MARTES 23 DE MAYO DE 2000
Ť El filme se ambientará en la ciudad de Medellín
Sumas y restas tocará el candente tema del narcotráfico
Reuters, Medellín, Colombia, 22 de mayo Ť El cineasta colombiano Víctor Gaviria, quien llevó en 1998 a Cannes La vendedora de rosas, está preparando una película sobre el narcotráfico, uno de los flagelos de este país de 40 millones de habitantes.
El proyecto, titulado Sumas y restas, es una historia ambientada en las últimas dos décadas en la nordestina ciudad de Medellín, considerada la más violenta del país y antigua sede del cártel de las drogas que dirigía el desaparecido narcotraficante Pablo Escobar.
Gaviria dijo en una entrevista con Reuters que Sumas y restas es una película que se basa en un tema tan importante y sobre todo tan difícil para Colombia como el narcotráfico y del que nunca antes se ha hecho una película o un largometraje.
Además de La vendedora de rosas, Gaviria tocó el tema de la violencia en Medellín en Rodrigo D, no futuro, la historia de dos jóvenes pistoleros a sueldo.
La vendedora de rosas ganó el premio a la mejor actuación femenina en el Festival Internacional de cine de Viña del Mar, Chile, en 1998.
Buscando dinero
A partir de 1986, el narcotráfico invadió Medellín, afectó la vida de sus habitantes y fue escenario de la confrontación entre temidos mafiosos liderados por Escobar, que declararon una guerra al gobierno en su lucha contra la extradición.
Poderosas pandillas armadas que se quedaron sin trabajo tras la muerte de Escobar en 1993, aún siembran el terror en los sectores más pobres de esta ciudad enclavada en la cordillera occidental de los Andenes colombianos, que sufre el mayor índice de desempleo urbano del país de 22.2 por ciento.
Gaviria explicó que aunque el guión del nuevo proyecto ya está listo, la producción avanza lentamente porque aún está juntando los 500 mil dólares que cuesta, de cuya suma el Estado sólo aporta una parte ínfima.
A diferencia de presupuestos estratosféricos de más de 100 millones de dólares por filme que se manejan en Hollywood, "es un calvario conseguir la financiación del proyecto... encontrar un productor en el país es imposible", dijo Gaviria.
Contó que buscará el dinero para Sumas y restas en entidades españolas que financian este tipo de proyectos y espera tener los fondos necesarios a más tardar en agosto para comenzar el rodaje en enero del próximo año.
Cruda violencia
"La forma de vida de esta gente que entró en esos negocios ha impactado a todos los colombianos y ha influido en la idea de la vida fácil que hoy se tiene", sostuvo Gaviria.
"La violencia es el tema principal de las películas porque nos vimos obligados a dar el testimonio de una época de narcotráfico y sicarios, de una ciudad violenta, indiferente, donde los muchachos están tirados en las calles", explicó el cineasta, al explicar el contenido de sus filmes.
Las producciones de Gaviria reflejan la realidad colombiana y muchos de los actores que han trabajado con él se han visto perseguidos hasta la muerte.
Casi todos los actores son jóvenes que integran pandillas, grupos de pistoleros a sueldo y consumidores de drogas, es decir "producto de la violencia", como el mismo Gaviria lo admite.
"Los actores de estas películas son personas que viven la violencia diariamente, que cuando han terminado de grabar continúan con su vida y la violencia sigue persiguiéndolos", aseguró.
El director explicó que aunque algunos de estos actores trataron de escapar de la violencia y quisieron corregir su vida, les cobraron los crímenes y errores que habían cometido y fueron asesinados por venganza en la calle.