MARTES 30 DE MAYO DE 2000

* Mi gobierno no sería botín de camarillas, dice


La disputa final será entre AN y Alianza por México: Cárdenas

* Campaña entre la población petrolera de Ciudad Madero

Juan Antonio Zúñiga, enviado, Cd. Madero, Tamps, 29 de mayo * Frente a lo que consideró como una "irremediable caída" del candidato priísta Francisco Labastida, Cuauhtémoc Cárdenas estimó que "la disputa final va a ser entre Acción Nacional y Alianza por México", y ante cerca de 6 mil habitantes de esta población petrolera, aseguró que en su gobierno "el país no será botín ni de camarillas sindicales ni de grupos financieros".

Antes de poner punto final al intercambio de señalamientos con Vicente Fox, Cárdenas subrayó que la actitud asumida por el panista, y sus ataques, "no son sino una muestra de desesperación", similar a la que prevalece en el candidato priísta, pero con la diferencia de que en este último caso las causas radican "en que su campaña no camina y se está cayendo fuertemente".

En estas tierras, asiento de la sección uno del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, el candidato presidencial de la Alianza por México recibió quejas y denuncias sobre la corrupción que priva en esta organización gremial, pero sobre todo por la licitación otorgada por Pemex para modernizar una planta refinadora, adjudicada a una firma coreana que impuso la condición de contratar exclusivamente a trabajadores de aquel país.

Esta situación no sólo es grave y refleja el fondo de las políticas aplicadas por el gobierno en general y, en particular en la industria petrolera, sino que ofende a esta población de trabajadores petroleros, gravemente afectada por el desempleo, puntualizó Cárdenas.

De acuerdo con cifras oficiales, de los 250 mil trabajadores petroleros de planta que laboraban en 1988, hoy sólo quedan 80 mil; y de los 250 mil eventuales, la cifra actual es menor a 20 mil, denunció el candidato a diputado de la Alianza por México, Joaquín Hernández Correa, hijo de quien fuera líder moral de este gremio, Joaquín Hernández Galicia.

Cuauhtémoc Cárdenas aclaró: "No estamos en contra de aprovechar los créditos externos, tampoco de la inversión extranjera, pero debemos hacerlo en condiciones que favorezcan al país y contribuyan a solucionar los grandes problemas sociales, como el desempleo".

Pero en este caso específico de la firma petrolera a la que se adjudicó la modernización de la refinería con trabajadores de aquel país, precisó que ese contrato será sometido a una exhaustiva revisión, porque no reúne las condiciones anteriores.

En esto, la responsabilidad de las autoridades deja ver claramente nula sensibilidad para atender las demandas y necesidades de la población. "Es contradictorio que tengamos necesidades de plazas de trabajo, y se admitan condicionamientos que impidan la contratación de trabajadores mexicanos", dijo, e indicó que sólo en este sexenio quedó insatisfecha la demanda de empleo de 3.5 millones de habitantes en edad y condiciones para trabajar.

Y en retrospectiva, subrayó que en el periodo presidencial de Miguel de la Madrid Hurtado a la fecha el crecimiento del desempleo ha sido exponencial, de tal manera que en la actualidad la mitad de la población económicamente activa labora en condiciones de subocupación, con muy bajos ingresos, sin protección social y ninguna de las prerrogativas que prevé la ley. "Estos son resultados completamente contradictorios", manifestó ante una multitud que se mostró cálida, receptiva, decidida, y que a doce años de la aprehensión de su líder moral, al inicio del gobierno de Carlos Salinas, aún demandó a gritos: "šLiberen a La Quina!".

Entre aclamaciones de "šCuauhtémoc, Cuauhtémoc!", con las que es recibido por todas partes, el candidato de la Alianza por México delineó la parte central de su propuesta sindical: organizaciones autónomas de la acción gubernamental, en las que nadie que no sean los trabajadores agremiados, metan las manos.

Pero aclaró, ante el oído atento de los manifestantes, que esto dependerá fundamentalmente de los trabajadores petroleros y de la decisión que tomen con su voto, el cual podrá dirigirse en favor de los candidatos de la Alianza por México aquí, al sur de Tamaulipas.

La población maderense aquí reunida coreó una consigna que también ha cobrado popularidad por todos los puntos del territorio nacional a los que ha llegado Cárdenas: "šNi Pancho ni Chente, Cuauhtémoc, Presidente!". Sobre todo cuando el candidato reiteró que, a diferencia de las elecciones de 1988, hoy se cuenta con una mayor capacidad de convocatoria, organización y movilización para responder a cualquier pretensión de alterar los resultados de los próximo comicios.

"Hoy no se puede caer ni callar el sistema. Sabemos que la ciudadanía que hoy llena las plazas, llenará las urnas en nuestro favor el próximo 2 de julio".