MIERCOLES 17 DE MAYO DE 2000

Ť Se compromete a atender demandas de uniformados de forma inmediata

Intereses políticos, detrás del movimiento de policías auxiliares, denuncia el GDF

Ť Se pretende generar una crisis de inseguridad en la ciudad de México, dicen autoridades

Laura Gómez y Susana González Ť El gobierno capitalino se comprometió a atender de manera inmediata las demandas de policías auxiliares, que ayer se manifestaron en diversos puntos de la ciudad, mediante la instalación de mesas de negociación, aunque consideró que detrás del movimiento existen intereses políticos y electorales tendientes a generar una crisis de seguridad en la ciudad.

Ante más de mil 500 efectivos, que a su paso gritaba šSí se pudo! šSí se pudo!, Rosario Robles Berlanga llegó al escenario instalado en la Plaza de la Constitución, desde donde reiteró su disposición al diálogo para alcanzar acuerdos. "Nuestro gobierno es diferente, estamos delante de ustedes sin ningún temor, simplemente porque nos parece que coincidimos con lo que ustedes han planteado".

Recordó que durante la presente administración los cuerpos policiacos han sido atendidos como en ninguna otra, y enumeró las acciones más recientes en su beneficio: el otorgamiento de un bono de Navidad; el nuevo bono de riesgo, que se cobrará a partir del jueves, y la conclusión de una auditoría sobre el ejercicio de sus recursos, que se manejaron indebidamente durante dos años, y que la Contraloría espera tener a finales de mayo.

Además de que se plantea la absoluta homologación de sus salarios de acuerdo con los diversos niveles de la policía preventiva, aunque éstos se incrementaron de 2 mil 900 y 3 mil 400 a 3 mil 848 pesos, y la posibilidad de trabajar en la creación de una caja para la Policía Auxiliar con criterios transparentes y una estricta vigilancia, que se traduzcan en mejores prestaciones para los uniformados.

Acompañada por los secretarios de Gobierno, Leonel Godoy; y de Seguridad Pública, Alejandro Gertz, dijo que la pelea diaria de su gestión es contra la corrupción, por lo que los llamó a instalar una mesa de negociación, en la que se analicen las diferencias entre sus demandas y los beneficios obtenidos. Con este ofrecimiento acalló los chiflidos y gritos de descontento de algunos de los policías.

Posteriormente se reunieron en el interior del edificio de gobierno Rosario Robles, Gertz Manero y Leonel Godoy, así como Genaro Pérez Rocha y Muñoz Leos (ambos de la SSP) y el oficial mayor, Porfirio Barbosa, con siete representantes de los policías auxiliares Sergio Díaz Zavala, Gerardo Jiménez, Jaime Sánchez García, Raúl Felipe Rayo, Norberto García Santos, Domingo Bustos Figueroa y Leticia Herrera.

Díaz Zavala y Felipe Rayo, presidente y secretario general de la Comisión Ejecutiva de la Asociación Unica y Democrática al Servicio de la Comunidad AC, que organizó las diversas movilizaciones que confluyeron en el Zócalo, consideraron que la reunión con las autoridades capitalinas fue "satisfactoria" y "hubo avances", dado que en principio aceptaron la creación de una caja de previsión de la Policía Auxiliar, cuya conformación será definida por ambas partes en los siguientes encuentros.

Con esta caja, dijo Díaz Zavala, ya no es necesario exigir la creación de las plazas presupuestales para los policías, "se nos dijo claramente que no se nos van a dar, pero la caja cubre nuestras prestaciones".

Sin embargo, Raúl Felipe Rayo advirtió que si las negociaciones que se llevarán a cabo a partir de hoy y hasta el viernes próximo no son satisfactorias, entonces convocarán a la totalidad de los cerca de 40 mil policías auxiliares a realizar un paro total de labores para el próximo lunes 22 de mayo, a pesar de que ese mismo día tendrían otra reunión con la jefa de Gobierno capitalina para evaluar el avance en las negociaciones.

Antes, cuestionado sobre las razones por las que los policías no denunciaron penalmente a los comandantes de los agrupamientos por el mal manejo de los recursos retenidos en varios fideicomisos para sus prestaciones, Díaz Zavala dijo que no tenían pruebas y que sus asesores les indicaron que no había delito sino "una mala distribución del dinero", y además, Gertz Manero ya había presentado una denuncia ante la PGJDF.

Por el contrario, advirtió, "por ahí van a salir unas sorpresitas" y comentó la posibilidad de que denunciarían penalmente a los tres funcionarios del gobierno que encabezan el comité técnico de la asociación responsable de los fideicomisos: Armando Alvarez, Sergio Arias y Norma Munguía (cercanos a Porfirio Barbosa), a quienes acusó de sacar 160 millones de pesos de los fideicomisos para entregarles vales de despensa. "Tienen una pata en la cárcel los cabrones que sacaron ese dinero. No tenían por qué sacarlo", dijo.

Al mediodía, tras el arribo de casi todos los contingentes de policías auxiliares, algunos de ellos llevando consigo su arma de cargo, Gabriel Mendoza Jiménez, coordinador de Gestión Social del gobierno capitalino, salió para proponer que integraran una comisión de diálogo, pero a empujones y golpes un grupo de policías lo obligó a trasladarse hasta el templete y horas después subiría la jefa de Gobierno, ubicado en el extremo suroeste de la Plaza de la Constitución.

Este fue el momento de mayor tensión. Los uniformados rodearon al funcionario y otros de sus acompañantes para impedir que regresara al edificio de gobierno y comenzaron los empujones y una lluvia de proyectiles, desde bolas de papel hasta botellas vacías de refresco. Así, a empellones --e incluso patadas, según refirió el coordinador, a quien le quitaron su celular-- los alejaron de la zona de los arcos para llevarlos al templete donde a gritos los poli-cías exigieron solución a sus demandas mientras a su alrededor se formaron dos vallas para impedirles la salida donde permanecieron casi hora y media.