país de no pasa nada también tiene que ver con esa línea.''