DOMINGO 21 DE MAYO DE 2000

Ť Diablos Rojos es el primer semifinalista, con global de 9-0


Con despiadada goliza de 7-0, Toluca eliminó a Puebla

Marlene Santos A., enviada, Toluca, 20 de mayo Ť Toluca asestó una mayúscula paliza al Puebla al derrotarlo en La Bombonera por 7-0, para un global de 9-0 y es el primer semifinalista con la etiqueta de favorito al título. El resultado constituyó la más despiadada goleada que un equipo de Enrique Meza ha propinado a los dirigidos por Miguel Mejía Barón, quien con voz triste admitió que el Ojitos le tiene tomada la medida.

En los minutos finales el estadio era un manicomio. La afición toluqueña mostró una voracidad sin límites y tras el 4-0 exigió a coro: "šCinco-cinco!", luego pidió seis, y siete... Y el tiempo se agotó. Pero entre los últimos tres goles, en pleno éxtasis, la gente cantó Cielito lindo y El rey en medio de fuerte aguacero, mientras la porra Perra Brava saltaba enloquecida con los torsos desnudos.

El uruguayo Carlos María Morales fue el verdugo principal de los camoteros, pues a los dos goles anotados en el estadio Cuauhtémoc, hoy agregó tres, otros tres fueron del paraguayo José Saturnino Cardozo -quien dejó ir dos claros- y otro más de Víctor Ruiz.

El cotejo arrancó con pésimo futbol, con un Puebla haciendo amagues ofensivos, pero, en realidad, más ocupado en defenderse para evitar "la catástrofe", aunque sólo logró retardarla. Iván Kaviedes y Martín Ubaldi no lograron sacudirse la estrecha marcación de los zagueros locales.

Al minuto 32, Ubaldi tuvo una gran opción, iba a encarar al portero Hernán Cristante, pero tardó en sacar el tiro y permitió el cruce de Salvador Carmona. En ese momento, Meza se levantó de su banca, enojado empezó a ubicar a sus jugadores. Tres minutos después, Morales puso el 1-0, cuando Roberto Medina -improvisado como central- quiso despejar, el uruguayo le robó el esférico y fusiló al nervioso portero Alan Cruz.

toluca-puebla-2-jpg Mejía Barón ingresó para el complemento al delantero Luis Ortiz, pero al 47 el marcador ya era una losa con el 2-0 anotado por Cardozo, quien aprovechó un pésimo despeje de Cruz, y sólo tuvo que bombear el balón. Un par de minutos más tarde cayó el tercer tanto. Víctor Ruiz cobró un tiro de castigo, lo envió a segundo poste, donde con un cabezazo Cardozo picó el esférico.

Sergio Zárate entró al minuto 60 y cuatro más tarde Del Olmo por el recién ingresado Ortiz, movimientos tan confusos como inútiles porque la moral de los poblanos ya estaba por los suelos. A los 62, Morales peinó un centro remitido por Alberto Macías y clavó el 4-0.

Meza efectuó cambios de refresco: ingresó a José Manuel Abundis, Rafael García y Adán Núñez. Al 73, Abundis anotó un gol que fue anulado por supuesto fuera de lugar, pero un minuto después Cardozo hizo el quinto a pase del Chiquis García. Los cánticos festivos se combinaron con el aguacero estrellándose en el techo de lámina, y ya no cesaron por el resto del cotejo. La catástrofe tan temida por los poblanos estaba en pleno, y todavía tuvo su colofón con la expulsión de Roberto Medina (77') y otro par de goles.

Morales puso el 6-0 a pase de Cardozo, al minuto 83, y al 90, Víctor Ruiz cerró la cuenta con un tiro indirecto.

El Ratón Zárate dijo que el partido lo perdieron en Puebla "porque preferimos defender que atacar", aseguró que respetaba al técnico, aunque no compartiera sus ideas. "No hay excusa, perdimos contra el mejor equipo, en el segundo tiempo salimos por la dignidad, pero ni así...".

El odontólogo pidió disculpas a la afición, sobre todo a la de Puebla, por el segundo tiempo que dieron. "No hay palabras para explicar esto... Estamos muy avergonzados, los muchachos están viviendo momentos muy difíciles. Les pido de favor que hoy no los toquen, realmente están sufriendo. En el segundo tiempo tuvimos muchos errores y nos enfrentamos a un gran equipo que no perdona nada". Al ser cuestionado sobre si son coincidencias las golizas recibidas por los equipos de Meza (9-2 en Invierno'96 y 6-1 en Verano'98), respondió: "A la mejor él ya me tiene tomada la medida".

En su habitual estilo, Meza se mostró mesurado, recordó que las goleadas siempre son circunstanciales, dijo que vio a su equipo "bien a secas, pero hoy fuimos muy contundentes", y ahora esperará a su nuevo rival, pero subrayó que este marcador no desubicará a sus jugadores.