MIERCOLES 17 DE MAYO DE 2000

Ť Horrorizado, por la cruel muerte de una mujer


Suspende Pastrana encuentro con las FARC y extranjeros

Ť Rechazan rebeldes implicación en asesinato con collar-bomba

Afp, Ap, Dpa, Reuters y Pl, Santafé de Bogotá, 16 de mayo Ť El presidente colombiano, Andrés Pastrana, anunció hoy la suspensión de un encuentro con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y delegados internacionales, previsto para fin de mes, en protesta por el asesinato ayer de un mujer con un collar-bomba, atribuido al grupo armado, pero los rebeldes rechazaron cualquier implicación con la acción, que también condenaron.

La fotografía de Elvia Cortés, de 55 años, con el collar-bomba que un grupo de hombres le colocó tras negarse a pagar una extorsión, poco antes de que explotara, apareció en todos los diarios, lo que generó una condena unánime de todos los sectores de la sociedad colombiana.

Al repudiar el asesinato, ocurrido en Chinquinquirá, en el departamento de Boyacá, el obispo de la localidad, Héctor Gutiérrez, sostuvo que "si se llega a establecer que la guerrilla es la causante de esta tragedia, le pedimos al gobierno que se revisen los parámetros de este proceso, que se levante la mesa de negociación".

Un grupo de hombres irrumpió la madrugada del lunes en la finca de Cortés, a unos 110 kilómetros al noroeste de esta capital, exigiéndole el pago de unos 7 mil 500 dólares, que ella dijo no tener. Le dejaron adherido un tubo galvanizado relleno de dinamita que, amenazaron, estallaría en 10 horas si su esposo e hijos no conseguían la suma exigida en ese plazo.

Fuerzas policiales y militares, alertadas por un vecino, llegaron poco después al lugar para prestarle auxilio urgente y la llevaron al borde de una carretera, indicó el coronel Fabio Rosa, comandante del batallón Sucre, la guarnición militar de la región.

Artificieros intentaron desactivar los explosivos durante unas seis horas, y habían logrado desactivar dos de los cuatro mecanismos de explosión cuando el collar estalló decapitándola, lo que provocó también la muerte de uno de los expertos en antiexplosivos, así como graves heridas a otras tres personas, precisó Rosa.

En lo que representa la primera ocasión en que el gobierno suspende unilateralmente una ronda de conversaciones en el proceso de paz --iniciado con las FARC a principios de 1999, para poner fin a una guerra que cobró la vida de 35 mil personas en la última década--, Pastrana anunció que giró instrucciones al comisionado para la paz, Camilo Gómez, para que suspenda "la audiencia pública internacional que estaba prevista realizarse a fines de mes sobre los temas de medio ambiente y cultivos ilícitos", al que estaban convocados representantes de 21 países, incluyendo Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania y Francia.

"No hay palabras para repudiar esta acción de la que hasta las bestias se avergonzarían", resaltó Pastrana, quien tras declararase "horrorizado, indignado, pero sobre todo decidido a terminar con esta barbarie", demandó a las FARC dar señales de buscar la paz.

Desde la zona de 42 mil kilómetros desmilitarizada al sur del país sudamericano, el comandante insurgente Iván Ríos aseveró que "tenemos la absoluta certeza de que nuestra gente no cometió este crimen que condenamos rotundamente".

Resaltó que las FARC no tienen presencia en esa zona, y tras advertir que "un asesinato como ese lo puede cometer cualquiera en nombre de las FARC", dijo a emisoras locales que la suspensión del encuentro internacional es un "paso en falso", al tiempo que criticó la actitud de los medios de comunicación por acoger con ligereza las informaciones que atribuyeron a las FARC el asesinato.

Por otro lado, el opositor Partido Liberal aceptó una propuesta de Pastrana para suscribir un "gran acuerdo nacional" y distensionar el clima político del país, al tiempo que el ejército ecuatoriano informó sobre la desarticulación de un grupo de "delincuentes" colombianos y ecuatorianos, con saldo de dos muertos y cinco detenidos.

La cancillería había informado antes que los colombianos estaban vinculados con la guerrilla de las FARC.