MIERCOLES 24 DE MAYO DE 2000

Ť Prevén conflictos


Temen inversionistas por el margen de victoria del 2 de julio

Reuters, Nueva York, 23 de mayo Ť A los inversionistas extranjeros no les importa quién gane las elecciones presidenciales de julio en México, pues las políticas económicas de los dos candidatos con mayores posibilidades son básicamente las mismas.

Sin embargo, los analistas están cada vez más preocupados sobre la posibilidad de que el margen de victoria sea tan estrecho que pueda conducir a discusiones sobre fraude electoral por parte del perdedor y a protestas sociales.

Walter Molano, de BCP Securities, en Greenwich, Connecticut, afirmó que ''la preocupación está empezando a arrastrarse en los mercados. La gente había descartado riesgos de la elección mexicana, pero eso va a resultar un error''.

Las reformas democráticas han permitido que crezca la oposición, la cual este 2 de julio tendrá su mayor oportunidad en siete décadas de derribar al PRI del poder. Según recientes encuestas, el candidato oficial, Francisco Labastida, parece estar en una competencia cerrada con su rival de centro derecha, Vicente Fox.

Analistas afirman que la maquinaria con la que cuenta el PRI para recaudar votos no debe ser subestimada. No obstante, es probable que el margen de victoria en la elección sea tan bajo que lo haga potencialmente vulnerable a alegatos de maniobras fraudulentas.

''Tememos que si Fox no acepta el resultado podría asustar a los inversionistas. Podría haber un periodo de inestabilidad'', advirtió el administrador de fondos de mercados emergentes de la firma T. Rowe Price, de Baltimore, Maryland, Mike Conelius. Agregó que esa volatilidad sería de corto plazo una vez que el resultado de la elección sea más claro.

''El margen de victoria para el ganador es más importante que quién sea el vencedor'', escribió el analista Carlos Perzalonso, en un reporte de ABN Amor. ''Creemos que cualquier victoria con una diferencia de menos de 4 puntos porcentuales será disputada por el perdedor''.

Los mercados ya están recibiendo golpes tras las fuertes subidas a principios de año. El índice clave de la bolsa mexicana ha retrocedido 20.66 por ciento desde enero.