DOMINGO 28 DE MAYO DE 2000
Ť El Rodeo y Playa Tamarindo ofrecen conciertos a bajos costos
Los actos populares del Aca Fest, espacios para la lascivia y el coto
Ť Por 50 pesos, el público disfruta de hasta siete representantes de grupera, rock o pop
Jorge Caballero, enviado, Acapulco, Gro., 27 de mayo Ť Aunque los reporteros de la fuente se quejan de que Aca Fest 2000 "está bajo", "ya no es lo mismo" y "antes era mejor", los escenarios playeros Rodeo y Playa Tamarindo, donde se presentan grupos de música grupera, rock y pop, representan para los habitantes y los turistas dos espacios en los que pueden disfrutar de sus artistas favoritos en esos géneros.
El programa del Rodeo llega a incluir hasta siete grupos musicales. La entrada cuesta 50 pesos; una cerveza de lata, 20, y el refresco o el agua, 10. Este lugar resulta una especie de "cuna de hombres cabales", pues las botas, el sombrero, la camisa de cuadros, el cinturón de piel de víbora con hebilla aparatosa y el pantalón de mezclilla azul resultan aditamentos ornamentales básicos, aunque se puede prescindir de ellos, pues lo que se busca es levantar el polvo mediante el baile, claro, si el dios Tláloc se muestra tolerante con el espectáculo.
En el Rodeo se respira lascivia. Grupos de jóvenes gustosos del género acechan a sus equivalentes femeninos, que no les son ajenas del todo, lo que da como resultado un delicioso juego de fruición. Los que llevan a su chica, cuando no están bailando las prenden por el talle y se deshacen en invitaciones a una cerveza. El que va acompañado por dos mujeres resulta la envidia de todos. La mayoría de chicas preferiría bailar con alguna de las estrellas del escenario, pero eligen al anónimo más adecuado que se anime a sacarlas a la pista. Es el lugar que cierra más tarde.
"Todo está bien: los grupos que traen, el precio de la entrada, el trato de los cuerpos de seguridad... Lo que pasa es que ha llovido. Lo que sí es que la cerveza está un poquito cara", comenta el estudiante veinteañero Fredy Reyes echándose su sombrero negro tejano hacia atrás. "La verdad está barato porque son muchos grupos a los que puedes ver", menciona la joven Argelia, mientras ocho ojos se clavan en su rostro, espalda... y más abajito. Además, los balcones del hotel contiguo al predio hacen las veces de palcos, pero lejos tener un costo superior, la localidad en éstos es gratis.
En el escenario dedicado a la música pop y rock, Playa Tamarindo, el acceso es gratuito. Ahí el elenco es también variado (cuatro o cinco bandas) y constituye el templete más macizo de los escenarios populares. Las hostilidades se abren más temprano que el anterior entarimado, y resulta todo un fenómeno ver la comunión entre grupos y fanáticos. "Está padre que nos traigan a este tipo de grupos (El Tri, La Ley, La Gusana Ciega...), porque esos grupos casi no vienen y si lo llegan a hacer es muy difícil que toquen en un lugar barato'', expresa Toño, con su torso desnudo y adentrándose al slam dance playero que se está formando. "Este año están mejor los grupos. Me gustaría que trajeran a grupos de rock extranjeros, aunque cobraran por entrar", propone un insatisfecho Abel.
Los toquines aquí han estado de alto nivel, pero definitivamente los concentrados en el mosh pit son los que dirigen el concierto, los que le ponen la sal y la pimienta. Los más distantes también se prenden, pero tímidamente.
La seguridad se muestra tolerante con la banda: circula libremente la cerveza. Los cigarros se vuelven un objeto de primera necesidad después de una hora de concierto. El ligue no importa mucho, pues los jóvenes se centran en el espectáculo.
A los espectáculos musicales en este puerto se sumó la política. Ayer, los bares de la costera Miguel Alemán ofrecían hora feliz para ver el debate político entre los candidatos presidenciales de PRI, PAN y PRD. Oportunidad que muchos aprovecharon para darse una refrescada etílica, más allá de su interés político.
Convenio gobierno-Televisa
En conferencia con la prensa para evaluar el Aca Fest 2000, los productores Luis de Llano y Marco Flavio Cruz se mostraron satisfechos por el festival y dijeron que lo que se pretende es "convertirlo en el más importante del mundo''.
También se dio a conocer que el gobernador de la entidad, René Juárez Cisneros, y el presidente del grupo Televisa, Emilio Azcárraga Jean, firmaron anoche un convenio para la realización del festival del próximo año. Entre los principales factores que sustentan el refrendo de este compromiso destacan los beneficios de promoción turística internacional y la generación de empleos.
En la ceremonia, efectuada en la sede de la Promotora Turística de Guerrero, el mandatario estatal informó que parte de los ingresos de taquilla de este festival serán canalizados para apoyar el Programa de Vivienda Rural. Por su parte, Azcárraga Jean dijo que el compromiso de su empresa es seguir trabajando con las autoridades estatales para continuar consolidando este festival.