MIERCOLES 17 DE MAYO DE 2000
Ť Presiones de la derecha a jueces para detener proceso contra Pinochet
Molesto Ricardo Lagos por junta de jefes castrenses
Enrique Gutiérrez Aicardi, corresponsal, y agencias, Santiago, 16 de mayo Ť El presidente chileno, Ricardo Lagos, declaró hoy su molestia por la publicidad que recibió una reunión de los comandantes en jefe de las fuerzas armadas, ocurrida el lunes en un restaurante capitalino y que la prensa calificó como una "señal de unidad" ante el proceso de desafuero del ex dictador Augusto Pinochet.
Además, Lagos rechazó nuevamente las presiones "inadmisibles" de la oposición de derecha y aceptó reunirse este miércoles con representantes de esa corriente para manifestarles "que es inaceptable que parlamentarios (derechistas) sigan comentando las normas del Poder Judicial... y que están siguiendo un camino equivocado", en respuesta a la descalificación de los tribunales que hizo ayer el presidente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), el diputado Pablo Longueira.
Sin embargo, el presidente de Renovación Nacional, Alberto Cardemil, descartó la reunión con Lagos porque "no tiene sentido ir a enojarse, dar y recibir palabras duras y producir un problema mayor".
Cardemil es el coordinador de Alianza con Chile, integrada también por la UDI.
Visiblemente enojado, el mandatario declaró: "No seamos ingenuos, todos sabemos lo que se buscó el día de ayer. No es necesario ostentar la unidad de las fuerzas armadas, ni demostrársela a nadie, porque las fuerzas armadas están unidas detrás del presidente de Chile", y ordenó al ministro de Defensa, Mario Fernández, comunicar a los jefes militares "la molestia del presidente de la república".
Lagos, el segundo mandatario socialista después de Salvador Allende, remarcó que los comandantes en jefe pueden almorzar como cualquier persona en cualquier lugar, "pero cuando eso tiene la publicidad que tuvo ayer, tiene otro carácter".
Esta es la primera vez desde que asumió el poder en marzo en la que manifiesta su descontento con las fuerzas armadas.
Al encuentro asistieron el jefe de la armada, Jorge Arancibia, el comandante de la fuerza aérea, Patricio Ríos, y el jefe del ejército, Ricardo Izurieta, todos invitados por el director de la policía militarizada de carabineros, Manuel Ugarte. Para Izurieta, se trató "de una reunión más".
Sobre su entrevista con líderes de la UDI y Renovación Nacional, el mandatario enfatizó que los recibiría en La Moneda antes de viajar a Argentina para ratificarles que "el caso Pinochet está en los tribunales y nadie debe intervenir en ello... y para decirles que el tema de los derechos humanos es muy importante".
La alianza oficialista Concertación por la Democracia pidió al Poder Judicial que tome medidas contra el presidente de la UDI, quien este lunes calificó como una "chacota" (broma) el juicio de desafuero contra el senador vitalicio --que se reanudará el próximo día 24 en la Corte de Apelaciones de Santiago-- porque la justicia clasificó como "secuestros permanentes" algunos casos de detenidos desaparecidos.
Longueira cuestionó además la independencia y capacidad de los tribunales para llevar adelante el proceso, y su correligionario Jovino Novoa dijo que la Corte de Apelaciones y el juez Juan Guzmán carecen de competencia para juzgar a Pinochet porque sus actos, cualesquiera que hayan sido, fueron cuando era jefe de Estado.
El presidente de la Corte Suprema, Hernán Alvarez, declaró que la "expresión vulgar" de Longueira contra los tribunales "es inaceptable", mientras el dirigente socialista Francisco Encina señaló que lo dicho por la UDI "ha entorpecido el proceso democrático del país con una actitud que está al borde de la inconstitucionalidad".
El ministro del Interior, José Miguel Insulza, criticó también a los derechistas porque "me parece patético que estemos discutiendo si (los casos de los detenidos de- saparecidos) son homicidios o secuestros. Eso me produce repugnancia".
Por otra parte, el ex titular de la Central Nacional de Inteligencia, el general retirado Humberto Gordon, acusó a la Dirección de Inteligencia del Ejército del asesinato del dirigente sindical opositor Tucapel Jiménez, ocurrido en 1982, informó el diario electrónico El Mostrador.