MARTES 23 DE MAYO DE 2000
Ť La inexistencia de desequilibrios fortalece al peso, consideran analistas
La política monetaria contrarresta la volatilidad externa: Wall Street
Ť Mueven a la moneda mexicana la inestabilidad de los mercados internacionales y los comicios, opinan
Notimex, Nueva York, 22 de mayo Ť La disciplina y el manejo de la política monetaria de México contrarrestan la volatilidad externa, lo que sumado a la inexistencia de desequilibrios económicos fortalecen al peso frente al dólar, destacaron analistas de Wall Street.
"No existen desequilibrios fundamentales en la economía que sugieran un debilitamiento del peso frente al dólar", dijo el director de Mercados Emergentes de la firma Credit Suisse First Boston, Javier Murcio.
"De hecho -agregó-, la disciplina interna y el manejo responsable de la política monetaria del Banco de México contrarrestan la volatilidad externa".
Para el especialista, "dos fuerzas opuestas están moviendo al peso mexicano".
Por un lado, la inestabilidad de los mercados internacionales y el proceso electoral en México y, por otro, el alza sostenida de los precios del petróleo, dijo Murcio, quien descartó que otros factores distintos a los mencionados estén presionando al tipo de cambio.
"No existen desequilibrios fundamentales en la economía que sugieran un debilitamiento del peso frente al dólar. De hecho, la disciplina interna y el manejo responsable de la política monetaria del Banco de México contrarrestan la volatilidad externa", señaló.
Murcio estimó que "aunque el peso fluctúa en un rango relativamente estrecho, no está sobrevaluado", y destacó que "las elecciones no generarán presiones sobre el peso en la medida que el proceso sea tranquilo y predecible".
El especialista subrayó la reciente decisión del Banco de México de fortalecer la política monetaria mediante el aumento del "corto" de 180 a 200 millones de pesos.
La medida pretende aminorar el riesgo de que la intensificación de la restricción monetaria mundial genere un ajuste desordenado en los mercados internos, que deteriore las expectativas de inflación y la determinación de los precios de la economía.
Entre los factores que presionan a los mercados financieros internacionales, analistas de Wall Street citaron la reciente alza de las tasas de interés de referencia de Estados Unidos, en medio punto, para dejar la tasa principal en 6.50 por ciento.
A esto se han sumado las recientes evidencias de crecimiento sólido y sostenido de la economía estadunidense que, según economistas, dejan la puerta abierta a la Reserva Federal (Fed) para aplicar futuros incrementos de tasas, posiblemente en junio.
En la Bolsa de Valores de Nueva York, la percepción de que las acciones tecnológicas están sobrevaluadas y la expectativa de que tasas de interés más altas podrían mermar las ganancias corporativas se han manifestado en las bajas de sus principales índices.
Tasas de interés más altas podrían desacelerar el crecimiento económico de Estados Unidos y, como resultado, perjudicar las exportaciones de productos mexicanos hacia este país.
"La economía estadunidense va a resentir la reciente alza de las tasas de interés y podrían bajar las exportaciones de México a Estados Unidos", dijo el jefe de inversiones en América Latina de la firma Goldman Sachs, Jorge Mariscal.
Según Mariscal, "la reducción de los flujos de capitales que ingresan a México provocaría un ajuste del peso" que, desde su punto de vista, "está sobrevaluado entre 10 y 15 por ciento".
"El peso se puede debilitar de aquí a mediados de julio", expresó el experto, pero "luego se fortalecerá, para cerrar el año 2000 en las 9.80 unidades por dólar".
El viernes pasado el peso tipo interbancario spot para operaciones al mayoreo -48 horas- alcanzó las 9.64 unidades por dólar, su nivel más bajo en casi siete meses, para luego cerrar en las 9.59 unidades por dólar. En los últimos dos meses, el peso se ha depreciado en 4.8 por ciento.